lunes, 19 de enero de 2015

El valor del tiempo desde la óptica islámica

El valor del tiempo desde la óptica islámica

Es lo más valioso que posee el ser humano, incluso se puede afirmar que es el verdadero capital de todo individuo y sociedad

19/01/2015 - Autor: sheij Othman Shareef Al Mul - Fuente: Cciar
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El musulmán ante el paso del tiempo
El musulmán ante el paso del tiempo
Alabado sea Allah, Señor del Universo. Le glorificamos, Le pedimos perdón por nuestras faltas y a Él nos encomendamos. Nos refugiamos en Allah del mal que existe en nuestras propias almas y de los perjuicios de nuestras malas acciones. A quien Allah guía nadie puede desviar y a quien extravía nadie puede guiar. Atestiguamos que no hay otra divinidad excepto Allah, Único, Quien no tienen copartícipe alguno. Y atestiguamos que Muhammad es Su siervo y Mensajero. ¡Oh, Allah! Bendice a Muhammad, a su familia, sus compañeros y a todos aquellos que sigan su guía hasta el Día del Juicio Final.
¡Siervos de Allah! Os exhorto y a mi propia alma a que temamos a Allah, pues el temor a Allah es la mayor provisión para alcanzar la salvación y prosperidad.
Una de las mayores plagas que afectan gravemente al ser humano y lo llevan al atraso y a la regresión de su vida tanto a nivel cultural, económico como social es la pérdida de la sensación del tiempo, la que al final conduce a su mala administración.
Hablamos del tiempo que se considera uno de los más valiosos recursos concedidos por el Generoso Creador y que redunda en beneficio de la humanidad entera y con cantidades calculadas y determinadas con suma precisión. Pues, a cada individuo se le ha otorgado una edad y un plazo definidos por segundos, lo cual equivale al tiempo de su puesta a prueba en esta vida estando en la tierra. Y el tiempo es valorado como uno de los elementos más relevantes en todo proceso de producción, en tanto que rige las economías del mundo laboral y de todo movimiento de la vida. Se dice que si el tiempo es bien aprovechado llega a ser el instrumento del sustento. Y se dice también que el tiempo es oro, o el tiempo es dinero.
Es cierto que por más que se aprecie el alto valor del tiempo nosotros despreciamos su mérito. Es de saber que el riesgo que supone el tiempo -que es el recipiente de todo trabajo y producción- reside en el hecho de que todo lo ya transcurrido no retornará ni podrá ser recuperado hasta el Día de la Resurrección a diferencia de la materia, sea ésta oro o dinero que circula entre nosotros, que se puede recuperar.
Por lo tanto, el tiempo es lo más valioso que posee el ser humano, incluso se puede afirmar que es el verdadero capital de todo individuo y sociedad. Al comienzo de cada día un heraldo dirá: - ¡Oh, hijo de Adán! Yo soy una nueva creación y un testigo de tus acciones. Así pues, toma una provisión de mí porque cuando yo pase no retornaré jamás hasta el Día de la Resurrección.
Algunos eruditos definieron el tiempo como la vida misma. Pues, la vida del hombre no es más que el tiempo que transcurre desde su nacimiento hasta la hora de su muerte. El Sagrado Corán hace referencia a una hora en la que el ser humano experimenta un verdadero sentimiento apremiante respecto del valor del tiempo y de las acciones que en él se hacen. Se trata, pues, del momento de la agonía, cuando el moribundo le da la espalda a esta vida y se prepara para recibir la otra, ambicionando que se le dé un poco más de tiempo para reparar lo arruinado, corregir lo ya hecho, pero ya es imposible. El Generoso Corán advirtió sobre ello cuando Allah, Altísimo Sea, dice: (¡Oh, creyentes! Que vuestros bienes y vuestros hijos no os distraigan del recuerdo de Allah. Y sabed que quienes ésta sea su situación serán los perdedores. Y dad en caridad parte de lo que os hemos proveído antes de que la muerte sobrevenga a alguno de vosotros, y entonces diga: ¡Oh, Señor mío! Concédeme un poco más de tiempo para poder hacer caridades y así contarme entre los justos. Pero Allah no concederá otro plazo a ningún alma cuando le llegue su término prefijado, y Allah está bien informado de cuánto hacéis). (63: 9-11) ¡Hermanos en el Islam!
El atraso que conocen algunos pueblos se debe principalmente a la pérdida del tiempo en asuntos que no complacen a Allah (SWT). En este sentido, el estado de subdesarrollo que viven los musulmanes es causado por haber perdido el tiempo y no haberlo aprovechado en generar más producción.
Es por eso que la guía del Sagrado Corán y de la Sunna del Profeta (PyB) convoca al musulmán a que esté atento y sea meticuloso con su tiempo, esforzándose en actuar en contra de las pasiones y tener cuidado de Satanás, quien se esmera en embellecerle a uno la desidia, la postergación de las responsabilidades, la diversión y el desperdicio de la vida en obras que no son provechosas.
Allah, Altísimo Sea, vincula muchas de las obligaciones y actos de adoración con tiempos preestablecidos que no admiten adelanto ni retraso, con el fin de enseñarnos el principio de organización y respeto del tiempo, y que para cada cosa hay un espacio de tiempo establecido donde no se acepta un antes ni un después.
Acerca del Salat, dice Allah (SWT): (La oración ha sido prescrita a los creyentes para realizarla en horarios determinados) (4:103)
Y sobre el Ayuno: (Quien de vosotros presencie la aparición de la Luna correspondiente al comienzo del noveno mes deberá ayunar) (2:185)
Y sobre la Peregrinación: (La peregrinación se realiza en meses consabidos) (2:197)
Y el Zakat: (Comed de sus frutos cuando maduren, pero pagad lo que corresponda por ellos de Zakat el día de la cosecha) (6:141)
Además, cuánto llamamiento que hay en el Sagrado Corán para meditar profundamente y con suma sensatez acerca del universo a fin de percibir que en su continuo movimiento, en el giro de las órbitas y la sucesión de la noche y el día hay signos claros que advierten sobre la importancia del tiempo, de sus precisos cálculos y de lo que siempre debemos recordar: que las vidas por más que sean prolongadas, ante la muerte son muy cortas, tal como dice Allah, Enaltecido Sea, en su Sagrado Libro: (El día que les congregue, les parecerá no haber permanecido en el mundo más que una hora. Se reconocerán entre ellos) (10:45)
Por eso, hay que aprovechar el tiempo para hacer obras de bien: (Quien haya realizado una obra de bien, por pequeña que fuere, verá su recompensa. Y quien haya realizado una mala obra, por pequeña que fuere, verá su castigo) (99:7-8)
El Mensajero de Allah, que Allah le bendiga y le dé la paz, nos informó sobre aquel día difícil cuando dijo: "Los pies de un siervo no se moverán de su lugar, el Día de la Resurrección, hasta ser preguntado acerca de cuatro asuntos: sobre su juventud y en qué la dedicó, sobre su vida y lo que hizo con ella, sobre lo que haya puesto en práctica de sus conocimientos y sobre sus bienes cómo los adquirió y en qué los gastó".
Este Hadiz indica que el ser humano será preguntado por su vida en qué la invirtió, es decir que será cuestionado por el precioso tiempo que es una merced de Allah no menos importante que las otras mercedes que Él nos concedió. Pues, todo minuto transcurrido sin hacer nada se considera una pérdida irreparable, y por eso no conviene, siendo que Allah nos ha sometido los cielos, la tierra y lo que hay en ellos, descuidar la responsabilidad y confianza depositada en nosotros como humanos, desperdiciando parte de nuestras vidas y así retroceder en este mundo y en la otra vida; dice Allah (SWT): (Obrad como os plazca y sabed que Él bien ve todo lo que hacéis) (41:40)
Es necesario que los musulmanes alcancen el tren del progreso y de la vida civilizada, por lo que han de preocuparse por cuidar su tiempo y respetarlo.
Muchos musulmanes pierden su tiempo en el juego ilícito y en los trabajos deshonestos que los llevan a cometer actos abominables, abandonar las acciones de bien, dejar de luchar por el sustento e ir en busca del ocio. Allah, Exaltado Sea, dice en el Generoso Corán: (Sabed que Allah no cambia las gracias que concedió a un pueblo, mientras ellos no cambien lo que hay en sí mismos) (13:11).
No hay que olvidar que Allah, Altísimo Sea, tiene en cuenta todas nuestras obras en un Registro que no deja nada grande ni pequeño sin enumerar: (Allah tuvo en cuenta sus obras registrándolas, mientras que ellos las olvidaron. Y Allah es testigo de todo) (58:6).
Tu tiempo, hermano, es tu responsabilidad porque es tu vida con la que Allah te pone a prueba en lo que te hizo prevalecer y para lo que te creó. Aprovecha cinco antes de cinco: tu juventud antes de tu vejez, tu salud antes de tu enfermedad, tu riqueza antes de tu pobreza, tu tiempo libre antes de que estés ocupado y tu vida antes de tu muerte. Dice Allah (SWT): (Obrad como queráis, y sabed que Allah, Su Mensajero y los creyentes verán vuestras obras; luego compareceréis ante el Conocedor de lo oculto y lo manifiesto, y Él os informará de cuanto hicisteis) (9:105)
¡Quiera Allah bendecirnos con el Grandioso Corán y beneficiarnos con la guía de nuestro Profeta Muhammad! Pedid perdón a Allah por vuestras faltas y volved a Él arrepentidos; Él es Indulgente, Misericordioso.
Viernes, 18 de Rabie Al Awwal de 1436 H., acorde al 09 de enero de 2015
Traducción de la jutba pronunciada por el Sheij Othman Shareef Al Mul
Mezquita del Centro Cultural Islámico “Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas” Rey Fahd en Buenos Aires, Argentina.

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