lunes, 22 de abril de 2013

No, no habrá una III Guerra Mundial en Corea

No, no habrá una III Guerra Mundial en Corea
Beam@Beammar 9 abr 2013 21:13




En los últimos días se ha incrementado la paranoia de los habitantes de México y del mundo respecto al posible escalamiento de las hostilidades en la península coreana. Las actitudes cada vez más hostiles del régimen comunista, o juche, de Corea del Norte, creen algunos, podría desencadenar una “Tercera Guerra Mundial”.

Amigos, familiares, compañeros de trabajo me han expresado tanto en persona como en redes sociales su temor por una eventual guerra nuclear que terminaría por envolver a varios países, afectando incluso a los países neutrales.

Evocar conflictos como la Primera y Segunda Guerra Mundial, enfrentamientos brutales con un saldo de decenas de millones de muertos en los frentes europeos y asiáticos, no es una simple broma. Sin embargo, el mundo ha cambiado bastante en las últimas siete décadas, lo cual me hace pensar que no habrá una III Guerra Mundial, mucho menos por Corea del Norte.

Aunque un conflicto localizado en la península coreana es posible, tras la caída del comunismo en la mayor parte del mundo y la desintegración de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, el enfrentamiento entre ideologías (Capitalismo vs. Socialismo) ha dado paso a la búsqueda desenfrenada de ganancias económicas, por encima del peligroso conflicto “nosotros vs. ellos” de la Guerra Fría.

Corea del Norte es un país militarizado, pero empobrecido y aislado, con apenas 24 millones de habitantes, rodeado de cuatro poderosos vecinos a quienes en nada conviene que su vecino incómodo altere el status quo. Rusia es una potencia militar rebosante de recursos naturales, China es uno de las mayores economías del mundo, mientras que Corea del Norte y Japón son países sumamente ricos y auténticas potencias en las ramas de tecnología y manufactura. Ellos le apuestan a la distensión, más que al escalamiento del conflicto.

Los discursos del presidente hereditario de Corea del Norte, Kim Song-Un, aunque amedrentadores, no tienen que los sostenga. No mientras su principal aliado en la región (quizás el único en todo el mundo), China, no quiera saber nada de guerras y conflictos que interrumpan el ascenso su boyante economía. Además, en estos momentos Norcorea prepara a sus soldados para labores de agricultura, no para la guerra.

Los discursos del líder de Corea del Norte pueden poner nerviosos a más de uno. Pero a fin de cuentas, dichas bravatas no tienen otro objetivo que mostrar “músculo” para preservar el régimen comunista en dicho país, y quizás de obtener ayuda económica y alimentaria. Kim Jong-Un es un tipo lo suficientemente listo para saber que cualquier intento de agredir a sus hermanos del sur terminaría con la aniquilación del gobierno que preside.

Pueden dormir tranquilos, chicos. La III Guerra Mundial no comenzará mañana. Mucho menos por Corea

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