viernes, 25 de noviembre de 2016

Mañana, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

LA VIOLENCIA CONTRA MUJERES, EFECTO DE LA DISCRIMINACIÓN

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Los mecanismos normativo y estructural no son suficientes para erradicarla: Ana Buquet, directora del PUEG
24 de noviembre de 2016
La violencia contra la mujer es consecuencia de la discriminación que sufre tanto en las leyes como en la práctica, así como por la persistencia de desigualdad por razones de género, aseguró Ana Buquet Corleto, directora del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG).
Una de las principales dificultades para prevenirla y erradicarla es que los mecanismos de carácter normativo y estructural no funcionan. Es un tema que le preocupa al gobierno; sin embargo, en la práctica los avances de la ley contra el maltrato de género no se ven reflejados.
Este hecho afecta e impide el desarrollo para acabar con ella en México. La atención a las víctimas sigue siendo deficiente porque intervienen los ministerios públicos. “El problema es que quienes imparten justicia no están conscientes de lo que significa la violencia contra las mujeres”.
Creen que no es relevante ese maltrato, incluso llegan a pensar que son responsables de sufrir esa situación y siguen victimizando o revictimizándolas. “La atención es mala prácticamente en cualquier espacio del país”, subrayó la universitaria.
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Foto: Archivo Gaceta UNAM.

Reconocimiento

Los avances para terminar con la pandemia, prosiguió Buquet, comienzan con el reconocimiento de la misma y, en México, con la publicación de la ley de acceso de la mujer a una vida libre de violencia, con la creación de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, así como de las alertas de violencia de género para intentar disminuir los feminicidios en algunos estados de la República.
Sin embargo, “la mayor parte de las mujeres no denuncia la violencia que vive porque se enfrentan a procedimientos institucionales muy tortuosos, a ser miradas o culpabilizadas”. Es una cuestión cultural. Los hombres creen que tienen derecho a ese modo de proceder y muchas de ellas también lo piensan.
En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se celebra mañana 25 de noviembre, Ana Buquet aseguró que la de género puede evitarse. Su prevención es posible y esencial. Se debe trabajar desde todas las instituciones. Cada una tiene que lograr que dentro de su comunidad no ocurra y que de ser así se sancione.
“Debemos hacer un cambio cultural importante para lograr que ellas no consideren esto natural; por ejemplo, que no crean que es normal ir por la calle y que las persigan, las toquen o les digan cosas, y que los hombres no piensen que tienen derecho a hacerlo.”
Esto significa un cambio de mentalidades, que hay que trabajar mediante campañas de comunicación, sensibilización y, sin duda, en una transformación generacional. Las mujeres “tienen que ser educadas sabiendo que ante todo está su dignidad, el respeto a su vida, a sus decisiones, a su cuerpo y a todo lo que es una persona”.
Los hombres deben ser formados con otros modelos de masculinidad, que no sientan la necesidad de dominar, controlar o someter sólo por ser varones; a no reprimir sus emociones y pensar que son fuertes y las mujeres débiles, señaló Ana Buquet.

En la UNAM

La UNAM, dijo, tiene en su Plan de Desarrollo Institucional los temas para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres. Con el rector Enrique Graue hay una política muy clara para avanzar hacia la igualdad de género. En este sentido, “se publicó el Protocolo para la Atención de Casos de Violencia de Género en la UNAM, (suscrito) en el marco de un evento importante, de una campaña (impulsada por la ONU) a la que la UNAM se sumó: HeForShe”.
Contamos con una abogada general, Mónica González Contró, que tiene todo el interés de atender este asunto y acabar con esa situación en nuestra casa de estudios, indicó Ana Buquet.
Aunque se trata de algo que ocurre en todas las universidades y espacios sociales, la UNAM reconoce el problema y actúa a través de la publicación de normatividad, de encargarle a la abogada general la atención de este tema y de darle seguimiento; tiene un protocolo y una estrategia para que se sancione el acoso, el hostigamiento y para que tratemos de erradicarlo de la vida de nuestra comunidad, concluyó.

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