Tristeza y furia marcan funeral de mártires de ataque israelí a Yenín
Miles de palestinos asisten a la procesión fúnebre de una docena de víctimas, entre ellos cuatro menores, de la brutal agresión israelí en Yenín, en Cisjordania.
Los dolientes se reunieron este miércoles frente al hospital gubernamental de la ciudad de Yenín, en el norte de la Cisjordania ocupada, mientras lloraban por las víctimas del último ataque israelí.
Gritaron consignas en conmemoración de los mártires y en apoyo a los combatientes de la Resistencia, que valientemente resistieron la violencia israelí y obligaron a las tropas del régimen a retirarse.
Los participantes también prometieron continuar el camino de la Resistencia en la lucha contra el régimen israelí hasta la victoria final.
En una agresión, sin precedentes en la zona desde la Segunda Intifada (2000-05), el ejército israelí lanzó el lunes y el martes una ofensiva a gran escala en la ciudad de Yenín y su campamento de refugiados, con el empleo de todo tipo de bombardeos aéreos y terrestres.
La ofensiva israelí dejó al menos 12 palestinos muertos y 140 heridos. Además un soldado israelí murió como resultado del conflicto, durante el cual una firme respuesta de la Resistencia palestina llevó al régimen a retirar sus fuerzas en menos de dos días.
Según informes de organizaciones médicas y de derechos humanos, el régimen israelí apuntó a hospitales, equipos y ambulancias e impidió sus movimientos. También asedió a unas 13 000 personas en el campamento de refugiados de Yenín, y forzó a cientos de palestinos, unos 4000, de la zona a abandonar sus hogares bajo amenazas y bombardeo de sus casas.
La agresión israelí dejó en la ciudad y en su campamento de refugiados graves daños a la propiedad palestina, destruyendo muchos vehículos y arrasando las carreteras principales que conducen al campamento y otras carreteras secundarias en sus inmediaciones, lo que impidió la llegada de ambulancias a algunas viviendas para evacuar a los heridos.
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