Declaración Balfour realiza los intereses imperialistas de Gran Bretaña

Surgimiento del Movimiento Sionista (3)

22/12/2012 - Autor: Ahmad Vakhshiteh - Fuente: lhvnews.com

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Surgimiento del Movimiento Sionista

La Declaración Balfour, fue en realidad, un empeño conjunto por el imperialismo occidental y el sionismo. El movimiento sionista no obtuvo respaldo por parte de los estados árabes durante la Primera Guerra Mundial, por lo que considera a Gran Bretaña como un buen aliado para colonizar Palestina en compañía.

Durante la Primera Guerra Mundial y la postura que adoptaron el Eje y los Aliados, movimiento sionista empezó a amparar a Londres, miembro de los Aliados, con el fin de obtener una posición firme en el Medio Oriente en caso de colapso del gobierno otomano y la derrota de la parte delantera del Eje.

A principios de 1914, un destacado líder sionista, "Nahum Sokolow", dijo que los árabes deben reconocer a los hebreos como sus hermanos y autoricen su inmigración.

Gran Bretaña, que tenía por objeto promover la influencia sobre el Canal de Suez, apoya las el movimiento sionista y dejando de lado la política de integridad territorial otomano. Los judíos, por su parte, secundaron las metas belicistas de Gran Bretaña en su totalidad.

Los hebreos ofrecieron grandes servicios a los estados occidentales durante la 1ª Guerra Mundial, una de las cuales se puede citar: la invención de acetona por Weizmann, el líder del movimiento sionista, la cual facilitó muchísimo el logro de fines militares de sus aliados.

Gran Bretaña podría haber impedido la influencia de otros poderes en el Canal de Suez defendiendo el Estado judío. La cooperación de Weizmann y Balfour allanó el camino para la ocupación de Palestina. Esa colaboración contribuyó a la Declaración Balfour, sin embargo, distintos investigadores sospechan la veracidad de la dicha proclama.

Los críticos reclaman que la formación de Israel ha sido una violación de derechos palestinos. Ellos creen que la Declaración Balfour es la carta escrita por una persona, y además, el gobierno británico no está autorizado a conceder una tierra sin derecho de propiedad.

En 1918, el Consejo Supremo de la Conferencia de la Paz de San Remo atribuye a Gran Bretaña el mandato sobre Palestina, sin el consentimiento de los palestinos.