Gadhafi y su pueblo continúan resistiendo los criminales ataques de las hienas imperiales

Gadhafi y su pueblo continúan resistiendo los criminales ataques de las hienas imperiales
Es bien sabido que en los pueblos y sociedades de influencia islámica, política y religión marchan tan unidas que llegan a confundirse. En el caso particular de Libia, el 96% de sus habitantes comulgan con la rama “sunita” del islamismo, la misma de su líder Muammar Al Gadhafi, el 4% restante comulga con las otras ramas del mismo, incluida la Chiíta, y un pequeño sector con Al-Qaeda.

Sin embargo, el gobierno de los Estados Unidos de América en contubernio con otras potencias neocolonialistas occidentales, como Francia, Inglaterra e Italia, en su afán por encontrar pretextos para invadir a Libia, derrocar a Gadhafi, imponer un gobierno de peleles que ya integraron con corruptos libios residentes en sus capitales, y finalmente apoderarse de sus riquezas petrolíferas, de otros minerales estratégicos y de su importante localización geoestratégica, se están apoyando en este sector minoritario que por diferencias religiosas y las ambiciones de sus dirigentes no se ha querido vincular plenamente al proceso de desarrollo socialista que viene liderando Gadhafi, motivando su descontento y sublevación, y una vez más estas potencias imperialistas esgrimen su concepto particular de democracia, según el cual solo son legítimos y respetables los gobiernos y agrupaciones políticas que les marchen a sus intereses y atiendan sus orientaciones neocolonialistas, entregándole sus países en bandeja para que los saqueen y hagan lo que se les antoje. Y de esta manera abusando del control sobre los grandes medios desinformativos, desacreditan a los gobiernos y dirigentes consecuentes con sus pueblos y contrarios a las prácticas neocolonialistas, expoliadoras y humillantes. Esto ya quedó demostrado en el respaldo que han dado los gobiernos de estas potencias a gobiernos de facto, golpistas y criminales como el de Pinochet en Chile y las dictaduras criminales que se dieron entre los años de 1.960 a 1.990 en otros países de Centro y Suramérica, como Nicaragua, Salvador, Guatemala, República Dominicana, Haití, Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia y Brasil. Al igual que ha venido ocurriendo con todos los regímenes despóticos y criminales de África, donde además desde hace décadas han financiado grupos paramilitares y guerrillas mercenarias al servicio de oligarquías locales, a objeto de desestabilizar a los países con gobiernos democráticos progresistas, socialistas y antiimperialistas, y de impedir la consolidación de su desarrollo autóctono.

En sus afanes los colonialistas occidentales desconocen que en Libia ha funcionado una democracia mucho más participativa que las que han funcionado en algunos de sus países, donde existe un Jefe de Estado, que es Gadhafi, un Jefe de Gobierno que preside a un Comité General del Pueblo de 22 miembros, cada uno responsable de una cartera o departamento, y un Congreso o Parlamento de 3.000 miembros, elegidos todos por el pueblo libio. Además, en materia de justicia cuenta con Corte Suprema, Cortes de Apelaciones, Cortes de Primera Instancia y Cortes Sumarias. Ordenamiento que nunca han violado el gobierno de Gadhafi y su Partido.

Hoy después de más de un mes de resistencia del pueblo libio y su líder legítimo a los terribles bombardeos de las poderosas fuerzas de la OTAN, Inglaterra, Francia, Italia y los Estados Unidos, mediante los cuales han asesinado a centenares de civiles y destruido una parte fundamental de su infraestructura civil y productiva lograda durante muchos años de esfuerzos. El presidente Barack Obama además de declarar descaradamente a través de los grandes medios haber autorizado a la CIA para realizar “Operaciones Encubiertas en Libia”, es decir, secuestros, asesinatos y desapariciones de dirigentes independentistas y socialistas, ya que no les ha sido posible eliminarlos con los bombardeos; también ha ordenado la realización de bombardeos con aviones no-tripulados. Lo que quiere decir que es Obama quien abusando criminalmente de los avances científicos y tecnológicos, está poniendo en práctica la famosa “Guerra desde las Galaxias” anunciada por Ronald Reagan, acciones terroristas con las cuales le están produciendo muchos daños y sufrimientos al pueblo libio, y que le significara un retroceso de muchas décadas. Además que el imperio tiene la manía de pasarle la cuenta de cobro del costo de sus agresiones a los países victimas de las mismas, es decir que también las utiliza para esclavizarlos a través del endeudamiento externo, tal como ha ocurrido en sucesivas veces con Haití.

Particularmente hay que condenar la forma como los últimos presidentes de los Estados Unidos de América se han ensañado contra Gadhafi y su familia, bombardeándoles sistemáticamente sus residencias en horas de descanso y dejando como saldo el asesinato de algunos de sus miembros y de otras personas del vecindario, incluidos niños.

Pero como dijo Martín Luther King, lo que mas le duele a uno es la indiferencia de las personas buenas ante los actos de barbarie y los crímenes de lesa humanidad cometidos por las personas malas. El pueblo libio necesita la solidaridad de los demás pueblos y personas democráticas y progresistas del mundo, a objeto que estas hienas imperiales paren sus criminales ataques y respeten el derecho a la autodeterminación de los pueblos.

Hoy ante las descaradas alianzas de las burguesías y sectores imperialistas del mundo para masacrar y esclavizar a los pueblos, cobra vigencia la afirmación de Carlos Marx y Federico Engels de que los pueblos del mundo solo podrán liberarse de la esclavitud capitalista unificando sus fuerzas y acciones, y poniendo en practica la más amplia y profunda solidaridad clasista, de lo contrario serán derrotados aislada y selectivamente en forma indefinida, enseñanza que fue puesta a prueba para el triunfo del pueblo vietnamita, para la consolidación de la Revolución Cubana, para el triunfo del pueblo angoleño, para la derrota del régimen del apartheid en Sudáfrica y para la derrota de las dictaduras de Centro y Suramérica, entre otras/os. Y como expresión de su profunda convicción en lo afirmado, estos dos extraordinarios ideólogos de los pueblos del mundo inmortalizaron la consigna: ¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES UNIOS!, que es urgente ponerla a prueba una vez más.