sábado, 6 de agosto de 2011

Las catastrofes naturales a las luz del amor y la misericordia de Dios

Las catastrofes naturales a las luz del amor y la misericordia de Dios


BENDITO SEA EL NOMBRE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO POR SIEMPRE, Y QUE ENSU INMENSO AMOR Y SU UNMENSA MISERICORDIA,
PUEDA APIADARSE DE LAS ALMAS Y PUEDA ABRIR LAS MENTES Y TOCAR LOS CORAZONES DE TODOS AQUELLOS QUE TODAVIA NO LE CONOCEN, PARA QUE DE ACUERDO A SU VOLUNTAD Y A SU TIEMPO PUEDAN CONOCERLE Y RECIBIRLE EN SU CORAZON PARA GLORIA Y HONRA DE SU MAJESTAD NUESTRO SEÑOR.
POR CADA ALMA QUE SE ARREPIENTE DE TODOS SUS PECADOS, HAY FIESTA EN EL CIELO, Y TODOS LOS CRISTIANOS NOS GOZAMOS POR SU SALVACION.
GRACIAS A DIOS POR ESTE PEQUEÑO MOMENTO DE COMUNION EN SU NOMBRE.

--- El mar, 16/2/10, walter miguel medrano escribió:


De: walter miguel medrano
Asunto: Las catastrofes naturales a las luz del amor y la misericordia de Dios
Para: "Jose Sosa"
Fecha: martes, 16 de febrero, 2010 23:39


LAS CATASTROFES NATURALES A LA LUZ DEL AMOR Y LA MISERICORDIA DE DIOS


"Todo mi ser te desea por las noches; por la mañana mi espíritu te busca. Pues cuando tus juicios llegan a la tierra, los habitantes del mundo aprenden lo que es justicia" Isaías 26: 9 (NVI)

Cuando recibimos noticias de catástrofes que ocurren en diversos lugares del mundo (a veces, casi en forma simultánea), acuden a nosotros preguntas tales como: ¿Está castigando Dios a la gente?...¿Por qué tienen que sufrir los inocentes?...¿Cómo debo entender las catástrofes a la luz del amor y de la misericordia de Dios?, etc.
Desde la antigüedad, el hombre ha sido testigo de sucesos catastróficos, imnposibles de detectar e imposibles de detener, tales como terremotos, maremotos, lluvias torrenciales, inundaciones, huracanes, olas de calor y/o de frío, etc. los cuales han dejado a su paso desolación y miseria. Pero, ¿qué aprendemos de todo esto? La Biblia dice que debemos aprender lo que es la justicia de Dios: "cuando tus juicios llegan a la tierra, los habitantes del mundo aprenden lo que es justicia"

En un momento de la historia hubo un diluvio que casi desapareció a la raza humana, salvándose solo 8 personas: Noé y su familia. La Biblia nos dice la causa de este diluvio: "Y se corrompió la tierra delane de Dios y estaba llena de violencia...Dijo, pues, Dios a Noé: He decidido el fin de todo ser porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí yo los destruiré con la tierra" (Génesis 6: 11-13)

Muchos años más tarde, dos ciudades antiguas fueron también destruídas, estas fueron Sodoma y Gomorra. ¿Cuál fue el motivo de su destrucción? La Biblia nos lo dice: "Entonces Jehová dijo a Abraham: Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra se aumenta más y más y el pecado de ellos se ha agravado en extremo...vamos a destruir este lugar..." (Génesis 18: 20; y 19: 13)
El pecado y la corrupción atraen los juicios de Dios. No hay consecuencia sin causa.

El Señor Jesucristo dijo que El regresaría a la tierra en tiempos finales cuando la maldad de la gente haya sobrepasado el límite de la paciencia divina. Entonces vendrían sobre la tierra señales anunciadoras de su retorno: "...y habrá pestes y hambre y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores" (Mateo 24: 7-8) Nosotros estamos viviendo en estos tiempos finales, y las señales del fin se están dejando sentir. Este mundo va a sufrir las consecuencias de la violencia de la gente. El clamor de los que sufren está subiendo cada día más delante e Dios, y el juicio divino tiene que llegar.

Tenemos que buscar a Dios. El hombre tiene que arrepentirse de sus pecados y de su maldad y refugiarse en la misericordia divina. Tiene que anhelar la presencia de Dios en su vida en una forma muy íntima. Como decía el profeta: "Todo mi ser te desea por las noches; por la mañana mi espíritu te busca". Sólo así el hombre hallará seguridad en El.

Dios bendiga rica y abundantemente hoy y siempre, a todos los que le escuchan.

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