sábado, 20 de julio de 2013

Las mezquitas de Madrid se convierten en comedores sociales improvisados

Las mezquitas de Madrid se convierten en comedores sociales improvisados

Durante un mes tengo un plato de comida asegurado para mis hijos

19/07/2013 - Autor: Redaccion SG - Fuente: Nurain Magazine
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Iftar en una mezquita madrileña.
Termina el primer día de Ramadán y, tras la oración, se celebra una cena en la mezquita. El menú: tallín de pollo, pan árabe, zumo de melocotón y, de postre, una nectarina. Aunque la creencia popular es que tras el ayuno los musulmanes ingieren hasta hartarse, la comida es más bien frugal.
En la sala que sirve de comedor femenino, se entremezclan las conversaciones de las mujeres con los gritos de los niños, poco conscientes de la liturgia que se desarrolla a su alrededor. Entre las cabezas tapadas con velos perfectamente colocados, destacan dos mujeres a cuyos pañuelos les falta técnica y cuidado. En una mesa apartada del bullicio, dan de comer a sus hijos sin apenas hablar.
Sus rasgos las delatan. Olga y Amparo no son marroquíes, ni argelinas, ni sauditas. Tampoco son musulmanas. Su presencia esa noche en la mezquita no tiene nada que ver con la religión. Con su silencio, buscan pasar desapercibidas en una celebración que les es ajena.
Su historia es la de tantos españoles; la crisis apareció por sorpresa y se ven obligadas a pedir ayuda. Olga comenzó a venir a la mezquita el verano pasado. "Durante un mes tengo un plato de comida asegurado para mis hijos", relata con una mezcla de vergüenza y orgullo.
La entrada al recinto está permitido a cualquiera. "No te dicen nada - explica Olga -. Sólo tienes que lavarte los pies antes de entrar". Además, destaca el ambiente familiar que reina entre las mujeres musulmanas. "Vine el año pasado y se portaron muy bien. Este año he decidido traer a una amiga que está en la misma situación". Y no se trata de un caso excepcional. Por un mes, cada vez más hombres y mujeres de barrios cercanos como Quintana o Pueblo Nuevo se adaptan a las costumbres de la comunidad islámica a cambio de una cena.

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