martes, 23 de abril de 2013

Kim Jong Un, un enigma peligroso

Kim Jong Un, un enigma peligroso


Credito:
Ernesto Londoño / The Washington Post
El líder norcoreano parece no tener considerada una salida a su retórica beligerante. Foto: AP
Cuando Kim Jong Un apareció por primera vez públicamente en el otoño del 2010, los observadores de Corea del Norte comenzaron a buscar pistas para saber si el rollizo heredero aparente sería un reformista o, simplemente, la nueva cara de un régimen despótico.
Casi 16 meses después de tomar las riendas del país tras la muerte de su padre, Kim Jong Un parece dirigirse hacia la segunda alternativa.
Después de haber puesto a la península de Corea y Washington en pie de guerra. Su comportamiento sigue el libro de jugadas de sus predecesores, con la potencialmente peligrosa diferencia de que él parece estar acorralado en una esquina.
“Su padre y su abuelo siempre consideraron dentro de su ciclo de provocación una rampa para salir de éste. No es claro para mí si él ha pensado en cómo salir de la provocación. Esto es lo que hace que este escenario sea particularmente desafiante”, expuso el almirante Samuel Locklear III, comandante de las tropas de EU en el Pacífico.
Encontrar sentido en los Kim ha sido más un arte que una ciencia. Un grupo de investigadores ha pasado décadas armando un retrato de la excéntrica familia basados en la propaganda, testimonios de desertores y el contacto limitado y esporádico que el régimen ha tenido con Occidente. Si bien reconocen que Kim Jong Un es un enigma, expertos afirman que un estudio cuidadoso sugiere su retórica belicosa representa un grito desesperado por legitimidad en lugar de un verdadero apetito por la guerra.

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