martes, 22 de enero de 2013

El nacimiento del Profeta y sus nodrizas

El nacimiento del Profeta y sus nodrizas

Índice > Profeta Muhammad > Su vida > Antes de la profecía >

Según 0 opiniones |

Vote
[ Leer : 226 | Imprimir : 37 | Votantes : 0 ]

Miércoles 22-1-2013

Es correcto que el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, nació un día lunes. La mayoría de los ulemas concuerdan en que nació el 12 de Rabi‘ Al Awal. Según el consenso de los ulemas el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, nació en el año del Elefante, en la casa de Abu Talib, en el desfiladero de Banu Hashim.
Su niñera era Um Aiman, Barakah, la abisinia, la esclava de su padre. Zuwaibah, esclava de su tío Abu Lahab, fue su primera nodriza. Fue narrado bajo la autoridad de Zainab bint Abi Salamah que Um Habibah, que Al-lah esté complacido con ella, le informó que ella dijo: ¡Oh Mensajero de Al-lah! Cásate con mi hermana, hija de Abu Sufian. Entonces el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, dijo: "¿Quieres eso?" Ella dijo: sí, ya que no seré tu única esposa pues deseo que mi hermana comparta esta gracia conmigo. El Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, dijo: "No se me está permitido hacerlo" Ella dijo: me he enterado de que quieres casarte con la hija de Abu Salamah. El Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, dijo: "¿Te refieres a la hija de Um Salamah?" Ella respondió afirmativamente. Entonces el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, dijo: "Aún si no fuera mi hijastra, que se crió bajo mi responsabilidad, no hubiera sido lícito para mí. Pues, ella es mi sobrina de mi hermano por lactancia, ya que Zuwaibah me amamantó a mí y a Abu Salamah. Por lo tanto, no me ofrezcan casarme con sus hijas ni con sus hermanas." [Al Bujari].
En cuanto a Um Aiman, la madre de Usamah ibn Zaid, pues era la sirviente de ‘Abdul-lah ibn ‘Abdul-Muttalib. Era abisinia. Cuando Aminah dio a luz al Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, después de que su padre muriera, Um Aiman le sirvió hasta que creció. Luego el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, la dejó en libertad y la casó con Zaid ibn Harizah. Ella murió cinco meses después de la muerte del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam. [Muslim].
Halimah As-Sa‘diiah fue su nodriza en Banu Sa‘d:
Halimah As-Sa‘diiah, que Al-lah esté complacido con ella, nos narró una única historia acerca de las bendiciones del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, que influyeron en ella, sus hijos, su ganado y su hija.
Fue narrado bajo la autoridad de ‘Abdul-lah ibn Ya‘far, que Al-lah esté complacido con ellos, que dijo: "Cuando el Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, nació, Halimah Bint Al Hariz vino con un grupo de mujeres pertenecientes a Banu Sa‘d ibn Bakr buscando bebés para amamantarles. Entonces Halimah dijo: estaba entre el primer grupo de las mujeres que salieron. Montaba una burra gris y venía junto con mi marido Al Hariz ibn ‘Abdul-‘Uzza, uno de Banu Sa‘d ibn Bakr, y luego llegó a ser aliado con Banu Nadirah. Nuestros asnos estaban bastante maltrechos y yo tenía un viejo camello que no tenía leche debido a la sequía de ese año. La gente padecía hambre hasta tal punto que estaban muy debilitados. Mi hijo estaba conmigo y él no podía dormir en absoluto debido al hambre, y yo no podía amamantarlo, pues no tenía leche en mis pechos para amamantarlo. Esperábamos la lluvia y teníamos ganado ovino, así que la esperábamos con más ansiedad.
Cuando llegamos a La Meca, a todas se les ofreció amamantar al Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, pero lo rechazaron. Dijimos que si era huérfano y la nodriza disfruta de la generosidad del padre del bebé… ¿Qué nos podrían dar su madre, su abuelo o su tío? Todas mis amigas tomaron bebés, mientras que yo no encontré a ningún bebé para tomar. Al final volví y lo tomé. Por Al-lah, lo tomé porque no encontré a otro. Dije a mi marido: por Al-lah, tomaré a este huérfano de Banu ‘Abdul-Muttalib. Que Al-lah nos beneficie con él. Tampoco quiero volver sin tomar a un bebé. Él dijo: sí, tienes razón.
Halimah dijo: lo tomé y me dirigí nuevamente al grupo de mi gente. Por Al-lah, al tomarlo y dirigirme allí, encontré que mi pecho estaba lleno de leche, de tal modo que le amamanté a él y a su hermano. Su padre se dirigió a la vieja camella y la encontró llena de leche. Así que la ordeñó y bebimos de su leche. Él dijo: ¡Oh Halimah! Sabes que hemos logrado una brisa bendita hoy. Al-lah nos Concedió lo que más deseabamos. Halimah dijo: luego dormimos después de satisfacernos, siendo que estábamos acostumbrados a no dormir por la noche debido a nuestro bebé.
Luego regresamos (yo y mis amigas) a nuestros territorios. Monté mi burra y llevé al Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, conmigo. Juro por Aquél en Cuyas manos está el alma de Halimah, que pasé al jefe de la caravana, de tal modo que las mujeres me dijeron: espera, ¿Acaso este es la misma burra que montabas antes? Dije: Sí. Me dijeron: pero tenía heridas en el camino de ida. ¿Qué le pasó? Dije: Por Al-lah, llevo a un niño bendito sobre ella.
Dijo: salimos y Al-lah, Glorificado Sea, nos Concedía cada vez más bendiciones. Una vez, había sequía en La Meca, y los pastores llevaron al ganado a pastar y volvieron con las ovejas de Banu Sa‘d hambrientas, mientras que mi oveja quedó satisfecha. Nosotros ordeñamos la oveja y luego bebimos su leche. La gente estaba preguntándose: ¿Cuál es el asunto del ganado de Al Hariz ibn ‘Abdul-‘Uza, pues las ovejas de Halimah vuelven satisfechas, mientras que las vuestras vuelven hambrientas? ¡Ay de vosotros! Llevad a vuestro ganado al mismo lugar donde las ovejas de Halimah van. Fueron al mismo lugar, y sus ovejas volvieron hambrientas, mientras que las mías estaban satisfechas.
Halimah dijo: él crecía de un modo en que ningún chico crecía, pues crecía en el día lo que crecían los demás en un año. Cuando cumplió dos años, le llevamos a La Meca y nos dijimos que nosotros no podíamos abandonarlo. Cuando su madre vino, le dijimos: nunca hemos visto a un muchacho tan bendito como él y tenemos miedo de que él pueda verse afectado por las enfermedades de La Meca. Déjale con nosotros hasta que te recuperes. Seguimos diciéndoselo hasta que estuvo de acuerdo. Volvimos y nos quedamos tres o cuatro meses. Una vez, él estaba jugando con la oveja y cabras que teníamos detrás de la casa con su hermano y éste vino corriendo y nos dijo: Vinieron a mi hermano dos hombres pertenecientes a los Quraish que llevan la ropa blanca. Ellos lo tomaron y le abrieron su pecho. Su padre y yo nos apresuramos a él y lo encontramos de pie y con la cara pálida. Al vernos, corrió hacia nosotros y lloró. Su padre y yo lo abrazamos y le preguntamos: ¿Qué pasó contigo? Él dijo: dos hombres vinieron a mí, haciéndome acostarme y cortaron mi pecho donde pusieron algo. Luego lo volvieron a dejar como estaba. Su padre dijo: por Al-lah, parece que mi hijo está afligido con la locura. Llévalo a su familia antes de que aparezca algo terrible. Ella dijo: le llevaremos a su madre. Cuando ella nos vio, se extrañó y nos preguntó: ¿Por qué les trajo antes de que yo se los pidiera, siendo que deseábais tanto quedaros con él? Nosotros contestamos: nada, solamente porque él terminó el período de lactancia y supimos que él estaba bien y ya no lo necesitamos. Ella dijo: me ocultáis algo… ¿qué pasó? Ella insistió en saber, y le dijimos lo acontecido. Dijo: no, por Al-lah, que Él no lo permitirá. Mi hijo tendrá un gran futuro. ¿Os digo algo? Cuando yo estaba embarazada, tuve un embarazo muy sencillo. Y yo vi una luz salir de mí y alumbrar los cuellos de los camellos en Al Basrah. O ella dijo: los palacios de Al Basrah. Cuando di a luz, él no salió como los otros bebés, sino que salió con sus manos sobre la tierra, levantando su cabeza hacia el cielo. Ella nos pidió dejárselo, por lo que lo dejamos y nos marchamos."

Lecciones y moralejas sobre la crianza Profeta Muhammad

Miércoles 12/10/2010
A- La bendición del Profeta sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, sobre Halimah As-Sa‘idiah, que Al-lah esté complacido con ella: Esta bendición apareció sobre Halimah As-Sa‘idiah en todas las cosas: en la abundancia de la leche de sus pechos, ya que antes no era suficiente para su hijo. Asimismo, su bendición apareció en la tranquilidad del niño; antes su hijo lloraba mucho molestando a su madre, impidiéndole dormir, pero al estar saciado, se volvía tranquilo y dejaba a su madre dormir en paz. Su bendición apareció también en sus ovejas antes débiles que no daban nada de leche, y de repente, sus ovejas tenían abundante leche como nunca antes.
B- Estas bendiciones eran de los aspectos más destacados de la gracia que Al-lah, Enaltecido Sea, le Concedió. Y Honró gracias a él toda la casa de Halimah As-Sa‘idiah, que Al-lah esté complacido con ella, que fue honrada por haber sido su nodriza y madre de leche. Esto no es de extrañarse, ya que eso tenía una causa, o sea, que la gente de esta casa amara a este niño, lo tratara con ternura y bondad y lo cuidara muy bien. De hecho esto ocurrió, y fueron más misericordiosos con él que con sus propios hijos.
C- La elección de Al-lah por Su siervo es mejor y más bendecida: Al-lah, Alabado Sea, Eligió este niño huérfano para Halimah, que Al-lah esté complacido con ella, quien le cogió a regañadientes, porque no encontró otro sino él. Todo el bien llegó gracias en la elección de Al-lah.
Los resultados de esta prueba aparecieron desde el principio tras que ella lo cogió. Esta es una lección para cada musulmán, es decir, que confíe en el Destino de Al-lah y Su elección, esté satisfecho con El y no se arrepienta por lo que ya pasó y que Al-lah, Enaltecido Sea, no le Destinó.
D- El efecto del desierto en la salud de los cuerpos, la serenidad de los espíritus y la inteligencia de las mentes: el Sheij Muhammad Al Gazali, que Al-lah le dé Su perdón, dijo: “Criar a los niños en el desierto para que sean libres en la naturaleza, gocen de su ambiente abierto y libre y los rayos del sol, purifica la naturaleza innata, desarrolla los miembros y los sentimientos y genera las ideas y las emociones.
Es una desgracia que nuestros hijos vivan en apartamentos estrechos de casas adyacentes como si fueran paquetes que encierran a quien está dentro, privándole del placer de respirar plenamente el aire fresco.
No hay duda alguna de que el malestar de los nervios que acompaña a la civilización moderna, es una consecuencia de alejarse de lo natural y preocuparse mucho por lo artificial.
Apreciamos que la gente de La Meca se dirigía al desierto para que sus campos amplios fueran el camino de su infancia. Muchos pedagogos querrían que la naturaleza fuera la primera escuela para el niño a fin de que sus facultades mentales armonizaran con las realidades del universo donde él pasó su infancia; sin embargo, parece que esto es un sueño difícil de lograr.
El Mensajero de Al-lah, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, aprendió la lengua árabe elocuente en el pueblo de Banu Sa‘d. Luego llego a ser la persona más elocuente.
Cuando Abu Baker, que Al-lah esté complacido con él, le dijo: ¡Oh Mensajero de Al-lah! Nunca he visto una persona más elocuente que tú. Él sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, respondió: “Por cierto, soy de Quraish y he sido amamantado en Banu Sa‘d”.
2- Lo que se aprende del incidente de la apertura del pecho (del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam):
El incidente de la apertura del pecho que le ocurrió al Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, cuando estaba en el pueblo de Banu Sa‘d, se considera uno de los presagios de la profecía, y las pruebas de la elección de Al-lah, Enaltecido Sea, que recaería en él para un asunto muy grande.
El Imam Muslim, que Al-lah le dé Su perdón, narró en su Sahih el incidente de la apertura del pecho ocurrido en la infancia del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam. Así pues, fue narrado bajo la autoridad de Anas ibn Malik, que Al-lah esté complacido con él, que dijo: “Yibril (Gabriel), la paz sea con él, vino al Mensajero de Al-lah, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, cuando estaba jugando con los niños; lo cogió, lo echó al suelo, abrió su pecho, sacó su corazón y extrajo un coágulo de él, y dijo: Esta es la porción de Satanás que habia en ti. Luego lo lavó (su corazón) en un gran recipiente de oro con el agua de Zamzam, lo puso en orden y lo puso de nuevo en su lugar. Los niños fueron a su madre, es decir la nodriza del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, y le dijeron: A Muhammad lo han matado, y cuando lo encontraron estaba pálido. Anas dijo: He visto la huella de la costura en su pecho [Muslim].
Sin duda, el hecho de purificar el corazón del profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, de toda porción de Satanás que se encontraba en él, es un presagio temprano de la profecía y un anticipo a la protección de todo mal y de adorar a otro que no sea Al-lah. Así pues, no tenía otra cosa en su corazón sino At-Tawhid (Monoteísmo islámico) puro. Los eventos ocurridos en su niñez, indicaron que eso se realizó, ya que no cometía pecado ni se prosternaba ante ídolo alguno a pesar de lo extendida que estaba la idolatría en Quraish.
El Dr. Al Buti habló sobre la enseñanza de eso diciendo: Parece que la lección oculta en eso fuera anunciar la misión del Mensajero, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, prepararle para la infabilidad y a la inspiración desde su niñez y asociarlas con situaciones materiales para que eso llevara a la gente a creer en él y en su misión.
Entonces fue un proceso de purificación espiritual, pero tomó esta forma material y tangible para que se haga evidente el anuncio divino ante los oídos y vista de la gente. Sacar ese coágulo del Profeta, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, fue para purificarlo, sal-lal-lahu ‘alaihi wa sal-lam, de la adolescencia negligente y frívola, haciéndolo más serio, estricto, razonable, equilibrado y poseedor de las demás cualidades de la hombría verdadera. También nos indica el cuidado de Al-lah, Enaltecido Sea, hacia él y Su Protección, y que Satanás no encontraría ningún camino hacia él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario