jueves, 30 de abril de 2015

¿El fin del mundo? Todavía no
La civilización maya mide el tiempo en ciclos llamados “baktuns” de 394 años cada uno. El viernes marcó el final del baktun 13.
(CNN) – Es el fin del mundo como lo conocemos.
Y sin embargo el mundo parece estar perfectamente.
Se suponía que el viernes sería el día en que la Tierra dejaría de existir. El pronosticado apocalipsis –que dio pie a la película 2012, a un programa de televisión de National Geographic llamado "Doomsday Preppers", que mostraba a las personas que tomaron medidas extraordinarias para el fin del mundo, y numerosos chistes en redes sociales- se originó por el final de una fase importante del calendario maya.
La civilización maya, que se remonta desde el año 2.000 a.c. y todavía está activa –aunque sus pobladores e influencia se han diezmado en los últimos cientos de años- mide el tiempo en ciclos llamados “baktuns” de 394 años cada uno. El solsticio de invierno que ocurrió el viernes marca el final del baktun 13.
“¡Va a pasar”, escribió un usuario de CNN.com. “Todos los historiadores mayas están de acuerdo, ¡los mayas predijeron que el fin del mundo sería el mismo año en que dejaran de existir los Twinkies! ¿CÓMO LO SABÍAN?”.
Algunos se tomaron de forma mucho más seria el día del fin. Ryan Croft de Asheville, Carolina del Norte, por ejemplo, dijo que le estaba enseñando a su familia cómo subsistir con fuentes alternativas de nutrición como algas, ratón asado y gusanos, así como a hacer un rifle artesanal –un híbrido entre un AR-15 y una AK-47- para luchar contra las señales del juicio final.
“Pensé en el colapso económico y cómo se ve en realidad”, le dijo Croft a WHNS, afiliada de CNN, señalando que él no estaba esperando la destrucción total del mundo sino un camino más gradual hacia el caos. “Las personas quieren actuar como que si no pudiera ocurrir o no fuera a ocurrir, y ya ocurre alrededor del mundo. Hay lugares así en este momento”.
Pero ni siquiera los mayas de la actualidad se creyeron el cuento del apocalipsis. Ven el calendario como presagiando el final de una era y anunciando el inicio de una nueva, no como la muerte de todas las especies de la Tierra.
“Es una era. Somos afortunados de ver cómo termina”, dijo el tallador de madera Santos Esteban en Yaxuná, México, un pueblo tranquilo de menos de 700 indígenas mayas.
Tal cual como la predicción no fatalista de Esteban, el viernes llegó y pasó por incontables lugares del mundo –desde Sídney a Estocolmo, desde Katmandú a Ciudad del Cabo- sin ninguna calamidad épica.
Eso no significa que el Día del Juicio Final no vaya a ocurrir, y posiblemente pronto. Algunos que estudian el calendario maya dicen que la fecha del fin del periodo no es el viernes, sino el domingo. Y muchos grupos, a través de los años y alrededor del mundo, han profetizado el fin del mundo en días específicos.
Todos se han equivocado, hasta ahora.
Greg Botelho, Nick Parker y Ben Brumfield contribuyeron a este informe.

ISIS, el Islam, y los tiempos del fin

Jueves, 9 de octubre de 2014
P. Cada vez leo más acerca de la expansión de ISIS y el reclutamiento que están haciendo alrededor del mundo, siendo el último en Túnez y ahora en Chipre. ¿Podría ser que ISIS sea el vehículo usado por el anticristo para subir al poder, con lo cual el Islam sería el poder que gobernaría el mundo al retorno de Jesús? También, ¿la Biblia menciona decapitaciones como una forma de castigo para los cristianos en los tiempos finales, lo cual también respaldaría la creencia de que el Islam sería el poder gobernante?
R. Si ellos se salen con la suya, el Estado Islámico eventualmente controlará el Medio Oriente y quizás grandes porciones del Occidente. Y usted también habrá leído que la rama paquistaní del talibán acaba de jurarle fidelidad al Estado Islámico, con lo cual se abre la puerta hacia el Oriente. Si el Occidente puede armarse de voluntad para realmente combatirlos mientras todavía hay tiempo, quizás su impulso pueda ser detenido. Pero si no lo hace pueden convertirse en el vehículo por medio del cual el anticristo obtiene el control.
La Biblia sí menciona decapitaciones como el método de ejecución preferido del anticristo, por lo menos para los creyentes de la tribulación. Apocalipsis 20:4habla de la resurrección de esas personas en el momento de la Segunda Venida. Esto hechos señalan hacia la posibilidad de que el Islam se convierta en la religión dominante del final de los tiempos.
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ISIS, el grupo de Al Qaeda que siembra el terror en Irak

  • El grupo surgió  en 2013, al calor de Al Qaeda y  para combatir contra las fuerzas leales a Bashar al Assad, desde entonces luchan con otras fuerzas insurgentes en Siria e Irak.
  • Se desconoce el número de exacto de combatientes que se cifran entre 3.000 y 5.000 y el 80 por ciento de los yihadistas occidentales luchan en sus filas.
  • Combatientes Al Qaeda
La violencia se recrudece en Irak, un país que desde la ocupación extranjera en 2003 es un reguero de atentados que enfrentan a suníes y chiíes, las dos facciones musulmanas. Los yihadistas en Irak han tomado partido por la minoría suní y echan leña al fuego de las tensiones sectarias con la mayoría chií, aliada del Gobierno de Nuri al Maliki y próxima a Irán.
En 2011, cuando EEUU abandonó el país, este grupo terrorista estaba más o menos derrotado, sin embargo en pleno auge de las tensiones entre suníes y chiíes, el grupo yihadistas ha encontrado un hueco para extender su influencia. En concreto a través del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS)
El grupo surgió  en 2013, al calor de Al Qaeda y  para combatir contra las fuerzas leales a Bashar al Assad, desde entonces luchan con otras fuerzas insurgentes en Siria e Irak. En Siria, su influencia está en elnoreste del país, en la frontera turco-siria, en las provincias donde operan independientemente del Frente Al Nusra. En Irak controlan, las provincias de Ambar y Ninive donde se encuentran ciudades tan importantes como Faluya y Mosul.
Su líder es Abu Bakr al Baghadadi del que no se tiene mucha información, más allá de su nacimiento en 1971 en Bagdad. Se desconoce el número de exacto de combatientes que se cifran entre 3.000 y 5.000.
Según recoge, el profesor Peter Neumann del King College, explica queel 80 por ciento de los yihadistas occidentales combaten en sus filas.

Más de 5.000 milicias independientes en Siria

En los últimos tres años, se han formado más de 5.000 milicias islamistas independientes sólo en Siria. Algunas, como el Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), están inspiradas en Al Qaeda pero se han desvinculado porque su objetivo es más local e, incluso, más despiadado. El ISIS, por ejemplo, puso en práctica castigos tan medievales como la decapitación o la crucifixión de apóstatas.
Otros han decidido optar por seguir la senda de las bandas criminales, como ‘Los firmantes de sangre’, liderados por Mojtar Bel Moktar, contrabandista de tabaco y secuestrador profesional, en cuyas manos estuvieron retenidos tres cooperantes catalanes.
A pesar de que Obama se ha comprometido a luchar contra estas milicias, el interrogante se encuentra en cómo se hará. “Si estos grupos realmente están centrados en la agenda local, habrá que valorar si se cumple o no el umbral de acción”, reflexiona Frederic Wehrey, investigador de la fundación Carnegie para la Paz Internacional.
“Si entramos en un país que se centra exclusivamente en la seguridad nacional, esto se convertirá en una profecía autocumplida y los grupos locales se volverán cada vez más antiamericanos”, asegura.
El grupo islamista Ahrar al Sham, el Movimiento Islámico de los Hombres Libres de Siria, uno de los más grandes que se han formado durante la insurgencia contra Al Assad, es un ejemplo perfecto para el desafío al que se enfrenta Occidente: su objetivo principal es derrocar a Al Assad y sustituirlo por un Gobierno islámico, pero no pretenden librar una ‘guerra santa’ global contra Occidente.
Sin embargo y al mismo tiempo, este grupo también colabora de forma cercana con el Frente Al Nusra, filial de Al Qaeda, aunque sus objetivos últimos todavía están en pleno debate, ya que los propios combatientes están desarrollando una “ideología” común del grupo.

Los países del Golfo Pérsico, bajo sospecha de financiar a ISIS

Amnistía Internacional ya ha puesto su punto de mira en varios países del Golfo Pérsico, en especial en Arabia Saudí. La ONG ha pedido ha estos estados que dejen de financiar a ISIS y otros grupos armados que están sembrando el caos en Siria e Irak.
A los mismos círculos apuntan otros sectores islamistas. El secretario general de la milicia chií iraquí Asaib Ahl al Haq, Qais al Jazali, ha exigido este miércoles al Gobierno de Arabia Saudí que ponga fin a su financiación a los grupos terroristas suníes en el país y ha advertido de que dicha injerencia tendrá consecuencias.

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 'Es posible que surja un presidente musulmán en Francia'

  • El escritor francés vuelve a levantar ampollas con 'Sumisión', una pesadilla 'orwelliana' en la que especula con la islamización del Estado francés en un futuro cercano

  • La novela, por la que fue acusado de islamofobia, llegó a las librerías el mismo día del atentado al semanario 'Charlie Hebdo', y desde entonces el gran misántropo de las letras galas se mueve con escolta

La seguridad de Houellebecq JORDI SOTERAS

     
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Se diría que la presión le sienta bien, lo ha rejuvenecido. La dentadura en su sitio, el pelo sedoso y bien peinado, y hasta su natural piel cetrina tiene mejor aspecto. O quizá sea el amor de su nueva pareja, una joven estudiante de literatura de buen ver con la que viaja. Porque Michel Houellebecq (1958) no pasa por su mejor momento, pero se presenta de buen talante, responde sin exabruptos a cada una de las preguntas de la prensa y exhibe una sosegada lucidez en la que no interfiere otra sustancia que las profundas caladas de un cigarrillo electrónico (sin ojos en blanco ni incómodos silencios de hasta tres minutos como en anteriores apariciones).
Y lo cierto es que el 'enfant terrible' de las letras galas, el gran misántropo, deslenguado y provocador también viaja en compañía de dos escoltas, gentileza del Estado francés, en medio de "engorrosas medidas de seguridad", según su editor, Jorge Herralde, a los que se suman otros dos agentes de la Generalitat de paisano y varios policías de calle a las puertas del Instituto Francés de Barcelona, lugar destinado para el encuentro con la prensa y no revelado hasta el último momento. "Todo bien; los escoltas son simpáticos y me llevo muy bien con ellos", bromea. "Dejo que las autoridades decidan si necesito medidas de protección. No tengo miedo, pero quizá me equivoque", concede el autor que, desde su primera novela, 'Ampliación del campo' de batalla (1994) ha hecho del escándalo y la polémica un emblema a cada nuevo título.
Pero con su última novela, 'Sumisión' (Anagrama) pasó a mayores, porque su "ejercicio de política ficción", como él mismo la define, en la que especula sobre el potencial ascenso de un líder del islamismo moderado a la presidencia de la república francesa para 2022, llegó a las librerías galas el mismo día (7 de enero pasado) del atentado yihadista al semanario satírico Charlie Hebdo, en el que falleció su amigo el economista Bernard Maris. Y Houellebecq no demoró ni 24 horas en huir de París (hacia la casa que tiene en una urbanización nudista de Cabo de Gata, Almería), y desde entonces se mueve con escolta. Entre otras cosas, porque ya desde 2002 recibió amenazas por parte de grupos extremistas, al afirmar que "el islam es la religión más estúpida de todas".
"No quería hablar de los musulmanes sino hacer un ejercicio de política ficción, porque hay gente que utiliza el Islam como un instrumento de poder", explica el autor, que releyó el Corán "por honestidad" al trabajar su novela. "El problema es la gente que lo interpreta, que tiene el poder religioso y son violentos", aclara. "Hay temas que el Corán no contempla, por ejemplo, cómo vivir en un Estado laico, porque no lo había en la época de Mahoma; pero de otros sí se ocupa, de cómo comportarse junto a judíos y cristianos, por ejemplo. Y esas no son las formas adoptadas por el Estado Islámico. ¿Cómo es posible una interpretación tan aberrante?", se pregunta Houellebecq.
Como sea, esa tergiversación del libro sagrado es sólo uno de los blancos al que apunta 'Sumisión', y puede que no el central. François, un cuarentón profesor de la Sorbona especializado en el decadente Joris-Karl Huysmans y hastiado hasta del sexo, ve cómo su mundo se desmorona con el ascenso al Elíseo del líder islamista Mohammed Ben Abbes, tras ganar las elecciones en segunda vuelta, con el apoyo de los socialistas y la derecha moderada, a la candidata de la ultra derecha del Frente Nacional. De allí hay sólo un paso a la exclusión de las mujeres de la vida pública, a la implantación generalizada del burka, a la islamización de todas las instituciones, incluida la Sorbona, en la que los profesores conversos a la fe de Mahoma pueden continuar impartiendo clases (con un generoso aumento salarial) y disfrutar de la poligamia e incluso los judíos franceses se ven obligados a emigrar a Israel, entre ellos Myriam, la pareja de François. De allí que el decadente profesor se plantee convertirse a la nueva fe.
Y para quien quiera ver aquí, con ojos de psicoanalista, un dardo más a su odiada madre que lo abandonó de pequeño, Houellebecq ataja: "Más bien lo que ella hacía era zapping espiritual, porque se hizo musulmana tres años y luego cristiana ortodoxa".
La ambigüedad frente a la conversión final del protagonista es deliberada "porque quería crear un espacio donde ocurriera algo grave como en un mal sueño", dice Houellebecq, que frente a esa misma dicotomía duda."Honestamente no sé lo que haría en la situación de François". Entre otras cosas, porque "entre las cualidades francesas se da un don excepcional por la hipocresía que no hay que menospreciar". Así, lo que plantea la novela "es claramente una metáfora del colaboracionismo", fustiga. "Lo siento, pero los franceses somos colaboracionistas por naturaleza".
Y aclara: "Es posible que surja un presidente musulmán en Francia, creo que habría problemas mayores y sería factible. Lo que no parece tan posible es un partido como la Fraternidad Musulmana de la novela, porque hay demasiadas divergencias entre los islamistas". Considera que el islam en Europa, que no ve con malos ojos, no supone el retroceso del catolicismo "que se renueva desde Juan Pablo II, que era una estrella de rock", pero sí "supone en Francia una muerte del modelo patriótico, republicano y laico que se ha fracturado desde la Primera Gran Guerra y no ha vuelto a recomponerse", acaba el incorregible Michel Houellebecq.

¿CIENCIA FICCIÓN O PROFECÍA?

Francia, 2022: Mohammed Ben Abbes, líder de un partido islámico en apariencia moderado, se convierte en presidente de Francia gracias al apoyo de los socialistas y de los conservadores, que lo aúpan hasta el Palacio del Eliseo a fin de evitar que quien entre allí sea la ultraderechista Marine Le Pen. A partir de ahí, y con una velocidad bastante inaudita, en Francia comienza a imponerse un Estado Islámico similar al implantado en Siria e Irak, en el que la poligamia está plenamente aceptada y las mujeres se ven obligadas a cubrirse con el velo al salir a la calle, pero impuesto no a través de las armas, sino de las urnas. Cómo no, 'Sumisión', la última novela de Michel Houellebecq, desató una feroz polémica en Francia. La controversia arrancó antes incluso de publicarse el libro, cuando se supo que trataba del Islam. Al fin y al cabo, en 2002 el escritor ya fue procesado (y absuelto) de un delito de islamofobia, por soltar durante una entrevista tras la publicación de su novela 'Plataforma' que «la religión más estúpida es el Islam». Aquel libro concluía con un brutal atentado cometido por extremistas islámicos. Como el que sacudió París el 7 de enero, cuando en plena promoción de 'Sumisión' dos musulmanes radicales entraron en la redacción de la revista 'Charlie Hebdo' armados con kalashnikov y al grito de 'Alá es grande' comenzaron a disparar, matando a 11 personas. La controversia no se ha aplacado, al revés. No es sólo que el debate sobre la 'islamización' de Francia esté sobre la mesa desde hace años (es el país con mayor número de musulmanes de toda Europa, unos seis millones). Es que algunos de los escenarios que imaginaba el escritor han comenzado a hacerse realidad. No se trata sólo de que ya en varios comicios los dos grandes partidos en Francia (socialistas y republicanos) hayan dejado de lado su histórica enemistad y hayan hecho frente común contra el Frente Nacional de Le Pen. Además, a las elecciones departamentales que Francia celebró en marzo pasado por primera vez en la historia concurrió un pequeño partido de corte islámico, creado recientemente y bautizado como Unión Democrática de Musulmanes Franceses. Su líder y fundador, Nagib Azergui, asegura que los valores de esa formación son perfectamente compatibles con los de la democracia francesa y que para nada pretenden imponer la ley islámica. Pero ese partido no sólo propugna que sea abolida la ley que prohíbe en Francia cubrirse con un burka en público o la que impide acudir con velo a una escuela pública, sino que defiende que se enseñe árabe en los colegios y se modifiquen los programas escolares de Historia. Pero aunque 'Sumisión' sea un libro políticamente incorrecto, que lo es, no sólo habla de los musulmanes, no se limita a ofrecer un despiadado retrato de la política francesa. Por encima de todo, el libro decreta el fracaso de los valores de la Ilustración y la capacidad del Islam de ocupar ese espacio. El protagonista de 'Sumisión' es François, un experto en Huysmans, que decide convertirse al islam por dinero, porque la misma universidad islámica que despide a los profesores que no son musulmanes le ofrece un montón de pasta por abrazar la fe de Alá y dar allí clases. Pero el islam ofrece a François algo que su cultura no le da, y que se supone que es lo mismo que buscan todo ese ejército de europeos (unos 10.000, según el primer ministro francés, Manuel Valls) que viajan a Siria o a Irak para unirse a los yihadistas del Estado Islámico: valores, repuestas, aventura... porIRENE HDEZ. VELASCO. París. Corresponsal.
     
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