Simulación e ineptitud de la 4T se ven reflejadas en megaobras de Obrador
AMLO busca desesperadamente algo que presumir ante los malos resultados que ha dado su gobierno fallido
Para presumir que su gobierno “cumple lo que promete”, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha inaugurado sus megaobras faraónicas inservibles pero incompletas.
Por ejemplo, el 21 de marzo de 2022 inauguró el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” (AIFA); sin embargo, para que está terminal aérea abriera sus puertas se tuvo que modificar el diseño original al menos cinco veces.
Asimismo, para esa fecha, no estaban concluidas obras secundarias como los accesos para ingresar al aeropuerto (carreteras y tren suburbano Buenavista-AIFA).
Otro ejemplo, el 1 de julio de 2022 inauguró la primera etapa de la refinería “Olmeca” ubicada en Dos Bocas, Tabasco.
Sin embargo, el propio mandatario tabasqueño reconoció que este elefante blanco aún no estaba terminado, pues prometió que esta megaconstrucción estaría terminada a mediados de 2023.
“Las grandes empresas constructoras de refinerías querían que se aceptará su terminación hasta el 2025, dijimos: ‘no’, la tenemos que terminar a más tardar en el 2023”, dijo el 6 de diciembre de 2022.
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Cómo pueden ver, López Obrador busca desesperadamente algo que presumir ante los malos resultados que ha dado su gobierno fallido.
Por ello se empeña en inaugurar sus megaobras inconclusas y encarecidas que son enormes barriles sin fondo en donde se va todo el dinero de los mexicanos.
Para reflexionar sobre este tema tenemos la columna de Alejo Sánchez Cano que se titula “Simulación e ineptitud en Dos Bocas y AIFA”, en donde expone que la simulación y la ineptitud son dos sellos que caracterizan a la administración de Andrés Manuel y que se ven reflejados en sus megaobras.
“Esta es la obra que tanto presumió AMLO al preferirla sobre el aeropuerto de Texcoco y que a la postre causó un daño patrimonial por su cancelación del orden de 300 mil millones de pesos, según datos de la Auditoría Superior de la Federación, además del pago a los tenedores de bonos y por supuesto del dinero que llevaba en su construcción y ello, sin considerar los cien mil millones de pesos que costó el AIFA”, expuso.
Asimismo, señala cómo AMLO ha hecho todo lo posible para simular y hacerle creer a los mexicanos que sus megaconstrucciones sí funcionan.
“A diario se observa a decenas de pipas transportando petróleo a sus instalaciones para en cualquier momento anunciar que ya empezó a refinar, aunque esto no sea cierto (…) La refinería de Dos Bocas ha sido otro proyecto fallido del presidente que se quedará a la mitad del camino en cuanto a operar al cien por ciento de su capacidad”, apuntó.
A continuación puede consultar el texto completo.
Con información de Proceso, El Financiero y Forbes México
MSA
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