Doble atentado del Estado Islámico en Irak: hay al menos 70 muertos
El grupo terrorista, que se adjudicó el ataque a través de un comunicado en Internet, detonó dos bombas en un mercado al aire libre, en un distrito chiita de Bagdad. Hay más de cien heridos
El Estado Islámico perpetró una atentado en un distrito chiita de la ciudad iraquí de Bagdad tras la explosión de dos bombas, que dejaron un saldo de al menos 70 muertos y más de cien heridos, según informaron fuentes policiales, médicas y de la morgue.
Las detonaciones se llevaron a cabo en un mercado al aire libre, horas después de que las fuerzas de seguridad iraquíes repelieran un ataque de yihadistas en Abu Ghraib, un suburbio occidental de la capital, causando la muerte de 12 personas.
El doble atentado perpetrado por el Estado Islámico se llevó a cabo en un mercado al aire libre de un distrito chiita de Bagdad
Un funcionario policial informó que una de las bombas estalló la tarde del domingo en el mercado Mredi, ubicado en el barrio chiita de Ciudad Sadr. Minutos después, un terrorista se inmoló en medio de la multitud que se había agolpado en el lugar del primer atentado.
El ataque fue el más mortífero de una serie de explosiones recientes en contra de zonas comerciales dentro y a las afueras de Bagdad.
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En la localidad de Mahmoudiya, ubicada a unos 30 kilómetros al sur de la capital iraquí, tres compradores fallecieron y otros diez resultaron heridos durante una explosión, subrayó otro policía. Otros cuatro murieron en otra detonación en el barrio de Dora, ubicado en el sur de la capital, afirmó el agente.
El Estado Islámico se adjudicó el doble atentado a través de un comunicado en Internet.
El doble atentado perpetrado por el Estado Islámico se llevó a cabo en un mercado al aire libre de un distrito chiita de Bagdad
AFP
El ataque comenzó de madrugada con tres atentados suicidas con autos bombas contra puestos de las fuerzas de seguridad, indicaron dos agentes de policía. Luego de las explosiones se inició un tiroteo, señalaron las autoridades locales. Al menos 12 miembros de fuerzas paramilitares y del gobierno murieron, y 35 resultaron heridos.
El mayor general Saad Harbiya, comandante de operaciones militares en el oeste de Bagdad, aseguró que la situación está "bajo control" y se ha impuesto un toque de queda en la zona.
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