Introducción:
Las crecientes tensiones entre Israel e Irán, las cuales alcanzaron un punto crítico con el lanzamiento de misiles hacia Israel desde territorio sirio y el contraataque por parte de Israel contra instalaciones iraníes en ese país, desencadenó un debate en Arabia Saudita sobre qué bando deberían apoyar los sauditas. Muchos intelectuales sauditas declararon que, en caso de una confrontación militar entre Irán e Israel, sin duda apoyarían a Israel, ya que Irán es el que amenaza a Arabia Saudita.
Los sauditas perciben la participación militar de Irán en la región, su presencia en Yemen y su apoyo a los rebeldes Houthi que luchan contra Arabia Saudita y lanzan cohetes contra sus ciudades, así como también su presencia militar en Siria e Irak y su participación en el Líbano como una amenaza existencial para su país. Israel, por otro lado, no es percibido como una amenaza para Arabia Saudita, sino como un posible aliado en la lucha contra Irán.
Ante este contexto, los intelectuales, periodistas y escritores sauditas expresan cada vez más un apoyo abierto a Israel, aprueban su política respecto a Irán e incluso llaman a normalizar las relaciones y hacer las paces con Israel. Esto, dijeron, pudiera poner un alto a las políticas hostiles de Irán, ya que la perpetuación del conflicto árabe-israelí le sirve a las ambiciones expansionistas de Irán.
En algunos casos, los intelectuales y periodistas sauditas también expresaron su apoyo a Israel en los temas relacionados al conflicto palestino-israelí, especialmente los enfrentamientos en la frontera de Gaza como parte de la campaña “La Gran Marcha del Retorno”. Algunos de ellos culparon por los sucesos a Hamas y a Irán, que dijeron estaban promoviendo sus intereses a expensas de la población juvenil en Gaza.
Cabe señalar que esta no es la primera vez que se escuchan tales voces en Arabia Saudita. En junio, 2017 Musa’id Al-‘Asimi, quien escribe para el diario Al-Riyadh, hizo un llamado a los árabes para que dejen de considerar a Israel como un estado enemigo y que en cambio centren su atención en el verdadero “enemigo”: Irán.[i] Además, en este último año ha habido muchos más informes sobre el acercamiento entre Israel y Arabia Saudita y sobre la participación de Arabia Saudita en la formulación del “Acuerdo del Siglo” del Presidente estadounidense Donald Trump para resolver el problema palestino, de una manera que favorece a Israel a expensas de los palestinos.
También cabe mencionar que, junto a la clara tendencia de los artículos que apoyan a Israel, los medios de comunicación sauditas continúan publicando muchos artículos críticos a este.
Este artículo revisará las voces sauditas pro-israelíes que recientemente se han incrementado.
Ex-vice editor de Al-Riyadh: Debemos hacer las paces con Israel y enfocarnos en la amenaza iraní:
El 14 de abril, 2018 Ahmad Al-Jumay’a, ex-vice editor del diario saudita Al-Riyadh[ii], publicó un artículo titulado “La Cumbre de Al-Dhahran: Paz con Israel, Confrontamientos con Irán”. En el artículo, publicado el día anterior a la cumbre de la Liga Árabe del 15 de abril, 2018 en Dhahran, Arabia Saudita, este afirmó que Irán era una amenaza mucho más grave para los árabes que Israel y que los árabes deberían llegar a un acuerdo de paz general con Israel para liberarse y concentrarse por sí mismos ante la amenaza iraní”.
Este escribió: “Durante 72 años, el tema palestino ha sido un tema permanente en la [agenda de] las cumbres de la Liga Árabe…
“Israel fue y sigue siendo el principal tema importante en la agenda de los árabes y en la agenda de las conferencias permanentes de la Liga Árabe. A pesar de todas las resoluciones aprobadas [sobre este tema], no hemos llegado a ninguna solución, o [para ser más precisos], ninguna solución que satisfaga a Israel. [Nuestra] preocupación con este tema nos ha impedido [lidiar con] los temas árabes esenciales, ante todo la amenaza iraní en la región y sus ramificaciones, que han llegado al punto de que cuatro capitales árabes [es decir, Bagdad], Damasco, Beirut y Sana’a] y tres islas de los Emiratos han sido ocupadas por Irán. Al mismo tiempo, Israel ocupa [solo] una capital árabe. Irán está extendiendo su sectarismo, exportando el terrorismo, apoya a las organizaciones extremistas e interfiere en los asuntos de otros, mientras que Israel nunca ha ido más allá de sus propias fronteras, al menos no en la última década.
“Los árabes deben entender que Irán es más peligroso que Israel, en particular la ideología [de Irán] que avanza mediante la expansión [y a través de obtener] control e influencias y existe gran cantidad de pruebas a ello. Este ha convertido su lema de “Muerte a Israel” en el justificativo para asumir fundamentalmente [su] ideología, su opresión y discriminación sectaria y su reclutamiento de células [en el mundo árabe] para de esta manera llevar a cabo su gran proyecto.
“Hoy, los árabes no tienen otra alternativa que reconciliarse con Israel y firmar un acuerdo de paz integral [con este], a fin de liberarse por sí mismos para enfrentar el gran plan iraní en la región y el programa nuclear [de Irán] para de esta manera poner fin a la intervención de [Irán] en los asuntos árabes…
“Rectificar [el enfoque árabe respecto a Irán] será una nueva manera para que [todos los árabes] traten [con Irán], no [solo] para los países [que ya] lo están haciendo y sufren las consecuencias y ramificaciones del plan iraní y las milicias partidistas que lo apoyan tal [como] lo hacen otros [países, una referencia a Qatar] y le extienden una mano a Irán que intenta acercarse a este. Esta lógica [es decir, intentar acercarse a Irán] ya no es aceptable y no puede ser pasada por alto, particularmente cuando el país árabe más importante Arabia Saudita, se ve expuesto a la amenaza de los misiles [disparados por] los houthis quienes están siendo patrocinados por Irán y su frontera sur es la línea de confrontación con estas milicias.
Ahmad Al-Jumay’a (Fuente: Scbnews.com, 25 de noviembre, 2017)
“La cumbre de Dhahran concluirá solo con la aprobación de una resolución histórica: paz con Israel y confrontación con el plan sectario de Irán. Eso se debe a que la conclusión es que, quienes rechazan la paz [con Israel] le sirven a Irán y deben asumir su responsabilidad por las consecuencias de su decisión”.[iii]
En un artículo publicado el 30 de abril, 2018 luego de la cumbre entre los líderes de Corea del Norte y Corea del Sur, Al-Jumay’a pidió a los árabes e Israel aprender del ejemplo coreano, porque el eterno conflicto árabe-israelí solo le permite a Irán continuar con su expansión regional, mientras que el logro de una paz justa e integral marcaría el comienzo de una nueva era de seguridad y estabilidad en la región. Este escribió: “La reconciliación política en la Península Coreana, la reunión histórica de los líderes de las dos Coreas después de 65 años sin relaciones, los arreglos que surgieron de la reunión y el final de las pruebas nucleares de Pyongyang, todo esto demuestra claramente que el diálogo y la paz son la solución a cada conflicto, sin importar sus causas, sus problemas o su duración, porque las hostilidades no pueden durar para siempre…
“Nosotros en el Medio Oriente estamos en una situación única y singular con el conflicto árabe-israelí, que aún no ha finalizado a pesar de la iniciativa de paz árabe [presentada en la Cumbre Árabe del 2002] en Beirut y a pesar de las reuniones internacionales de trabajo y el patrocinio y garantías para el [proceso] de paz por parte de los Estados Unidos. La razón principal de esto es que el tema palestino se ha convertido en un tema político [utilizado] para negociar y blandir consignas. Una razón aún más importante es la rígida postura de Israel. Todo esto ha hecho surgir un discurso árabe polarizado y problemático, que ha sido infiltrado [por elementos hostiles]. La Cumbre de Jerusalén, tal como el Rey Salman llamó a la cumbre [de la Liga Árabe] el 15 de abril, 2018 en Al-Dhahran y el énfasis en los derechos de los palestinos y ante el apoyo político y financiero para ellos, son la hoja de ruta hacia una paz justa y global con Israel, porque el conflicto no puede continuar de esta manera.
“Los árabes e israelíes deben aprender una lección de historia respecto a los acuerdos de paz y apresurarse a iniciar la [paz]. La región ya no puede tolerar más conflictos y división. Algunos países en la región todavía consideran el fracaso en realizar la paz árabe-israelí como una oportunidad de [expandir] sus influencias y controles. El primero de estos es Irán, que esgrime las consignas de “Muerte a Estados Unidos” y “Muerte a Israel” como una forma de alimentar las llamas del conflicto, infiltrarse dentro de las fuerzas árabes y actualizar el objetivo de difundir el mandato del jurisprudente. Lograr una paz justa e integral significa… detener el plan iraní y dar paso a una nueva era de estabilidad y paz en la región”.[iv]
Los artículos de Al-Jumay’a provocaron respuestas y muchas críticas. Por ejemplo, Jasser Al-Harbash, columnista principal del diario saudita Al-Jazirah, respondió a Jumay’a en una serie de tres artículos titulados “Una Mirada Comparativa a los Planes Iraníes y Sionistas”. Este argumentó que ambos planes son peligrosos para los árabes, pero que el plan iraní es algo menos peligroso porque es un plan a corto plazo.[v]
Para ver el despacho en su totalidad en inglés junto a las imágenes copie por favor el siguiente enlace en su ordenador: https://www.memri.org/reports/shift-saudi-medias-attitude-israel-%E2%80%93-part-i-saudi-writers-intellectuals-iran-more-dangerous
*Z Harel es compañero investigador en MEMRI.

[i] Véase la serie de MEMRI Despacho Especial No. 6951 – Columnista saudita: Irán es el verdadero enemigo, no Israel, 6 de junio, 2017.
[ii] En octubre, 2016 el diario saudita en la red Sabaq informó que Al-Juma’ya había renunciado a su cargo como editor adjunto, que ocupó desde el año 2014. Cabe señalar que la página de sus artículos en el portal Al-Riyadh todavía indica que él es el editor adjunto, pero el portal puede que no haya sido actualizado. Sabq.org, 9 de octubre, 2016.
[iii] Al-Riyadh (Arabia Saudita), 14 de febrero, 2018.
[iv] Al-Riyadh (Arabia Saudita), 30 de abril, 2018.
[v] Al-Jazirah (Arabia Saudita), 18-23-25 de abril,