LA GUERRA SUCIA CONTRA LIBIA

LA GUERRA SUCIA CONTRA LIBIA


Marcos Domich




Conforme se desarrollan los acontecimientos bélicos en Libia se aclara el carácter, los procedimientos y sobre todo los motivos de la acción de las potencias capitalistas, de la OTAN y sobre todo del imperialismo yanqui. La supuesta preocupación por los derechos humanos y la seguridad de los ciudadanos aparece tal como es: un pretexto para una agresión e intervención, de inconfesables intenciones, violatoria de la ley internacional, y hasta las últimas resoluciones aprobadas por la ONU, su Consejo de Seguridad e incluso las propias disposiciones de la OTAN. Ha quedado como un papel mojado para la historia la Resolución unánime del 24 de febrero que disponía sanciones comerciales, de comunicación, embargo de armas, etc. contra el régimen de Muamar el Gadafi y excluía el uso de la violencia.

Inmediatamente después, al comprobar que Gadafi era un hueso duro de roer, política y militarmente hablando, pero sobre todo que tenía un fuerte apoyo popular empezaron a operar de una manera no autorizada en el establecimiento de la zona de exclusión aérea. Esta ya no fue aprobada por unanimidad. Hay que recordar que cinco países se abstuvieron (China, Rusia, Brasil, la India y…Alemania). Hoy se percibe que la China Popular y la Federación Rusa – que pudieron utilizar su derecho a veto - están arrepentidos de la abstención. Olvidaron que la zona de exclusión aérea ya es un acto de guerra, pues implica entrar al espacio aéreo de un país soberano. Pero sobre todo olvidaron la historia, lo que sucedió en Yugoslavia, en Irak, donde fue atacada la población civil (trenes de pasajeros, hospitales, centrales eléctricas, etc.), exacto lo que están haciendo en Libia.

¿Por qué Gadafi es un hueso duro? Por los primeros 20 años de gestión. El mayor nivel de vida de África; el más alto nivel de educación, salud; las grandes obras que estaban trasformado el desierto en tierras cultivables, etc. Después Gadafi comenzó a conciliar con los gobiernos capitalistas de Europa y EUA, con las transnacionales; privatizó parte del petróleo y compraba millones de dólares de armas al contado. Pero estos no le perdonan ni su pasado ni el hecho de que siempre fue un díscolo en materia internacional. Entonces eligieron la mejor coyuntura: la ola revolucionaria democratizadora del mundo árabe, aprovecharon el descontento, sobre todo de Cirenaica, con el autoritarismo, la corruptela y el desgaste de 42 años de ejerció de poder sin parlamento, sin ningún partido político, etc. Entonces comenzaron a infiltrar agentes y armas, hasta potentes misiles a Bengasi y otras localidades en poder de los rebeldes y con la cobertura de los brutales bombardeos de la OTAN. Lo peor de todo: emplean proyectiles con uranio empobrecido, bombas de asbesto y de fragmentación, armas no convencionales, como lo hicieron en Bosnia y Kosovo en Irak y en Afganistán.

Mas Gadafi comenzó la contraofensiva y está derrotando a la insurgencia que tiene muchas grietas. Pero lo importante es parar la guerra y resolver el conflicto interno en la mesa de negociaciones, sin intervención extranjera. ¡Suerte Padre Miguel d’Escoto!