jueves, 29 de septiembre de 2011

Anticonceptivos y Aborto

Anticonceptivos y Aborto
A. INTRODUCCIÓN.
La cuestión del control de la natalidad ha originado mucho debate en el mundo occidental. Esta cuestión tiene que ver con el criterio básico sobre el sexo. Por una parte, si se relaciona sexo con pecado original y se equipara con maldad, y se permite la relación sexual únicamente con el propósito de la procreación –entonces, obviamente, se estará totalmente en contra del control de la natalidad. Permitir el control de la natalidad significaría permitir el sexo por placer. Por otra parte, si se considera al sexo como un acto natural cuyo propósito es doble: la procreación y/o la satisfacción del deseo sexual, entonces se debería permitir el control de natalidad. El debate sobre el control de natalidad, además, está entrelazado con el tema del aborto.

En general, hay tres opiniones sobre el control de natalidad y el aborto. En un extremo, la Iglesia Católica Romana prohíbe tanto el control de natalidad como el aborto; y en el otro extremo, liberales y feministas consideran el control de natalidad y el aborto como derechos básicos de la mujer. Entre estos dos extremos, el Islam permite el control de natalidad pero prohíbe el aborto.

De acuerdo con el fiqh shi'a, la planificación familiar –como una medida encaminada a espaciar o regular el tamaño de la familia, por razones de salud o económicas- es permisible. No hay ninguna aleya del Corán o hadiz en contra del control de natalidad, ni es wáyib (obligatorio) tener niños en el matrimonio. Así, básicamente, el control de natalidad estará considerado un acto yá'iz (lícito, permisible).

Además, tenemos algunos ahadiz (especialmente sobre el tema del 'azl, (coitus interruptus) los cuales prueban categóricamente que el control de natalidad es permisible.

Una vez el Imam 'Ali (a.s.) dijo, "Uno de los dos medios de obtener riqueza es tener pocos descendientes."

El Imam Ya'far as-Sâdiq (a.s.) dijo: "(El Imam) 'Ali Ibn al-Husein (la paz sea con él) no vio problema en el coitus interruptus y solía recitar la aleya 'Y cuando tu Señor sacó de las espaldas de los hijos de Adán a su descendencia…' (Corán, 7:172). Así, Alláh ha decretado toda descendencia y es seguro que ésta nacerá, hasta si se eyaculó sobre una roca dura."

El Imam está diciendo con esto que la creación está en manos de Alláh exclusivamente. Tanto si practicamos o no el control de natalidad, si Alláh quiere, el niño será concebido. En efecto, estos ahadiz son una prueba positiva de que el control de natalidad está permitido en el Islam.

Sin embargo, algunas veces el tema del control de natalidad es politizado por los regímenes imperialistas y racistas; y en tales casos, el muytahid supremo tiene el derecho a prohibir temporalmente el uso del control de natalidad sobre la base de razones secundarias (hukm zánawi). Por ejemplo, si el gobierno ruso planea imponer o promover el control de natalidad en sus provincias musulmanas no por razones de salud sino por temor a que un porcentaje alto de nacimientos entre los musulmanes pudiera renovar su estatus minoritario, entonces el muytahid puede dar un fatwa diciendo que la práctica del control de natalidad en Rusia (sin ninguna razón de salud) sería harám. O, si el gobierno israelí, por ejemplo, promueve el control de natalidad entre los musulmanes dentro de los territorios ocupados, entonces el mufti puede prohibirlo. Similarmente, si el gobierno hindú o el gobierno libanés pretenden promover el control de natalidad entre sus ciudadanos musulmanes, entonces el muytahid supremo puede prohibir el uso del control de natalidad. Tales fatwas serán exactamente de naturaleza temporal; una vez que el tema se haya despolitizado, la ley inicial será aplicada de nuevo.

B. . ¿CUÁNDO COMIENZA EL EMBARAZO?
El Islam permite la prevención del embarazo, pero no permite su interrupción voluntaria. Sin embargo, el problema estriba en la definición del comienzo del embarazo desde el punto de vista de la shari'ah.

Antes de examinar varios métodos de control de natalidad, debemos definir primeramente el comienzo del embarazo; solamente entonces seremos capaces de decir cuál método es permitido y cuál no. Mi investigación no ha logrado encontrar una discusión en los libros clásicos de fiqh sobre la definición de la shari'ah de embarazo. Incluso los actuales muytahids no lo han analizado. Pretendo, depositando mi confianza en Alláh, estudiar el tema resumidamente a luz de las explicaciones científicas e intentar llegar a una definición correcta del embarazo.

Antes de seguir, es necesario explicar los criterios de definición de varias cosas y asuntos en las leyes islámicas. Hay tres posibles criterios en fiqh..

1) Definición Shar'i: Cuando alguna cosa está definida claramente en la shari'ah, por ejemplo, la definición de la palabra 'salát' como oración ritual, consistente en acciones y recitaciones específicas.

2) Definición 'Urfi: convencional, tradición usual. Definición 'urfi quiere decir una definición aceptable por la gente corriente sin ninguna precisión científica o shar'i.

3) Definición 'ilmi: Es la ofrecida por la ciencia; por ejemplo, la definición de agua pura: H2O, como un compuesto líquido consistente en dos partes de hidrógeno y una de oxígeno, o la definición del comienzo del día como ocaso astronómico.

Si la shari'ah define algunas cosas, entonces debemos seguir la definición shar'i.. Pero si hay silencio sobre la definición de ciertas cosas, entonces ¿Debemos seguir la definición 'ilmí o la 'urfi?. Cualquiera que esté familiarizado con la shar'iah estará de acuerdo conmigo en que en ausencia de definición shar'i, uno tiene que seguir la definición 'urfi. Uno tiene que atenerse a la percepción usual de las cosas, no a la percepción científica. Por ejemplo, cuando la shar'iah dice que el agua para la ablución ritual debe ser pura (mutlaq), ¿Significa científicamente pura?. Ciertamente, no. Por otra parte, el agua corriente en esta parte del mundo no es científicamente pura, presenta algunas sustancias químicas, por ejemplo, flúor. La shar'iah dice que tal agua será clasificada como pura a menos que la gente común pueda percibir (sin la ayuda de un laboratorio científico) alguna diferencia en su color, sabor u olor.



Sin embargo, hay un caso donde la definición 'ilmí prevalecerá: en los casos donde la gente común no tenga forma de definir el tema. Así, en los casos donde la shar'iah está en silencio y el 'urf no tienen opinión, uno no tiene más remedio que seguir la definición (científica) 'ilmí.

La definición del comienzo del embarazo es uno de tales casos, en los que la definición 'ilmí debe prevalecer; ya que la shar'iah guarda silencio y está fuera del alcance de la gente corriente definir cuando comienza el embarazo. Por lo tanto, en este caso, veremos en primer lugar como la ciencia describe el comienzo del embarazo y después trataremos de encontrar pruebas secundarias en las fuentes de la shar'iah para llegar a una conclusión.

El proceso de la concepción y del embarazo de acuerdo con la ciencia moderna es como sigue: Después de que el semen es eyaculado dentro de la vagina, los espermatozoides avanzan hacia el útero, lo atraviesan y entran en las trompas de Falopio. El óvulo de la mujer se encuentra en la trompa de Falopio. Los espermatozoides recorren el conducto en busca del óvulo. Cuando los espermatozoides alcanzan el óvulo, normalmente solo uno de ellos consigue penetrar en el óvulo. Esta unión del espermatozoide del hombre y el óvulo de la mujer es conocida como fertilización. Después de la fertilización, el óvulo fecundado comienza su recorrido hasta el útero; y después de llegar al útero, consigue implantarse en sus paredes. Este proceso es conocido como implantación del óvulo fertilizado en el útero.

Para determinar el embarazo shar'i, se tienen que responder a las siguientes cuestiones: Desde el punto de vista de la shar'iah, el embarazo comienza:

1) con la entrada del semen dentro del útero o

2) con la fertilización de un óvulo por un espermatozoide en el oviducto o

3) con la implantación de un óvulo fecundado en el útero.

En mi opinión, la combinación de los tres forman el embarazo shar'i: el espermatozoide, el óvulo y el útero. Si dos de estos se combinan sin el tercero, entonces no será un embarazo shar'i. Probaré más adelante que el embarazo shar'i comienza cuando el óvulo fertilizado se implanta sobre la pared del útero.

En mi búsqueda de una definición shar'i, el único tema más cercano que he encontrado ha sido el de la discusión sobre la indemnización por aborto. En el fiqh shi'a la indemnización por aborto difiere de acuerdo con los diferentes estados del embarazo. Sin embargo, lo que es relevante para nuestro análisis es la indemnización en los primeros cuatro meses del embarazo. Durante estos cuatro meses, el embrión dentro del útero de su madre es conocido como yinín. El Yinín pasa gradualmente por cinco estados con diferentes nombres:

· Nutfah, cuando es un esperma;

· Alaqah, cuando es un coágulo como de sangre;

· Mudgah, cuando es una masa de carne;

· 'izam, cuando es una masa de huesos;

· lahm, cuando es cubierto de carne

El primer estado es crucial para nuestra búsqueda del comienzo del embarazo. La mayoría de los ahadiz dicen sencillamente que la indemnización más baja es por abortar un 'nutfah' –esperma. En una primera observación parecerá que de acuerdo con estos ahadiz, el embarazo empieza tan pronto como una gota de esperma entra en el útero. Esto significaría que prevenir que el semen entre en el útero estaría permitido pero una vez que ha entrado en el útero, estaría prohibido abortarlo. Pero esto no es así. Esto hubiera sido correcto si la palabra 'nutfah' fuera tomada solo en su sentido literal significando ¡un esperma'. Sin embargo, en el fiqh y en el hadiz, la palabra 'nutfah' es usada tanto para un esperma como par un óvulo fertilizado (zigoto). Afortunadamente este significado ampliado de la palabra 'nutfah' ha sido clarificado en el siguiente hadiz del Imam Zayn ul 'Abidín:

Sa'id b. al Musayyab preguntó al Imam Zayn ul 'Abidín sobre un hombre que golpeó con su pierna a una mujer embarazada y, como resultado, ella perdió lo que llevaba dentro de su útero. El Imam dijo, "Si es un nutfah, entonces él debe pagarle a ella 20 dinares." Sa'id le preguntó, "¿Cual es la definición de nutfah?". El Imam dijo, "Es una sustancia la cual, cuando se sitúa en el útero, se instala en él durante cuarenta días. El Imam ha usado dos palabras para describir al nutfah: (1) wuzi'at fir rahm –se sitúa en el útero, y (2) fastaqarrat fíhi –se instala en él. Parece que el Imam está enfatizando que el estado más temprano de aborto no es cuando un esperma entra en el úitero en un primer momento y lo recorre, sino, más bien, cuando se instala en él. Obviamente, la 'instalación del esperma en el útero' y la 'implantación del óvulo fertilizado en el útero' son la misma cosa.

Es innecesario decir que la distinción entre la entrada del esperma en el útero, a continuación la fertilización del óvulo en la trompa de Falopio y finalmente su implantación no eran procesos claramente conocidos por los sabios del fiqh y los científicos hasta hace un siglo. Pero la palabra 'istiqrár –instalación, muestra que nuestros 'ulama' no ignoraban del todo el hecho de que el esperma pasa por varios estados antes de instalarse en el útero. Si ellos lo hubieran ignorado completamente, entonces no hubieran usado la palabra istiqrár, es más hubieran dicho la entrada del esperma en el útero. Esta diferencia llega a ser más clara en los escritos de los 'ulama' posteriores al siglo séptimo de la hégira. Antes del siglo VII, encontramos las expresiones tales como 'ilqá'un nutfah' (la entrada del esperma). Pero después del siglo VII, los 'ulama' de forma consistente comienzan a usar la expresión de 'istiqrárun nutfah' (la instalación del esperma) Hasta los actuales muytahids describen el estado más temprano del aborto como sigue: "abortar un esperma después de su instalación en el útero (ba'd istiqráru nutfah fir rahn)."

Además, el Corán siempre ha usado la palabra 'haml' para describir el embarazo.. 'Haml' significa llevar, y es obvio que una mujer lleva el bebé en su útero y no en sus trompas. Y haml comienza con la implantación y no antes.

En conclusión, puedo decir que el comienzo del embarazo desde el punto de vista de la shar'iah es el estado en el que el óvulo fertilizado (zigoto) es implantado (istiqrár) en el revestimiento del útero. Y, por lo tanto, todo lo que prevenga la implantación está permitido pero todo lo que aborte a un zigoto implantado es harám. Un año después de alcanzar mi decisión en 1986, escribí al Ayatolláh al-Jú'i lo siguiente, pidiéndole su opinión sobre este tema:

"Desde el punto de vista médico, después de que el esperma entra en la vagina, atraviesa el útero y entra en la trompa de Falopio. En este conducto, el esperma se une al óvulo. A continuación, el óvulo fecundado entra en el útero y se implanta en su pared. (Aparentemente, la expresión 'istiqrárun nutfah fir rahm' en los escritos de los juristas islámicos se refiere a esta implantación del óvulo fecundado en la pared del útero).

Manteniendo en mente lo que he dicho con anterioridad, ¿Es permisible usar un medicamento o un dispositivo que evite que el óvulo fertilizado se implante sobre la pared del útero?".

Ayatolláh al-Jú'i me contestó:

"Lo que está prohibido es abortar el esperma después de su instalación, todo lo que (previene el embarazo) antes de eso es correcto. Sin embargo, especificar cual es la menor y la mayor premisa de ambos asuntos está bajo el aspecto individual de cada uno.".

Pienso que la respuesta del Ayatolláh al Jú'i necesita algunas explicaciones para aquellos que no están familiarizados con el estilo de los fuqahá. En la primera parte de su respuesta, el Ayatolláh está de acuerdo en que lo que está prohibido con relación al control de natalidad, es el acto de abortar el esperma después de que se haya instalado en el útero. En la segunda parte de su respuesta, el rehusa, al tomarlo bajo su consideración, especificar cuándo ocurre 'la instalación del esperma': ¿Tan pronto como el esperma entra en el útero o después de su retorno de la trompa de Falopio?. El dice además que, clasificar algún método anticonceptivo particular (todo lo que prevenga la fertilización o implantación) está bajo consideración individual.

Basado en la explicación científica dada anteriormente y en el uso en el hadiz de la palabra istiqrár en relación al nutfah, y los escritos de nuestros 'ulama' sobre el estado más temprano de aborto, considero la implantación de un óvulo fertilizado en la pared del útero como el comienzo del embarazo desde el punto de vista de la shar'iah. Una vez establecido esto, se llega fácilmente a decidir que métodos de control de natalidad están permitidos y cuales no lo están: Los métodos que eviten el embarazo antes de la implantación de un óvulo fecundado están permitidos, y los métodos que interrumpan el embarazo después de la implantación no están permitidos y serán considerados como aborto. A la luz de estos criterios debemos observar los diferentes métodos de control de natalidad que actualmente están disponibles.

Fue interesante conocer que dos años después de llegar a mi conclusión sobre la base de la shar'iah, el Dr. Clifford Grobstein, un destacado embriólogo americano, publicó la misma conclusión sobre la base de sus investigaciones científicas. El Dr. Grobstein, cuyos planteamientos imparciales han ganado un sitio en los comités éticos de la Asociación Americana de Fertilidad y la Asociación Médica Católica, publicó su trabajo Ciencia y No Nacidos en 1988. El escribe:

"En las últimas décadas, principalmente como resultado de extensos estudios sobre el desarrollo en ratones, ha llegado a estar claro que en los estadios más tempranos de toda nueva generación, los mamíferos (incluídos los humanos) pasan una fase pre-embrionaria preliminar antes de que lleguen a ser un embrión en el sentido científico usual… En el desarrollo de los mamíferos, lo cual normalmente ocurre dentro del cuerpo de la madre (Gestación interna), es ahora evidente que los cambios iniciales que experimenta el zigoto, primero establece la multicelularidad y segundo, se prepara para la penetración dentro de la pared uterina materna, o implantación. El segundo paso, como hemos anotado, es el verdadero comienzo de la gestación o el embarazo."

C. MÉTODOS ANTICONCEPTIVOS.
Los métodos anticonceptivos actúan de diferentes modos. Examinaremos algunos de los métodos anticonceptivos mayoritariamente utilizados y determinaremos si son o no permitidos en el Islam. Se debe mencionar que estamos estudiando la permisividad o, dicho de otro modo, estudiando estos métodos desde el punto de vista de la shar'iah. Para la opinión médica sobre la seguridad o efectos secundarios de estos métodos, el lector debe consultar con su médico.

1. Anticonceptivos orales.
Las píldoras de control de natalidad evitan la concepción por inhibición de la ovulación. Las píldoras alteran los niveles hormonales y suprimen las señales hormonales de liberación del óvulo desde las glándulas hacia los ovarios. Estas píldoras se toman oralmente en un horario preciso por 20 o más días durante cada ciclo menstrual. Ya que tales píldoras inhiben la ovulación, no hay absolutamente ningún problema en usarlas. Sin embargo, se debe consultar al médico sobre los posibles efectos secundarios.

Hay algunas píldoras que actúan después que el coito ha tenido lugar, por ejemplo, la 'píldora de la mañana después' o la píldora RU486 recientemente desarrollada. Ya que en nuestra definición la gestación comienza en la implantación, el uso de cualquier píldora que pueda prevenir la implantación es correcto. Por lo tanto, las píldoras de 'la mañana después' o la RU486 pueden ser tomadas después del coito pero no después de percibir o conocer que la gestación ya ha ocurrido.

2. Depo-Provera (Inyectables).
Los Depo-Provera actúan exactamente como las píldoras, pero en lugar de tomarlas oralmente se inyectan una vez cada tres meses. Este y otros métodos anticonceptivos mediante inyección están también permitidos.

3. Dispositivo Intra Uterino (DIU).
Los DIUs son objetos de plástico o metal, de formas variadas, que son implantados dentro del útero. Los expertos médicos no saben exactamente como actúa el DIU. Actualmente hay dos opiniones: unos dicen que el DIU evita la fertilización y otros dicen que evita la implantación del óvulo fertilizado en el útero. Puesto que la gestación shar'i comienza con la implantación, no hay problema en usar el DIU como un dispositivo de control de natalidad con independencia de la diferencia anterior entre los expertos médicos.

4. Métodos de barrera.
Todos los métodos de barrera impiden que el esperma entre en el útero. Esto se consigue revistiendo el pene con un preservativo o cubriendo el cuello del útero con un diafragma, capucha cervical o esponja vaginal. El uso de sustancias espermicidas que eliminan a los espermatozoides antes de que alcancen al óvulo son también métodos químicos de barrera.

No hay absolutamente ningún problema en usar estos anticonceptivos.

5. Abstinencia durante el período fértil.
Hay tres procedimientos básicos para predecir la ovulación, de modo que el coito pueda ser evitado durante aproximadamente seis días, correspondientes a la fase mensual más fecunda del ciclo femenino. Estos tres métodos son como sigue:

(a) Método de la ovulación: Una mujer aprende a reconocer el tiempo fértil examinando la constitución del moco cervical. La secreción de moco cervical señala el período de mayor fertilidad; y así evitando el sexo durante estos días fértiles se previene el embarazo.

(b) Método del ritmo: es un método similar al anterior, pero depende de la observación de los ciclos mensuales durante un año entero para determinar los días fértiles.

(c) Método de la temperatura: en este método, además de mantener un calendario-registro de su ciclo, la mujer también toma su temperatura diariamente para detectar la ovulación. Ella puede conocer su ovulación cuando se incrementa su temperatura basal.

6. Coitus interruptus.
Coitus interuptus significa retirar el pene justo antes de la eyaculación. Este era el método más común de control de natalidad antes del desarrollo de los modernos dispositivos.

Muhammad b. Muslim y 'Abd ar-Rahmán b. Abi 'Abdulláh Maymun preguntaron al Imam Ya'far as-Sâdiq sobre el coitus interruptus. El Imam dijo, "Le incumbe al hombre, él puede derramarlo donde desee.". Sin embargo, en otro hadiz Muhammad b. Muslim cita el quinto o sexto Imam como sigue: "En el caso de una esclava, le está permitido; sin embargo, en el caso de una mujer libre, me desagrada eso, a menos que haya sido así estipulado en el momento del matrimonio."

Basado sobre este hadiz, la mayoría de nuestros muytahids creen que el coitus interruptus está permitido pero es makruh sin el consentimiento de la esposa.

Todos los métodos mencionados anteriormente no implican operaciones quirúrgicas y son además reversibles. Una mujer (o un hombre) que usan estos métodos puede en algún momento dejar de usarlos para tener un bebé.

7. Esterilización.
La esterilización implica una operación quirúrgica.

La esterilización en el hombre, conocida por vasectomía, significa la separación y bloqueo de los tubos seminales del aparato reproductor masculino. A través de estos conductos pasa el semen de los testículos a la próstata y a otros órganos reproductores.

La esterilización en la mujer, conocida como ligadura de trompas, implica el bloqueo y separación de los conductos que transportan el óvulo.

La permisividad de la esterilización depende de si es o no reversible. Actualmente, el porcentaje de reversibilidad (40%) no es lo suficientemente óptimo para hacer permisible la esterilización. Mayores éxitos pueden ser alcanzados con el perfeccionamiento de las técnicas de microcirugía. Y hasta que se logre un porcentaje del 80% de reversibilidad, será difícil permitir la esterilización.

¿Puede una mujer practicar el control de natalidad sin el consentimiento de su marido?.

La mujer tiene todo el derecho de usar anticonceptivos hasta sin la aprobación de su marido. Sin embargo, ella no debe usar un método que entre en el campo de los derechos conyugales de su marido. Por ejemplo, ella no puede forzarle a usar preservativos o a practicar el coitus interruptus. Esta norma está basada en el principio de que el alcance de los derechos conyugales del marido sobre su mujer es precisamente que ella esté sexualmente disponible, sensible y cooperativa. Este derecho no incluye el tener niños. El tener niños o no es una decisión personal de la mujer; y por lo tanto, ella puede usar anticonceptivos a condición de que no entren en el campo de los derechos conyugales de su marido.

Esto era el aspecto legal de la shar'iah. Pero a un nivel práctico, tal decisión se tomará mejor con la mutua consulta entre el marido y la mujer; lo contrario podría conducir a desavenencias y desconfianzas. El aspecto legal protege los derechos básicos de la mujer; pero en el mundo real, el hombre y la mujer deben basar su vida sobre el amor, la bondad y la cooperación como menciona el sagrado Corán: "y el haber suscitado entre vosotros el afecto y la bondad."

D. ABORTO
El enfoque del Islam sobre el tema del control de natalidad y del aborto es muy equilibrado. Permite a las mujeres evitar el embarazo pero les prohíbe su interrupción voluntaria. El aborto después de la implantación del óvulo fecundado en el útero está absolutamente prohibido y es considerado como un crimen contra la ley de Alláh y contra el feto. Desde el punto de vista islámico, la ilegitimidad de abortar un feto no depende del tema de si el feto tiene el estado de ser humano o no. Aunque el Islam no reconociera al feto como un ser humano, aún le daría el derecho de una posible vida.

El aborto ha llegado a ser normal en el mundo occidental por varias razones:

1.- a veces es una forma de elegir entre un niño y una carrera profesional;

2.- a veces es una forma de elección entre un niño y un estilo de vida lujurioso;

3.- a veces es debido a la ilegitimidad del niño;

4.- otras veces es por el inoportuno sexo del niño;

5.- algunas veces es debido a una violación.

Todas estas justificaciones son inaceptables desde el punto de vista islámico. Las primeras dos excusas reflejan la naturaleza egoísta de esta sociedad materialista. Alláh dice:

"…no matéis a vuestros hijos por (miedo de) empobreceros –ya os proveeremos Nosotros, y a ellos-,…"Corán, 6:151)

"¡No matéis a vuestros hijos por miedo de empobreceros! Somos Nosotros quienes les proveemos, y a vosotros también. Matarles es un gran pecado." (Corán, 17:31).

La tercera excusa es consecuencia de relaciones sexuales ilícitas, las cuales el Islam condena enérgicamente. La cuarta razón no es menos malvada y cruel que la costumbre árabe pre-íslámica de enterrar vivas a las niñas recién nacidas. Por lo que respecta al quinto caso, la mujer debería usar la píldora de la 'mañana después' o la RU486 inmediatamente después de la agresión sexual para evitar la posible implantación del óvulo fertilizado. Pero si la gestación queda establecida, entonces el Islam no puede permitir el aborto. En tales casos, el Islam dice que el niño no es culpable del crimen del padre. Por lo que se refiere a la reputación de la mujer, el Islam condena enérgicamente a la gente que desprecia a la víctima de una violación; en lugar de injuriarla, ellos deberían ser comprensivos con ella.

La moderna tecnología (como los ultrasonidos) ha permitido conocer si un niño tendrá o no algún defecto antes de que nazca. Algunas personas justifican el aborto de un feto anormal. Los actuales muytahids no permiten tales abortos; ellos dicen que los padres deben rezar y confiar en tener un niño normal y saludable. Hay muchos ejemplos donde la predicción de los médicos ha sido demostrada como incorrecta. En otras palabras, lo que nuestros muytahids están diciendo es que hay que tomar medidas preventivas antes de que el embarazo se produzca; pero una vez que ha tenido lugar, no está permitido abortar el feto incluso si es anormal.

La shar'iah permite el aborto solo cuando los médicos declaren con certeza razonable que la continuación del embarazo sería peligrosa para la vida de la madre. Esta autorización está basada en el principio del menor de dos males conocido en terminología islámica como el principio de al ahamm wal muhimm (lo más importante y lo menos importante).

El Profeta dijo, "Cuando dos cosas prohibidas se junten (sobre una persona), entonces la menor será sacrificada por la mayor." En el caso presente, uno se encuentra frente a dos cosas prohibidas: o abortar o dejar que la madre muera. Obviamente, la última es más importante que la primera, por lo tanto el aborto está permitido para salvar a la madre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario