domingo, 19 de octubre de 2014

El Sagrado Corán: Dr. Armando Bukele Kattán


El Sagrado Corán: Dr. Armando Bukele Kattán

El Sagrado Corán cono palabra de Dios

19/10/2014 - Autor: Dr.Armando Bukele Kattan - Fuente: web
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Dr. Armando Bukele Kattán

El Sagrado Corán :
Dr. Armando Bukele Kattán

El último de los libros revelados que Dios envió es el Corán, el cual es un atributo de Dios; no es creado, sino eterno. Allah reveló por vez primera el Corán en la noche “QADR” o “Decreto”. Habiendo honrado Allah esa noche con la primera revelación del Corán dice: “Por cierto que revelamos el Corán en la noche del Decreto. ¿Y que te hará  comprender lo que es la noche del Decreto? La noche del Decreto es mejor que mil meses.” (AL-QADR, 97: 1 – 3.)
El primer versículo revelado es: “Lee, en el  nombre de Allah que todo lo ha creado”.
Creó al ser humano de un coágulo. Lee y a tu Señor adora. A quien enseñó a través de la pluma. Le enseñó al ser humano lo que no sabía. (Sura 96. 1-5).
“Que lo revelamos en una noche bendita” (44, 3)
Allah adjetiva la grandiosidad y perfección del Sagrado Corán cuando dice: Que es la Revelación descendida de parte de (Alá) el Todomisericordioso, el Todo compasivo. (Cap. 41,2).
Por tanto es inalterable e irrefutable.
A través del Arcángel Gabriel, Allah entrega el Corán a Su profeta Muhammad en el lapso de veintitrés años. Los capítulos revelados antes de la Hégira o emigración a Medina se denominan “mecanos” y los posteriores a ella “medinenses”; y el último versículo revelado del Sagrado Corán es:… “Hoy os he perfeccionado la religión; os he agraciado generosamente y os he designado el Islam como vuestra religión.” (ALMAIDAH, 5: 3.)…
Las Suras o Capítulos del Corán son ciento catorce, siendo la primera “Alfátiha” y la última “AL –NAS”, y su orden no es cronológico en cuanto a su Revelación; sino que se encuentra ordenado en cuanto a su tamaño, con excepción de la primera.
Dice Allah: “Por cierto que o hemos revelado un Corán en lengua árabe, para que lo comprendáis”.
Allah reveló el Sagrado Corán en idioma árabe, y las traducciones a otras lenguas son aproximaciones al original, como versiones de su significado, que pueden servir para orientar al creyente musulmán, no árabe parlante. Todos los musulmanes recitan el Corán en su forma original,  lo que es para ellos una fuente de bendiciones, ya que por cada letra que de él pronuncian, reciben una gracia divina. El estudio del Corán es un deber, así como el cumplimiento de sus dictámenes, la devoción por él y su veneración.
Dice Allah: “… que es un Corán sagrado; cuyo original está en un libro custodiado, que no lo toquen sino los purificados” (AL- WAQI’A, 56:78-79).
Si bien los musulmanes realizamos las 5 oraciones obligatorias diarias del SALAT, en árabe, con ciertos movimientos rítmicos iguales y en dirección a la MECA, lo cual esta basado en un sentimiento de unidad; uniendo así a toda la Comunidad Musulmana mundial.
Los mil quinientos millones de musulmanes en el Mundo, rezando igual, en el mismo idioma y hacia la misma dirección, la Meca, haciendo un solo cuerpo. Esas oraciones dirigidas y concentradas a un punto común, hacen de la Kaaba, en la Meca, un punto de acumulación de energía y espiritualidad de enorme magnitud, que absorbe y aumenta de todos los rincones del Planeta y que también esparce y disemina a toda la Humanidad. Quien ha estado prudente frente a ella, se dará fácil cuenta, de esa fuerza sutil y sublime que emana de ella y que es capaz de ponerle los pelos de punta. Es el lugar máximo de adoración a Dios en el Islam.
Donde estemos el musulmán dirige su oración a la Kaaba, un centro común.
El hermano converso que todavía no puede rezar en árabe, que siga los pasos y que oiga el rezo. Cada palabra que oiga es una bendición de Dios. Puede aprenderse al menos las frases; Allaju –Akbar (Dios es lo más grande); Salam – Aleikum (La paz de Dios sea con todos) que se repiten constantemente; y Bismilah (en el nombre de Dios); El Sura , El Fátiha que tiene 7 frases y unos capítulos cortos, sobre todo el Sura 112, que proclama la base del Islam, la Unicidad de Allah.
Como mencionamos antes, las oraciones obligatorias de oración (Salat) son cinco diarias y llevan un ritmo obligatorio. Sin embargo, una vez terminado cada rezo, el creyente se aparta y ora en silencio, utilizando su propio idioma; pidiéndole a Dios por sus necesidades y hablando con Él. El creyente debe estar conciente de que Dios le oye, ya que después del rezo colectivo, las puertas del Paraíso se abren para él. Además, puede estar mencionando el nombre de Dios durante todo el día, incluyendo la palabra OJALA, que contiene el nombre de Dios, Alá, y que vale como bendición para el creyente, si al mencionarla está consciente que está mencionando el nombre de Dios.
Así que el creyente no sólo reza las 5 oraciones identificados con el idioma árabe, algo que dura 1/2 media hora diaria. Durante el resto del día puede: rezar, orar, platicar, meditar, contemplar, alabar, exaltar, etc. el nombre de Dios y sus atributos  y pedirle con fe a Dios, mediante las 23 ½ horas restantes del día, usando el idioma que entiende y domina; en nuestro caso, el español.

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