La economía no se ha frenado. El producto industrial bruto cayo 0.2%, gracias a huelgas y las secuelas de la crisis de distribución de petróleo.
Las estadísticas de desempleo en México siendo poco fiables, el desempleo subió a 3.6% desde 3.4% en el año pasado, pero el subempleo bajo de 7.1% a 6.9%.
El valor del peso creció de 20 pesos al dólar a 19 pesos. Dado que el peso cayó de 19 al dólar antes la inauguración de AMLO, 19 pesos al dólar significa que los mercados mundiales tienen la misma fe en AMLO que tenían en EPN. (Dado que la devaluación bajo EPN fue de 13 a 20 pesos al dólar, pero éso no provocó una inflación general ni un colapso como las devaluaciones de Lopez Portillo, de la Madrid ni Salinas Gortari, so quizá la caída de EPN fue una estrategia macroeconómia buena.)
Mientras tanto, el sueldo mínimo subió por 16.20% en el interior del país a 101.68 pesos, pero en zonas fronterizas, subió a 176.72 pesos diarios, duplicándose más o menos. También, la IVA en zonas fronterizas fue reducido de 16% a 8%. La inflación esta oscilando entre 3.9% y 4.4%.
Por eso, parece que la economía mexicana está estable y el mundo financiero tiene bastante fe en AMLO. Con la expansión de la economía de los EEUU. y los efectos favorables de un aumento el el salario mínimo y la caída del IVA es razonable pronosticar un aumento en la PIB.
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