• Según diversos estudios del Pew Research Center, los musulmanes son el grupo que más rápidamente crece en el planeta.
  • A fines de este siglo podrían superar en número a los cristianos, ya que sus seguidores son más jóvenes y sus mujeres tienen más hijos.
Los últimos relevamientos del Pew Research Center –uno de los más conocidos think-tanks sobre asuntos políticos y religiosos, con sede en Washington– demuestran que los musulmanes siguen siendo el grupo religioso que mayor crecimiento experimenta en el ámbito mundial.
Este crecimiento puede observarse a partir de diversas variables y también a nivel global. Algo determinante es que el número de musulmanes crece a mucha mayor velocidad que cualquier otro. En la actualidad los musulmanes van camino a ser dos mil millones de personas en el planeta: eran 1.800 millones según un relevamiento de 2015.
Uno de cada cuatro
Ya son el 25 por ciento de la población mundial (uno de cada cuatro seres humanos), según las estimaciones del Pew Research Center, lo que los mantiene en un segundo lugar global después de los cristianos, en todas sus diversas variantes.
Pero la tendencia muestra que, a fines de este siglo, el planeta tendrá más musulmanes que cristianos.
Para 2060, el número de musulmanes habrá crecido un 70 por ciento más con relación a 2015, mientras que la expansión de los restantes grupos religiosos será notablemente menor: 34 por ciento proyectado para los cristianos, 27 por ciento para los hindúes, 15 por ciento para los judíos, tres por ciento para los irreligiosos y ateos, en tanto que los budistas religiosos verán una disminución de sus seguidores de aproximadamente el siete por ciento.
La gran mayoría de los musulmanes vive en la región del Asia-Pacífico, que incluye las grandes poblaciones de Indonesia, India, Pakistán, Bangladesh, Irán y Turquía.
En este momento, Indonesia sigue siendo el país con la mayor población musulmana, aunque los cálculos actuales adelantan que ese lugar le será arrebatado alrededor de 2050 por la India, que albergará a 300 millones de seguidores de la doctrina del Corán.
En esa misma época, el país que albergó a Mahatma Gandhi también se convertirá en el más habitado del mundo, con lo que dejará a China en un segundo lugar.
Otra región del planeta donde hay gran presencia musulmana es en el este y en el norte de África, donde vive el 20 por ciento de los musulmanes del mundo.
Aquí también influye que estos países africanos, como por ejemplo Egipto, están incluidos en la lista de los que más verán crecer sus poblaciones en las próximas tres décadas, hasta alcanzar los primeros lugares de la lista mundial.
Dos cuestiones básicas
Hay dos factores principales que explican el rápido crecimiento que está experimentado la religión del islam.
Por un lado, los musulmanes tienen mucha más gente joven entre sus miembros, a diferencia del cristianismo, que sigue siendo fuerte entre la población de mayor edad.
Los musulmanes ya tenían una edad promedio mundial de 24 años en 2015, y se prevé que siga descendiendo.
En tanto, la edad promedio del resto de los grupos religiosos del mundo es siete años mayor: 31 años. Por lo tanto, hay varios cientos más de millones de musulmanes que estarán llegando rápido a la etapa de sus vidas en que comenzarán a tener hijos, lo que ayudará a que su número siga creciendo.
Cantidad de hijos
El dato anterior se combina con la alta tasa de natalidad que sigue existiendo entre las mujeres musulmanas.
Si bien la tendencia planetaria es hacia un mayor control del número de nacimientos en todas las regiones del globo, las mujeres musulmanas siguen teniendo un promedio de 2,9 niños, mientras el resto de todos los grupos religiosos combinados solamente llegan a un promedio de 2,2 niños por mujer.
Esta tasa de natalidad musulmana es todavía mayor entre los musulmanes del África subsahariana, donde las mujeres tienen 5,2 hijos de promedio.
Las mujeres musulmanas que menos hijos tienen son las que se trasladan a vivir a Europa: solamente 2,1 hijos cada una de promedio.
Un tercer factor que ayuda al crecimiento del islam es la inmigración, que en este momento multiplica el número de musulmanes en toda Europa y en los Estados Unidos.
Las proyecciones señalan que el 10 por ciento de los europeos será musulmán dentro de 30 años.
En los Estados Unidos, en tanto, se calcula que ya hay 3,5 millones de musulmanes que constituyen el 1,1 por ciento de la población del país que hoy gobierna Donald Trump, según encuestas de 2017.
El relevamiento del Pew Research dice que, de ese total de musulmanes en Estados Unidos, casi el 60 por ciento es inmigrante, y la tendencia proyecta que se convertirán en el 2,1 por ciento de la población estadounidense para el año 2050. Esto último significará que los musulmanes superarán el número de judíos y se convertirán en uno de los grupos religiosos más numerosos.
Si bien las creencias religiosas de los musulmanes –dice el Pew Research– varían según el lugar del mundo donde vivan, tal como ocurre dentro del cristianismo, todos ellos coinciden en creer en que existe un único dios y profeta, Mahoma, y en realizar algunas prácticas rituales como la observancia del Ramadán, el mes durante el cual suelen realizar ayuno desde el amanecer hasta la noche.
En otros temas no existe tanto consenso en el mundo musulmán. Por ejemplo, sobre la ley islámica sharia, el código de conducta sobre culto, moral y formas de vida. Una encuesta a musulmanes de 39 países mostró una amplia variedad de respuestas. Mientras los musulmanes de países como Irak, Afganistán y Pakistán apoyaron la aplicación de la sharia con índices cercanos al ciento por ciento, en lugares como Azerbaiján, Kazajstán y Turquía, el consenso al respecto apenas rondó el 10 por ciento.
En Córdoba, los dos principales templos del islam funcionan en los barrios Cofico y Centro, y la mayoría de quienes concurren son cordobeses con familiares de origen árabe que llegaron al país desde Siria, Líbano, Irak, Turquía y Egipto. Hasta hace poco tiempo, según contaron a este diario sus autoridades, localmente unas 10 personas se convierten cada año a esta religión.
Edición Impresa
El texto original de este artículo fue publicado el 9/01/2019 en nuestra edición impresa.