jueves, 22 de agosto de 2013

Terror israelí frente a la causa palestina

Terror israelí frente a la causa palestina

La causa palestina es la causa de la humanidad, de los derechos humanos, de la supervivencia del hombre en tanto criatura solidaria

30/12/2008 - Autor: Abdennur Prado - Fuente: Webislam
  • 2me gusta o estoy de acuerdo
  • Compartir en meneame
  • Compartir en facebook
  • Descargar PDF
  • Imprimir
  • Envia a un amigo
  • Estadisticas de la publicación

Niñas muertas en los ataques de Israel contra el pueblo palestino - AP
Niñas muertas en los ataques de Israel contra el pueblo palestino - AP
La nueva matanza perpetrada por Israel nos conmociona. Desde los atentados de Atocha no sentíamos la misma sensación de horror y de impotencia. Cuando nos llegan noticias como estas nos quedamos mudos, aterrados ante la capacidad del ser humano de matar sin el menor remordimiento, ante la capacidad de los ideólogos de justificar los crímenes con vacuos argumentos. Cualquier calificativo queda en meras palabras ante el terror vivido por los habitantes de Gaza.
Los sofisticados aviones dejando caer sus bombas con total frialdad sobre una población civil que vive en la pobreza son la imagen del mal absoluto. Israel significa en estos momentos a los ojos de millones de personas de los cinco continentes el terror hecho sistema, la barbarie encarnada en un Estado. Los que más deben lamentarse por ello son los propios judíos, quienes ven su tradición milenaria utilizada como excusa para cometer crímenes contra la humanidad. Igual que es importante separar a al-Qaeda del islam, es importante separar al Estado de Israel del judaísmo: ambos invocan un camino espiritual para sus propios fines, fines políticos y de dominio que nada tienen que ver con las tradiciones que utilizan.
Vuelvo a las páginas de Martin Buber y de Emmanuel Levinas, y no me cabe la menor duda de que el Estado de Israel es profundamente anti-judío, en el sentido más preciso del término: la representación de todo aquello que es contrario a la ética judía. Es importante que los judíos se desmarquen del terrorismo de Estado israelí, igual que la inmensa mayoría de los musulmanes se han desmarcado del terrorismo de al-Qaeda. De otra forma se estará contribuyendo a alimentar el antisemitismo.
Por ello son tan importantes comunicados como el de la Unión Judía Francesa por la Paz, titulado Del bloqueo al asesinato colectivo, en el cual hablan de "la tregua respetada por Hamás y violada sistemáticamente por el ejército israelí" y afirman lo siguiente:
"La Franja de Gaza padece, con el apoyo cómplice de la Unión Europea, un asedio criminal que viola deliberadamente todas las leyes internacionales. Un millón y medio de civiles son prisioneros del ejército israelí y están privados de todo: alimentos, combustible, electricidad, medicinas, material escolar… Menos de una décima parte de los camiones necesarios para el abastecimiento de la población consiguen llegar... Todo pueblo asediado tiene el derecho a resistir a la opresión."
Desde el año 2000 las tropas israelíes han asesinado a más de 5000 civiles, 900 menores de edad incluidos. ¿Cómo alguien en su sano juicio puede defender semejante barbarie? Los apólogos del terrorismo llevan corbatas y ocupan grandes despachos en las grandes ciudades de occidente, tienen a su servicio los medios de comunicación de masas. Leemos artículos en los cuales el cinismo político se mezcla con la frialdad ante la muerte de decenas de civiles, presentados como algo insignificante. Si alguien justificase el terrorismo de ETA o de al-Qaeda con la desfachatez con la que los defensores de Israel justifican los bombardeos masivos de civiles y los asesinatos selectivos, sería inmediatamente preso y enjaulado por apología del terrorismo. ¿Por qué no sucede lo mismo cuando las víctimas tienen la piel oscura?
Las declaraciones de los dirigentes europeos son difíciles de encajar. Merkel y Condolezza Rice culpan a Hamas de la matanza. Moratinos ha pedido a Hamas que “detenga sus ataques contra Israel para que pueda recuperarse la paz en la franja”. ¿Paz en la franja? Se presentan los hechos como una respuesta al lanzamiento de cohetes caseros por parte de Hamas  y se oculta de forma perversa que Israel no ha respetado en ningún momento el alto el fuego, que durante los últimos seis meses ha asesinado a dirigentes y a civiles palestinos, que ha intensificado el bloqueo, llevando a miles de personas a una situación desesperada. Todo ello son tácticas de guerra, tendentes a ahogar a los palestinos de Gaza, llevándolos a una situación desesperada.
Los ataques sin duda generarán ansias de venganza. Habrá nuevos atentados, que serán utilizados por Israel para “mostrar al mundo” la perversidad de los palestinos, continuando con una espiral de violencia que solo le interesa a Israel, quien tiene el poder militar y la fuerza bruta de su parte. Por ello Israel quiere inseguridad y guerra, quiere y provoca atentados terroristas. Esta es su mejor excusa, de hecho su único argumento. Esta es la táctica empleada por Israel desde hace décadas para seguir justificando su expansión y el lento genocidio del pueblo palestino.
La situación actual hace evidente que la retirada de Gaza fue parte de esta estrategia, destinada a enfrentar a los palestinos entre sí y a crear un inmenso campo de concentración. Gaza ha estado en todo momento bajo el control israelí, que ha restringido el acceso de personas y de bienes, ahogando la vida de las gentes, con la colaboración del régimen egipcio. Hablar de "restaurar la paz en Gaza" es patético. La actual Gaza no es sino una nueva versión del gueto de Varsovia. Culpar a Hamas del genocidio palestino es como culpar a los judíos de su exterminio en el gueto de Varsovia.
A estas alturas es difícil no pensar que el objetivo último del Estado israelí es expulsar al pueblo palestino de su tierra y construir el Gran Israel, una utopía política fascista y genocida. Israel es un Estado no-democrático, regido por leyes étnicas que otorgan precedencia a los judíos en todos los ámbitos, un Estado racista desde su misma fundación, al amparo del colonialismo. Los dirigentes israelíes están llevando a cabo dicho plan de forma sistemática desde hace medio siglo, con total impunidad.
La causa palestina es la causa de la humanidad, de los derechos humanos, de la supervivencia del hombre en tanto criatura solidaria, capaz de amor y trascendencia. Solo un hombre sin ética apoyaría al Estado de Israel en estos momentos, alguien carente de cualquier respeto por la vida ajena. La causa palestina es la causa de todos aquellos que siguen pensando que los seres humanos pueden reunirse en torno a valores compartidos y fundar comunidades respetuosas con la diferencia. Solo alguien que pone su complejo racial por encima de cualquier otra consideración podría defender el asesinato continuado de civiles, el bloqueo de alimentos y servicios básicos que hace de la vida en Gaza un tormento cotidiano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario