Webislam y el nuevo paradigma
Desde Webislam invitamos a quienes nos siguen fielmente a través de la red a reflexionar sobre un cambio paradigmático que afecta hoy a toda la humanidad
01/02/2013 - Autor: Hashim Cabrera - Fuente: Webislam
Afortunadamente, Webislam es hoy lo que quiso ser en un principio, un medio plural, abierto e inclusivo.
A nadie se le escapa la profunda transformación que la humanidad está viviendo a resultas de la globalización. La dinámica de un medio plural y abierto como Webislam no puede ser ajena a este proceso. En este somero análisis, me gustaría reflexionar sobre la evolución de nuestro medio en el contexto de este cambio paradigmático.
Los lectores y colaboradores que, durante más de quince años, han seguido los avatares de nuestra publicación han podido advertir la sucesión de diferentes etapas que han ido marcando con claridad la tendencia del portal y su adecuación a los principios editoriales que se fijaron en el momento de su creación allá por el año 1997 como una ampliación del proyecto editorial que había nacido con la publicación de la revista de información y análisis Verde Islam.
Desde esas fechas hasta hoy ha existido, entre los editores de Webislam, un consenso sobre cuáles debieran ser las características del medio: pluralidad, apertura, transparencia, pensamiento crítico, esfuerzo interpretativo, participación, ecuanimidad, etc. Cada etapa de la publicación —acorde a la personalidad del director y los editores de turno— ha hecho un énfasis particular en alguna de de estas características.
Con relación a la pluralidad, se ha procurado tener siempre en cuenta no sólo la inclusión de diferentes visiones y puntos de vista sobre la realidad del islam y de los musulmanes en la sociedad contemporánea, sino también una diversidad temática que incluyese pensamiento, espiritualidad, ecología, fuentes islámicas, arte, cultura, geopolítica, etc., teniéndose presente la necesidad del iÿtihad como herramienta necesaria para actualizar un inmenso y precioso legado de sabiduría que, durante varios siglos, ha vivido secuestrado por los usos y las necesidades políticas de turno de las diversas áreas lingüísticas y culturales.
Los apartados dentro de esa temática son suficientemente conocidos de nuestros lectores: el estatus de la mujer, el feminismo islámico, la interculturalidad, el diálogo interreligioso, los derechos humanos, las minorías, la lucha contra la islamofobia, etc.
La diversidad es una de las cualidades más evidentes de la vida y de las sociedades islámicas. Integrar unitariamente una diversidad tan exhaustiva como la que se manifiesta en estas sociedades sólo es posible usando la herramienta poderosa deltauhid. Tauhid que, en este caso, implica la consulta –shura- el consenso –iyma- y una voluntad perseverante de mantenerse en el camino medio, con ecuanimidad.
No se nos escapa que la publicación ha vivido distintas edades. La etapa inicial fue una etapa más política y reivindicativa. Esto se debió a que Webislam surgió como proyecto de una comunidad, Junta Islámica, que en aquellos años, estaba básicamente vinculada al proceso de normalización de la práctica del islam en España, a su dimensión organizativa y jurídica. Fueron los tiempos de la negociación de los musulmanes españoles con el estado y de la firma del Acuerdo de Cooperación.
En algunos casos, las opiniones de los colaboradores de Webislam no eran suscritas por la mayoría del equipo editorial. En otros, cuando los argumentos críticos fueron claramente razonados y explicados, estos mismos autores rectificaron los puntos de vista que hasta ese momento mantenían.
En el islam, cada cual es responsable de sus actos y de sus palabras, y nadie ha de responder por los actos y palabras de los demás. Esto conlleva necesariamente, además de la ineludible responsabilidad personal, el riesgo del error y la obligación de señalarlo tratando de corregirlo, de extraer una enseñanza útil de la experiencia que vivimos.
Como musulmanes siempre hemos pensado que es mejor equivocarse, ser conscientes de ello y rectificar, que permanecer cohibidos, sin hacer nada, por miedo al error o al que dirán los otros.
Webislam es un proyecto de descubrimiento y transmisión del islam vivo y contemporáneo, fundamentalmente en el ámbito cultural de la comunidad de los hispanohablantes. Ello supone una afirmación del principio de libertad de conciencia y expresión como seña de identidad del portal.
En ocasiones, musulmanes provenientes de otras culturas han criticado determinados contenidos aparecidos en Webislam, manifestando su desacuerdo, en algunos casos radical y excluyente. En todos esos casos hemos insistido en que las opiniones de quienes publicamos no tienen por qué ser suscritas por la organización ni por sus proyectos editoriales, invitándose a quienes manifestaban su desacuerdo a expresar sus opiniones contrarias en este mismo foro, poniendo como únicas condiciones el respeto a los demás y el uso de un lenguaje con un nivel aceptable y correcto.
Hemos de decir que en estos quince años de andadura, salvo el año 2011 en que recibimos el apoyo económico de la Agencia Española de Cooperación para la actualización del portal, Webislam se ha mantenido y se mantiene con sus propios medios, en base a aportaciones de trabajo voluntario. Los sucesivos directores y directoras, editores y colaboradores, no han recibido jamás un salario por su dedicación a este medio que se ha convertido en una referencia global del islam en castellano. Creo que es necesario decirlo porque, a veces, se alzan voces arteras que nos señalan como seguidores de tal o cual estado, movimiento o doctrina, con una intención crematística. Nada más lejos de la verdad.
Alguna vez nos hemos preguntado sobre las razones de la falta de apoyo institucional. ¿Cómo es posible que un proyecto como este, de tan enorme beneficio sociocultural, no reciba el apoyo de las instituciones, públicas o privadas, que trabajan en al ámbito de la educación, de las relaciones interculturales, de la promoción de los valores democráticos, de los derechos humanos universales?
Quizás la respuesta a esta pregunta venga de la clara vocación de independencia que ha tenido y tiene nuestro proyecto, de la conciencia de la necesidad de la crítica y de la autocrítica, de la voluntad de clarificar aquellos aspectos que permanecen ocultos por intereses que no son en absoluto islámicos.
Por todas estas razones y, conscientes de la esterilidad que implican las polémicas al uso, ya trasnochadas, del viejo paradigma mecanicista moderno, el énfasis de la publicación ha ido transitando, lenta pero perceptiblemente, desde el ámbito tantas veces inútil de la mera discusión intelectual o teológica hacia la arena del corazón y la espiritualidad. En ese contexto es posible abordar los mismos temas, analizar las distintas problemáticas que siguen estando ahí presentes, a la luz de una mirada y de una actitud más inclusiva, más compasiva, más cercana a la naturaleza del tauhid.
Afortunadamente, Webislam es hoy lo que quiso ser en un principio, un medio plural, abierto e inclusivo. Es verdad que no es ya tanto un medio polémico, al pie de la noticia y del debate candente del día a día de la batalla política, pero también lo es que estamos alcanzando ese punto ponderado que nos sitúa más cerca del camino medio eneunciado en esos princiopios fundacionales de los que hablábamos al principio. También es cierto que la producción textual propia ha descendido, quizás porque los nuevos tiempos nos llevan hacia nuevos lenguajes, más inmediatos y concisos, menos analíticos y más sintéticos. En este sentido hemos de resaltar el gran esfuerzo que algunos editores de Webislam están haciendo en el campo de la producción audiovisual, ofreciendo a nuestros seguidores en la red un producto original e inédito que cumple perfectamente los estándares más exigentes. Y todo ello desde nuestras propias capacidades y recursos.
Desde Webislam invitamos a quienes nos siguen fielmente a través de la red a reflexionar sobre el cambio paradigmático que afecta hoy a toda la humanidad, a todas las culturas y pueblos de la tierra, una transformación radical que afecta a sus maneras de vivir, pensar y expresarse y que se prefigura en una hégira que transita desde el pensamiento mecanicista más escueto y desalmado hacia el horizonte de una vida plena como seres humanos, hacia una visión holística que los musulmanes hemos conocido bien en las etapas de esplendor del pensamiento y la espiritualidad islámicas.
Este nuevo paradigma ha de ser construido entre todos y será aquello que seamos capaces de imaginar y de soñar. El gran yihad, ese enorme esfuerzo para alcanzar la Verdad que se produce en el alma del ser humano consciente, producirá sus frutos siempre que se haga con sinceridad, con humildad y con la conciencia de que es Allah y sólo Él Quien traza el destino del ser humano y de toda la creación. Nosotros sólo somos criaturas necesitadas de Su aliento, herramientas cocreadoras en Sus manos.
Un cordial saludo con mis mejores deseos de paz y abundancia. Assalamu aleikun ua rahmatullahi ua barakatuhu.
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