jueves, 28 de septiembre de 2017

Sheinbaum, con el agua hasta el cuello por la tragedia del Rébsamen

LA OTRA OPINIÓN |
 
28-09-2017 11:29 AM
La construcción de un departamento en el cuarto piso del Colegio Enrique Rébsamen, que colapsó tras el sismo del 19 de septiembre concluyó en 2016, sin que ninguna autoridad de la delegación Tlalpan tomará cartas en el asunto.
Esa edificación adicional a lo que era exclusivamente la escuela pudo ser determinante en el derrumbe de todo el edificio, que dejó un saldo de 27 personas fallecidas: 19 menores y ocho adultos.
La jefa delegacional de Tlalpan, Claudia Sheinbaum, se deslindó --por supuesto-- del derrumbe de la escuela, pues argumentó que la delegación tiene facultades para clausurar obras mal edificadas, pero que el INVEA no le avisó acerca de las investigaciones que hacía sobre la falsificación de documentos.
Sin embargo, esta semana, el Instituto de Verificación Administrativa informó que el colegio contaba con una multa y estaba bajo investigación por presentar un certificado apócrifo de uso de suelo expedido por la Seduvi, pues la zona donde se construyó es de uso habitacional.
Y de acuerdo con una nota publicada por El Universal, durante 2015 y 2016 las autoridades delegacionales --durante la gestión de Sheiunbaum-- no hicieron las supervisiones anuales para aprobar el Programa Interno de Protección Civil del plantel. Dicho programa es de suma importancia en caso de alguna contingencia, como la de un sismo.
El funcionario que debió verificar que se entregara ese programa es el director de Protección Civil de la delegación, César Hernández Sánchez.
Y es que el Enrique Rébsamen tiene un negro historial. En 2009 fue clausurado por no presentar el programa mencionado; en 2013 fue cerrado de nueva cuenta por la misma razón. Higinio Chávez y Maricela Contreras, respectivamente, eran los jefes delegacionales que hicieron cumplir la norma.
Hoy, Claudia Sheinbaum, la virtual candidata de Morena a la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México, se encuentra con el agua hasta el cuello. Y a pesar de las evidencias de que funcionarios de su gobierno incurrieron en omisión, ella solo se ha dedicado a deslindarse públicamente, lo que equivale a encubrir a quienes pudieron cometer irregularidades graves.
Habría que preguntarle al dueño de Morena, Andrés Manuel López Obrador, si con el debilitamiento estructural de Claudia le retirará la candidatura y perdonará a Monreal para que sea él el abanderado en la lucha por el gobierno de la Ciudad de México. ¿Será capaz?

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