¿Le resulta difícil realizar las plegarias en árabe?
Para un recién converso al Islam, realizar la oración en árabe puede parecer un tanto complicado, si no imposible, al principio
26/02/2013 - Autor: Aya Timea - Fuente: OnIslam
Coloque delante suya un pedazo grande de papel con la transcripción fonética de las aleyas que quiera recitar durante la oración
Para un recién converso al Islam, realizar el salat u oración en árabe puede parecer un poco complicada, si no imposible, al principio.
La oración es un encuentro entre usted y Dios, y si antes era cristiano, judío o seguidor de otra creencia, sin duda podría haberse acostumbrado a llevar a cabo la oración en su propio idioma.
Dios sabe todo lo que hay en el corazón de cada persona. Reconoce toda oración y súplica, sin embargo, ya que el Corán fue revelado en árabe, es importante y favorable respetar ese punto de espiritualidad tal como es.
Ahora, como nuevo musulmán, una de las primeras cosas que le puede venir a la mente es la manera de poder comunicarse con Dios en un idioma que no puede hablar, ¿verdad?
¿Cómo prestar devoción (jushu') durante la oración y tener una intención, atención y concentración total en Dios, mientras recita en un idioma desconocido para usted?
Pues bien, en el Islam, el hecho de que todos los musulmanes recen de la misma manera diciendo las mismas palabras es lo que le da su belleza real; la unidad del Islam. ¿Ha visto a millones de peregrinos rezando juntos en la Kaaba?
Pues bien, en el Islam, el hecho de que todos los musulmanes recen de la misma manera diciendo las mismas palabras es lo que le da su belleza real; la unidad del Islam. ¿Ha visto a millones de peregrinos rezando juntos en la Kaaba?
No importa de dónde procedan o qué idioma hablen en su vida cotidiana, cuando se reúnen para adorar a Dios, todos dicen "Allahu Akbar" y recitan las mismas palabras del Corán, y todos se inclinan y se prosternan juntos. ¿No resulta maravilloso este espíritu de unidad?
Así que, debido a este hecho, es fundamental para cada musulmán el poder realizar sus oraciones en árabe con las palabras y los movimientos que Dios enseñó al Profeta Muhammad (la paz sea con él).
No se preocupe, no tiene que ser perfecto ni dominar la lengua árabe con el fin de realizar su oración y practicar su devoción en el islam. Como musulmán converso yo mismo, me gustaría compartir algunos consejos útiles basados en mi experiencia sobre cómo acostumbrarse a la oración en árabe y disfrutar de ella.
Cuando empecé a interesarme por el Islam y más tarde me reconocí musulmán, llevando a cabo la shahada, ya tenía algunos conocimientos básicos de lengua árabe, a raíz de algunos cursos a los que asistí en un centro de idiomas. En realidad, no es tan difícil como parece; se trata de dedicar algunos días para aprender el alfabeto y la pronunciación, y algunas semanas más para familiarizarse con él. Al igual que con todos los idiomas, hay que seguir practicando un poco cada día.
Consejos a tener en cuenta al orar
En cuanto a la oración, yo realmente aprendí a realizarla a partir de unos vídeos de YouTube; visualicé muchas veces los movimientos y posiciones de la oración musulmana de una pequeña figura y los describí en un pedazo de papel para memorizar lo que estaba diciendo. Entonces, después de verlo y leerlo cientos de veces, traté de orar por mi cuenta mientras imaginaba lo que la pequeña figura hacía y decía.
Si cometía un error, seguía rezando y después de terminar repasaba lo que había dicho incorrectamente. Pero si usted no está familiarizado con el árabe en absoluto, esto es lo que puede hacer.
Si cometía un error, seguía rezando y después de terminar repasaba lo que había dicho incorrectamente. Pero si usted no está familiarizado con el árabe en absoluto, esto es lo que puede hacer.
1. Escuche el Corán muchas veces todos los días y visualice algunos vídeos de YouTube en árabe, a pesar de que usted no entienda la recitación, por lo menos se familiarizará con el sonido de la lengua árabe.
2. Pida a uno de sus amigos árabes musulmanes o a cualquier persona que tenga una correcta pronunciación en árabe que le aclare las palabras que uno ha de recitar en la oración, prestando especial atención a las letras y los sonidos que no existen en su idioma.
3. Antes de ponerse de pie para orar, consiga un pedazo grande de papel y transcriba fonéticamente en letras grandes qué decir en ciertas partes de la oración, que se pueda leer mientras esté en una posición de pie. Colóquelo delante de usted mientras esté orando y, simplemente lea. Hágalo cinco veces al día durante unos cuantos días y usted memorizará estas aleyas muy fácilmente con el mínimo esfuerzo.
4. Realice la oración con alguien más. Si es posible, trate de orar con otro musulmán -o, mejor aún, en grupo- que rece sin dificultades. De esta manera, usted podrá disfrutar del espíritu de grupo que origina el Islam, obtendrá más recompensa por la oración comunitaria y al mismo tiempo, poco a poco, memorizará lo que están diciendo.
5. Si usted no puede orar con alguien, reproduzca cualquier vídeo o programa que le enseñe cómo llevar a cabo la oración y sígalo atentamente. Asegúrese, antes de elegir cualquiera de estas dos formas de aprendizaje -un vídeo o rezar con alguien- que ya haya leído previamente algunas veces lo que tiene que decir exactamente durante cada parte de la oración, ya que, al igual que con las canciones que uno suele escuchar, a veces se puede pensar que el cantante pronuncia cierta palabra, pero, después de revisar las letras, se da cuenta de que canta en realidad algo completamente diferente. Así que, asegúrese de que no termina memorizando su oración erróneamente.
Espero que esto le ayude a ser consciente un poco más de su cercanía a Allah.
Pruebe también a mantenerse en compañía de musulmanes piadosos, sinceros y humildes, y asistir con ellos a las oraciones en las congregaciones del viernes y cualquier otro día de la semana tanto como le resulte posible para sentir esta asombrosa unidad del Islam, y para fortalecer continuamente su fe. Recuerde que, tanto como si está orando como si no está haciendo nada, Dios siempre le está observando.
Puede esconderse de la gente, pero nunca de Dios. Esta forma de pensar le ayudará a mantener sus buenas obras y no perder la intención; su oración y cada acción que lleve a cabo será por la causa de Allah y, así, insha Allah, usted será recompensado por ello como lo ha prometido en el Corán.
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