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miércoles, 21 de marzo de 2018

Sobre AMLO y el desprestigiado Poncho Romo

Sobre AMLO y el desprestigiado Poncho Romo

Federico Arreola










Me preguntan que si estoy de acuerdo con la columna “Alfonso Romo: el Bejarano de los empresarios” escrita de Elizabeth Flores, @Majhadera, y publicada ayer y hoy en SDPNoticias.com(http://sdpnoticias.com/columna/5107/Alfonso_Romo_el_Bejarano_de_los_empresarios).
Desde luego que estoy de acuerdo con @Majhadera, una joven y talentosa periodista que participa en varios movimientos sociales, como el de Andrés Manuel López Obrador, el de Javier Sicilia y el de México Toma la Calle.
@Majhadera, mujer de 26 años de edad, es egresada de la UNAM, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales en la que estudió la carrera de relaciones internacionales.
Ahora, Elizabeth Flores es una de las editoras de SDPnoticias.com. Acaba de empezar a colaborar con nosotros. Antes de integrarse a nuestro grupo, @Majhadera acompañó al poeta Sicilia en su recorrido por el sur de México. Y estuvo, no como parte de sus responsabilidades profesionales, sino por sus propias inquietudes, en el evento del domingo pasado de López Obrador. Desde luego, en las últimas filas del Auditorio Nacional, entre la base, es decir, entre la gente que realmente cuenta.
A Elizabeth, desde luego, le sobra autoridad moral para criticar a López Obrador. Es lo que pensé cuando leí ayer su columna sobre Alfonso Romo Garza, uno de los organizadores de la más reciente reunión de Andrés Manuel con los empresarios de Monterrey.
¿Que si estoy de acuerdo con lo que dice @Majhadera de Alfonso Romo? Por supuesto que sí.
1.- Es cierto que Romo, hace 15 años, era, si no el Carlos Slim de los empresarios, sí alguien tan destacado como Alberto Bailleres. Ya no lo es.
2- Es cierto que Romo, en sus épocas de gloria, competía con el propio Slim en algunos sectores. Ya no lo hace porque a Romo, como empresario, le ha ido mal. No es que haya dejado de tener dinero, que lo sigue teniendo, y mucho. Lo que ya no posee son grandes empresas.
3.- Es cierto que Romo pertenecía al Consejo de Televisa, empresa en la que era muy respetado. Ya no es así, lo echaron de ahí.
4.- Es cierto que Romo era un líder en la generación de biotecnología. Ya no lo es.
5.- Es cierto que Romo era el jefe de Pedro Aspe, el que fuera poderosísimo secretario de Hacienda de Carlos Salinas de Gortari. Ya no lo es. De hecho, ahora Aspe es un empresario más importante que Romo.
6.- Es cierto que Alfonso Romo, en sus buenos tiempos, prestigiaba a cualquier persona con la que se relacionaba. Ya no, ahora inclusive desprestigia.
7.- Es cierto que del Poncho Romo que era una leyenda empresarial ya no queda nada, o queda muy poco. Le pasó lo que a muchos en el mundo de los negocios: quebró. Es decir, quebraron sus empresas, él no. Por eso, recuerda @Majhadera a López Portillo, el suyo es un clásico ejemplo de “empresas pobres, empresarios ricos”.
8.- Es cierto que a las empresas de Romo les fue mal porque este dedicaba más tiempo a sus caballos que a vigilar sus inversiones..
9.- Es cierto que, por problemas financieros, Romo se tuvo que deshacer de casi todas sus grandes empresas, como Seguros Comercial América, Empaques Ponderosa y hasta Seminis, una compañía siempre cuestionada por los grupos ambientalistas.
10.- Es cierto, como dice @Majhadera, que “los negocios son una selva llena de bestias depredadoras que no perdonan al que fracasa”. Por eso a Romo se le dio de baja del Grupo de los 10 integrado por las principales dinastías empresariales de Monterrey.
11. Es cierto que “el fracaso empresarial llevó a Romo a perder relevancia social e influencia comunitaria”. Por eso, desde hace años, Poncho ha tratado de hacerla en la política. Apoyó a Vicente Fox, pero el primer presidente panista, cuando lo vio tan de capa caída como empresario, poco a poco lo marginó.
12.- Es cierto que Romo es un ultraconservador confeso capaz de cualquier cosa por defender la fe católica. Por eso se opuso, casi fanáticamente, a la construcción de un templo mormón en Monterrey, lo que le define como un hombre intolerante.
13.- Es cierto que Romo, negociando con el partido Convergencia, intentó hacer candidato presidencial en 2006 al priista gobernador de Sonora Eduardo Bours.
14.- Es cierto que Romo, asociado con Ramón Alberto Garza, exdirector de Reforma, ha incursionado en el periodismo a través de la revista digital Reporte Índigo, que ha publicado buenas notas pero que no tiene lectores, al menos no comparada con otras web informativas.
15.- Es cierto que Romo actuó como una especie de gestor financiero y estratégico cuando, hace años, Pedro Ferriz, Carmen Aristegui y Javier Solórzano se independizaron de MVS Radio para formar su propio medio, Grupo Imagen. También es cierto que Romo asesoró a Ferriz y a otros socios de Imagen en el despido de Aristegui y Solórzano, dos grandes periodistas críticos e independientes ,a los que se culpó del terrible pecado de haber cuestionado al Padre Maciel, del que Romo fue un apasionado defensor .
16.- Es cierto que ahora, como dice @Majhadera, “necesitado de reconocimiento Poncho Romo ha decidido participar en la contienda electoral de 2012… ¡Apoyando a Andrés Manuel López Obrador!”.
17.- Es cierto que “está tan desprestigiado Alfonso Romo entre los empresarios (es a la derecha lo que Bejarano es a la izquierda) que cuando lo vieron acercarse a Andrés Manuel se pusieron felices los hombres y mujeres de negocios que apoyan a Josefina Vázquez Mota, Santiago Creel, Ernesto Cordero y Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña Nieto”.
18.- Es cierto que Romo en ningún momento de la campaña presidencial de 2006 apoyó a López Obrador.
18.- Es cierto que “Andrés Manuel había hecho lo correcto al solo juntarse con empresarios medianos, pero importantes como Fernando Turner y Tomás López Rocha, así como muchos otros”. Y es absolutamente la verdad lo que dice @Majhadera: que a López Obrador “lo que no le hacía falta era sentar a su lado a un hombre de negocios que desechó la mafia empresarial cuando llevó a la quiebra a sus empresas”.
Algunos amigos de Monterrey, cuando ayer leyeron ayer la columna de Elizabeth Flores me dijeron que eran correctas sus críticas a Alfonso Romo, pero que se había quedado corta, sobre todo porque omitió el dato de que él fue demandado civil y hasta penalmente por su familia política que se sintió defraudada por los manejos que el ahora activista político hizo cuando controlaba las empresas propiedad de todos ellos.
Y bueno, yo recuerdo que, por fortuna, no se concretó la compra que Romo quiso hacer de Médica Sur, lo que salvó a este magnífico hospital de ser vendido a extranjeros cuando el empresario tuvo que deshacerse de casi todos sus negocios para salir de sus problemas financieros.
El movimiento de Andrés Manuel López Obrador es valioso por la gente modesta, talentosa y con principios como @Majhadera, una mujer que, como millones de personas, está con Morena no por el poder, sino por la ética; no por los cargos públicos, sino por el cambio verdadero; no por aparecer en los medios al lado de un dirigente famoso, sino por amor a México. Gente que prefiere perder las elecciones antes que ganarlas a cualquier costo o pactando con cualquier ambicioso vulgar.
¿Es Alfonso Romo un ambicioso vulgar? Supongo que sí. Si fuera un idealista o al menos alguien verdaderamente interesado en el cambio, se habría acercado a la izquierda en sus tiempos de poder empresarial, no después de que dejó de ser importante en el mundo de los negocios.
Respeto, admiro y aprecio a López Obrador, quien me ha honrado con su amistad y, también, permitiéndome colaborar con él desde 2005. Pero no puedo dejar de criticarlo si lo veo al lado de alguien que, ahí está la historia, fue capaz de perjudicar a una periodista tan vertical como Carmen Aristegui para favorecer a Pedro Ferriz… entre otras muchas acciones de dudosa honorabilidad.

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