Santa Lucía colapsará en 5 años
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Este lunes, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador anunció que cancelará la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) y llevará a cabo el proyecto de Santa Lucía, el cual —según él— resolverá la saturación del actual Aeropuerto de la Ciudad de México (AICM) en sólo 3 años.
Es proposición hecha por López Obrador, es falsa y fue desmentida el pasado 19 de septiembre por representantes de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), el Colegio de Ingenieros Mexicanos en Aeronáutica (CIMA), el Colegio de Controladores de Tránsito Aéreo de México (Coctam) y el Colegio de Pilotos Aviadores de México (CPAM) quienes aseguran que “Santa Lucía no es suficiente” porque sólo resolvería el problema de la saturación del AICM por cinco u ocho años, y aumentaría la capacidad del actual aeropuerto 15 o 20 por ciento. En contraste el NAIM duplicaría o triplicaría la capacidad del AICM, y funcionaría por los próximos 40 años.
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“La construcción del NAIM en Texcoco debe continuar, ya que ofrece un crecimiento para los próximos 40 años, mientras que el proyecto de Santa Lucía traería como resultado una saturación en cinco u ocho años, aseveró Rodrigo Pérez-Alonso, el director general de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero).
En conferencia de prensa que se llevó a cabo en septiembre pasado, el presidente del Colegio de Ingenieros Mexicanos en Aeronáutica (CIMA), Gregorio García Morales, afirmó también, que el proyecto de Santa Lucía solo es para cinco años y se registran riesgos en operaciones aéreas, tanto en despegues como en aterrizajes de naves. Asimismo, informó que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) no cuenta con la disponibilidad de ampliar los terrenos en Santa Lucía, por lo que se tendrían que reubicar las instalaciones de la Fuerza Aérea Mexicana, entre otras medidas.
“La pista actual tiene una longitud de tres mil 450 metros para que operen las aeronaves que ellos tienen, y si queremos llevar la aviación de nueva tecnología como el A380 o el B787 mínimo se tendría que hacer una pista de cuatro o cinco mil metros. Se tendría que salir del terreno y se tendría que reubicar a las personas que viven ahí”, explicó el ingeniero.
Por su parte el presidente del Colegio de Controladores de Tránsito Aéreo de México (Coctam), Víctor Anguiano, comentó que la operación simultánea entre el AICM y Santa Lucía demoraría las operaciones de ambos aeropuertos, problema que no se tendría con el NAIM.
“Santa Lucía y el AICM han estado operando pero con una salvedad, en Santa Lucía vuela por debajo de los que vienen a México, esto porque tienen menos aviones y porque tienen un área específica para ellos. Sí han volado, visualmente, ellos se cuidan entre sí mismos, no entran en comunicación con nosotros. Y ese sería un problema para mantenerlos al mismo tiempo”, dijo.
“Este no es un beneficio, esto no es viable porque estaremos dentro de cinco años diciendo cuál era la solución; el proyecto de Texcoco con tres pistas tiene la opción de seguir creciendo y ser dos o tres veces más la capacidad del actual aeropuerto”, sostuvo Heriberto Salazar, presidente del Colegio de Pilotos Aviadores de México (CPAM), antes de que López Obrador tomará la decisión de cancelar el NAIM.
Los estudios de los que se basaron los expertos se realizaron de acuerdo con las normas y métodos estipulados por la Organización Civil Internacional (OACI) y por parte de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), y los cuales, se informó, ya se le fueron entregados a la próxima administración.
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