Un clérigo del IS es arrestado por criticar el crimen del piloto jordano
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El IS redobla la divulgación de documentos que justifican el atroz asesinato de Muaz
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"Fue una lección para todos los países que llevan a cabo ataques aéreos", dice un jeque
Palestinos protestan por el asesinato del piloto jordano.
EFE
La salvaje muerte del piloto jordano Muaz Kasasbeh, devorado por el fuego, ha abierto algunas grietas en la granítica estructura del autodenominado Estado Islámico. A pesar de la insistencia de los yihadistas, que en los últimos días han difundido múltiples documentos justificando el crimen,
un clérigo del califato ha denunciado públicamente la ejecución en una
reunión de líderes religiosos en la provincia siria de Alepo.
La voz disidente, un jeque de nacionalidad saudí, censuró en el transcurso del encuentro de un consejo de clérigos del IS (Estado Islámico, por sus siglas en inglés) la agónica muerte de Muaz, un piloto jordano de 26 años capturado tras estrellarse su avión en Raqqa -capital del califato- el pasado diciembre. El cónclave tuvo lugar en la ciudad de Al Bab, en la provincia de Alepo. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el religioso -empleado en un tribunal islámico- fue inmediatamente apartado del organismo y arrestado. Los cargos que afronta le pueden costar la vida.
Esta inesperada enmienda a la escalada brutal del IS procede de un ulema, encargado de conceder marchamo islámico a las acciones del califato proclamado por los yihadistas a caballo de Siria e Irak. De hecho, uno de los principales órganos del IS es el consejo de la Shura, donde se dirimen los asuntos militares y religiosos y que reporta directamente al triunvirato de Al Bagdadi y sus dos colaboradores. Su principal función es garantizar que los consejos locales y las diferentes alas de la organización cumplan la fundamentalista interpretación de la 'sharia' (ley islámica) que propugna el grupo. Fue esta entidad, por ejemplo, la que aprobó la decapitación de los rehenes occidentales.
En la secuencia -de 3 minutos de duración y publicada en cuentas del IS en Youtube, Facebook y Twitter-, los entrevistados coinciden en que el piloto merecía un destino tan cruel. "Estamos muy contentos con la cremación del piloto. Él mató a muchos musulmanes y destruyó las casas de mucha gente. Alá destrozará el hogar de su familia. Él lo merece", relata uno de los habitantes del califato interrogado por la maquinaria mediática del IS.
La organización que dirige Abu Bakr al Bagdadi tampoco ha dejado pasar el sermón del viernes para defender su homicidio. Un predicador aseguró ayer en Mosul -la segunda ciudad de Irak, en manos yihadistas desde junio- que la ejecución de Muaz "fue una lección para todos los estados y gobiernos que llevan a cabo ataques aéreos contra el IS". "No permaneceremos de brazos cruzados contra las naciones e individuos que provocan al IS con bombardeos y ataques", agregó el clérigo Abu Saad al Ansari en una mezquita de la villa.
Un
El comité del IS encargado de bucear en los textos islámicos -el Corán o la 'sunna' (dichos y hechos del profeta)- recurrió a citas de antiguos ulemas y las presentó como razones para prender fuego a un "infiel". Asimismo, ha difundido una grabación de audio en la que hace público un listado de pilotos jordanos involucrados en los ataques aéreos con sus nombres, rangos y distritos en los que residen. El grupo ofrece una recompensa de 100 dinares de oro -la moneda del califato- para quienes liquiden a los soldados, a los que acusa de ser "criminales que han excedido todos los límites al derramar sangre de musulmanes".
La voz disidente, un jeque de nacionalidad saudí, censuró en el transcurso del encuentro de un consejo de clérigos del IS (Estado Islámico, por sus siglas en inglés) la agónica muerte de Muaz, un piloto jordano de 26 años capturado tras estrellarse su avión en Raqqa -capital del califato- el pasado diciembre. El cónclave tuvo lugar en la ciudad de Al Bab, en la provincia de Alepo. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el religioso -empleado en un tribunal islámico- fue inmediatamente apartado del organismo y arrestado. Los cargos que afronta le pueden costar la vida.
Esta inesperada enmienda a la escalada brutal del IS procede de un ulema, encargado de conceder marchamo islámico a las acciones del califato proclamado por los yihadistas a caballo de Siria e Irak. De hecho, uno de los principales órganos del IS es el consejo de la Shura, donde se dirimen los asuntos militares y religiosos y que reporta directamente al triunvirato de Al Bagdadi y sus dos colaboradores. Su principal función es garantizar que los consejos locales y las diferentes alas de la organización cumplan la fundamentalista interpretación de la 'sharia' (ley islámica) que propugna el grupo. Fue esta entidad, por ejemplo, la que aprobó la decapitación de los rehenes occidentales.
Justificación de la barbarie
Consciente de la repulsa que ha suscitado el asesinato de Muaz, el IS se ha volcado en los últimos día en la tarea de justificar sus actos. Ha distribuido cientos de copias del vídeo de la ejecución -una cuidada producción de 22 minutos de duración- por todos los rincones del califato y ha creado nuevo contenido audiovisual como un vídeo de Amaq, la agencia de noticias de la organización, en el que se entrevista a civiles -ochos adultos y dos niños- en las provincias sirias de Alepo y Raqqa.En la secuencia -de 3 minutos de duración y publicada en cuentas del IS en Youtube, Facebook y Twitter-, los entrevistados coinciden en que el piloto merecía un destino tan cruel. "Estamos muy contentos con la cremación del piloto. Él mató a muchos musulmanes y destruyó las casas de mucha gente. Alá destrozará el hogar de su familia. Él lo merece", relata uno de los habitantes del califato interrogado por la maquinaria mediática del IS.
La organización que dirige Abu Bakr al Bagdadi tampoco ha dejado pasar el sermón del viernes para defender su homicidio. Un predicador aseguró ayer en Mosul -la segunda ciudad de Irak, en manos yihadistas desde junio- que la ejecución de Muaz "fue una lección para todos los estados y gobiernos que llevan a cabo ataques aéreos contra el IS". "No permaneceremos de brazos cruzados contra las naciones e individuos que provocan al IS con bombardeos y ataques", agregó el clérigo Abu Saad al Ansari en una mezquita de la villa.
Un
'traidor' que colaboró con los 'infieles'
El ulema acusó a Muaz de ser un traidor que "colaboró con los infieles en el asesinato de musulmanes". "Por eso recibió el mismo castigo que sus manos habían causado", apuntó repitiendo el mismo argumento que el IS expuso tras la difusión del vídeo de su muerte el pasado miércoles. Desde entonces, el grupo ha replicado a los ulemas e instituciones que han tachado la ejecución de ajena al islam desempolvando citas de textos religiosos. Al Bayan, la radio del califato, defendió la cremación de Muaz como "castigo por haber quemado musulmanes con el fuego de su avión hasta caer en manos del IS".El comité del IS encargado de bucear en los textos islámicos -el Corán o la 'sunna' (dichos y hechos del profeta)- recurrió a citas de antiguos ulemas y las presentó como razones para prender fuego a un "infiel". Asimismo, ha difundido una grabación de audio en la que hace público un listado de pilotos jordanos involucrados en los ataques aéreos con sus nombres, rangos y distritos en los que residen. El grupo ofrece una recompensa de 100 dinares de oro -la moneda del califato- para quienes liquiden a los soldados, a los que acusa de ser "criminales que han excedido todos los límites al derramar sangre de musulmanes".
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