¿Y si los mayas tienen razón? suicidio colectivo en el 2012 ?

¿Y si los mayas tienen razón?
Hace poco me di cuenta de lo complejo que es ponerle "buena onda" o linda cara a situaciones del día a día. Al volver de las vacaciones (en términos locales), uno normalmente viene en la denominada "nube de pedos" (dícese del estado en el que todo está bien y el estrés ajeno no logra producir grietas en la felicidad de uno).

La denominación es el resultado de una mezcla de envidia sana y la delgada posibilidad de creer que el prójimo puede en realidad estar viendo el vaso mitad lleno cuando ante nuestros ojos está mitad vacío.

Este año decidí estirar ese estado de felicidad absoluta. Me dije a mí mismo que las vacaciones son un estado mental y así planeo vivir. La inspiración de esta actitud es la frase: ¿Y si los mayas tienen razón?

Pongamos como un supuesto que en el 2012 la película llega a su fin. Suena mórbido y normalmente la gente no quiere pensar en el inevitable fin. Pero, me dije que sería una linda idea tratar al 2011 como el último año de la civilización, ponerle la mejor cara a esa idea, aprender las cosas que siempre quise aprender, dormir menos, disfrutar de un poco más con la familia, los amigos y simplemente sonreír ante cualquier iracunda situación que se pueda presentar. Hace dos semanas vengo probando esta teoría y me llena de alegría todos los días... es interesantón y simpaticón.

Todos somos egocéntricos de nacimiento, es una cualidad humana con la que nacemos, lloramos para conseguir lo que queremos (y funciona). Y, a medida que pasan los años, no se nos ocurre mejor idea que seguir con el berrinche para llegar adonde queremos. Debo confesar un secreto: habiendo probado ambas teorías, la sonrisa y palmada en la espalda le hace 6-0 al ceño fruncido y suspiro seguido de "dejá nomás voy a hacer yo". Si no me creen, compruébenlo esta semana. Arranquen ignorándole en un 100% a la mala onda. Todo lo que instintivamente se sienta a "debería matar gente en este momento", contrarréstenlo con un "¿en serio me decís?".

Al tomar genuino interés en el problema ajeno, el problema se divide en 2, ahora hay dos personas tratando de solucionarlo. Suena muy hippy, y de cierta forma lo es, sin la cursilería. Si después terminamos todos en algún lugar del interior paseándonos como zombies en kombis, que así sea, pero por ahora empecemos con una sonrisa y un apretón de manos al mal tiempo. Como me diría mi primo Pablo: "Abrazo".