Catedráticos revelan el poder del lobby israelí en EEUU

Catedráticos revelan el poder del lobby israelí en EEUU
PCategoría: Actualidad, Polí­tica, Denuncias

John J. Mearsheimer, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Chicago, y Stephen M. Walt, catedrático de Harvard, han acabado en Madrid una gira que les ha llevado por toda Europa para promocionar “El lobby israelí” (Taurus), uno de los libros más polémicos que se recuerdan en Estados Unidos. Fueron los primeros en abrir un debate “tabú”: la enorme influencia del lobby israelí en la política exterior estadounidense.-¿Cómo actúa el lobby israelí en la actual política de Estados Unidos?

- J.M.: El lobby israelí es muy poderoso desde la década de los setenta y nada indica que vaya a perder fuerza. De hecho, si escuchas a los candidatos republicanos y demócratas hablar sobre Israel te das cuenta de que sigue teniendo una importancia muy significativa para los políticos .
- S.W.: El objetivo principal del lobby es mantener esa relación especial entre Estados Unidos e Israel. Una relación en la que Washington da un apoyo muy generoso e incondicional. Israel recibe la ayuda haga lo que haga.

- ¿Por qué es tan perjudicial?

- S.W.: Cuando Israel levanta asentamientos en Cisjordania o aplica una absurda estrategia con Hezbollah, como ocurrió el verano pasado, Estados Unidos no tiene capacidad para presionarles y que cambien de política.
- J.M.: Es un hecho que todos los estados meten la pata. Y si EE UU no tiene ninguna opción de retirar su apoyo a Israel, haga lo que haga, eso significa que van a respaldar políticas sin sentido.

- ¿A quién apoyarán en las próximas elecciones presidenciales ?

- S.W.: Las asociaciones que conforman el lobby no toman partido por ninguno de los candidatos ni dicen a la gente a quién votar. Los judíos americanos tienden a votar demócrata, así que quienquiera que sea el aspirante demócrata se lleva su apoyo. Los evangélicos, que son otra parte importante del lobby dentro de los cristianos sionistas, votan republicano casi en masa. No importa mucho si el próximo presidente es demócrata o republicano, ya que ambos van a ser muy sensibles a los deseos de estos grupos.
- J.M.: El lobby no está compuesto sólo por judíos americanos. Nuestra teoría es que una gran parte de estos ciudadanos estadounidenses, más de una tercera parte, no siente ninguna vinculación con Israel. Las grandes organizaciones proisraelíes no manifiestan su preferencia por uno u otro candidato y serían tontas si lo hicieran.

- Pero nadie gana las presidenciales sin apoyar sus tesis…
- J.M: Correcto.

- ¿Qué pasaría si algún candidato se manifestara a favor de recortar las ayudas a Israel? ¿Perdería?
- S.W.: Lo haría muy difícil y nadie quiere complicarse la victoria.
- J.M.: No olvide que el lobby israelí también cuenta con los evangélicos, que votan siempre republicano. Si eres un candidato y hablas de apoyar la retirada israelí de los territorios ocupados probablemente vas a enfadar tanto a los cristianos sionistas como a los judíos americanos.

- ¿A cuánta gente han enfadado ustedes con este libro?
- S.W.: Bueno, a algunos (risas).

- Cuesta creer que nadie antes que ustedes lograra abrir el debate.
- J.M.: Criticar la política israelí, la relación con EEUU y hablar del poder del lobby son tres tabúes en América, al menos en los medios.

- ¿De qué forma actuaron en la última guerra de Irak?
- J.M.: Está muy claro que los neoconservadores, parte del lobby, tenían el proyecto de usar la fuerza militar para derrocar a Saddam Hussein desde 1998. No pudieron convencer a Clinton y tampoco a Bush durante los primeros ocho meses de su Gobierno. El 11-S lo cambió todo.

- ¿Cree que el presidente Bush atacará Irán antes de dejar la Casa Blanca e presiona el lobby?
- S.W.: Está claro que sí, pero aún no han tenido éxito. No creemos que Bush vaya a la guerra con Irán antes del final de su legislatura. Tiene demasiados frentes abiertos y el Ejército está en contra de la idea.

- ¿Cuánta ayuda recibe Israel cada año de EEUU?
- S.W.: De 3 a 4 billones de dólares, lo que haría una media de 500 dólares para cada ciudadano hebreo.
- J.M.: Luego está la ayuda diplomática, el apoyo en el Consejo de Seguridad de la ONU, el armamento…

- ¿Qué tiene que ver el petróleo con todo esto?
- S.M.: Ninguna compañía petrolífera hizo nada por favorecer la invasión de Irak. Para hacer dinero, hubiera sido mejor negociar con Sadam que entrar en guerra.

Puertas cerradas


Tras la publicación de su polémico artículo “El lobby israelí”, ahora convertido en libro, en el “London Review of Books” en 2006 muchas puertas se han cerrado para estos dos académicos. Y es que el trabajo de John J. Mearsheimer y Stephen M. Walt acabó en una publicación británica porque la revista estadounidense que hizo el encargo no se atrevió a publicarlo. Los autores explican que, aunque pertenecen al “establishment” y no son “nada sospechosos”, la osadía les ha salido cara. Han sido acusados de “traidores” y “antisemita”. Ellos, sobre todo, defienden que el debate no debe estar proscrito en la “primera democracia del mundo”.