ECFR publica sobre el Estado Islámico y la perspectiva regional
“Hay quien lo está usando el EI como una oportunidad para impulsar ambiciones políticas domésticas y regionales o como una nueva garantía para el mantenimiento del statu quo”
16/10/2014 - Autor: Redacción - Fuente: ECFR - European Council on Foreign Relations
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El auge del grupo autodenominado Estado Islámico (EI) y su consolidación en el poder tanto en Irak como en Siria ha sacudido todo Oriente Medio. Alimentándose de los problemas políticos que han llevado a las guerras civiles en ambos países, el grupo es ahora un cuasi-Estado en el corazón de la región.
En una colección de catorce ensayos, ECFR explora el alcance regional de la crisis, examinando la reacción de los actores clave de Oriente Medio y teniendo en cuenta también las opciones con las que cuenta la Unión Europea, las dinámicas del propio Estado Islámico y el impacto tanto en Siria como en Irak. Cada uno de los textos analiza la perspectiva de un país de la región, señalando las amenazas e intereses que condicionan el desarrollo de los acontecimientos.
El crecimiento del EI es visto como un desafío para Europa y los países vecinos, pero hay quien lo está usando como una oportunidad para impulsar ambiciones políticas domésticas y regionales o como una nueva garantía para el mantenimiento del statu quo. En algunos países, como es el caso de Irak y Líbano, la amenaza del EI ha servido para alcanzar un consenso regional, mientras que produce divisiones en otros, como Siria.
- La colección incluye textos analizando las reacciones desde Irak, Siria, Irán, Arabia Saudí, Turquía, Catar, Kuwait, Jordania, Líbano, Israel, Egipto, los kurdos y Europa, así como análisis sobre las propias ambiciones regionales del Estado Islámico.
- Observando la perspectiva europea, Nick Witney advierte contra una respuesta derivada del pánico. “El peligro que supone el EI ha sido sobredimensionado”, afirma, “y la intervención militar europea hará más mal que bien, por lo que es necesario tomar perspectiva, incluso admitiendo la amenaza que el EI supone”.
- En Irak, donde los últimos avances del Estado Islámico han provocado la movilización internacional en contra del grupo, Sajad Jiyad explora cómo “se ha profundizado, de forma quizá irreversible, la división entre la mayoría chií, que controla el gobierno, y la minoría suní, parte de la cual ha respaldado al EI”.
- En Siria, tanto el régimen como los rebeldes ajenos al Estado Islámico ven al grupo como un modo de obtener el respaldo internacional en el conflicto, escribe Julien Barnes-Dacey. “Mientras dure, la guerra civil en Siria entorpecerá los intentos internacionales de derrotar militarmente al EI”.
- Siria también es vista como la zona cero en la lucha contra el EI tanto en Arabia Saudí como en Irán. Para Riad, la solución deberá incluir el derrocamiento del presidente sirio Bashar al-Assad, escriben Nawaf Obaid y Saud al-Sarhan. “Riad ha dejado claro que si hay alguna posibilidad de éxito, se ha de ofrecer apoyo a nivel local. Los ataques aéreos contra el EI deben complementarse apoyando a los rebeldes moderados en Siria.” Por el contrario, Teherán considera, según Ellie Geranmayeh, que la batalla contra el EI “solo puede ser un éxito si existe una coordinación con el aparato de seguridad de Bashar al-Assad”.
“Los gobiernos europeos están reflexionando sobre las implicaciones del avance del EI en la región”, escribe Daniel Levy, director del programa MENA de ECFR. “Los actores regionales promoverán sin duda sus propias agendas y narrativas regionales, y Europa deberá permanecer vigilante para tener claro qué es necesario para los intereses europeos. Esta colección de ensayos podrá contribuir a esa reflexión”.
Esta publicación, como todas las de ECFR, representa la visión
de sus autores y no la posición colectiva de ECFR ni la de los miembros de su
Consejo.
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