Euskal Herria. Bilbao clama contra el genocidio en Gaza: “¡60.000 muertos y seguimos callando!”
Por David BM / Ecuador Etxea, 31 de mayo de 2025.
Concentración masiva en Moyúa exige justicia y ayuda humanitaria urgente.
Esta tarde, la ciudad ha sido testigo de una concentración profundamente emotiva e indignada convocada por colectivos sociales que han decidido romper el silencio frente a lo que no dudan en calificar como genocidio en Palestina. Bajo el lema “¡Alto el fuego ya! ¡Ayuda humanitaria ya!”, la Plaza Moyúa se llenó de pancartas, rabia contenida y voces firmes que exigieron el fin de la impunidad internacional y la complicidad de gobiernos europeos.
“Llevamos demasiado tiempo asistiendo, entre el espanto y la perplejidad, al exterminio del pueblo palestino”, comenzó el manifiesto leído ante decenas de personas congregadas. “Criaturas famélicas, lisiadas y aterrorizadas junto a hileras de cadáveres envueltos en sudarios blancos nos acompañan durante las comidas y cenas. ¡Y no hacemos nada!”.
Y es que, en esta escena de horror continuado, la pasividad de la comunidad internacional empieza a parecer más una postura ideológica que un error diplomático. Según datos recogidos por las organizaciones convocantes, cerca de 60.000 personas han sido asesinadas en Gaza, 15.000 de ellas, criaturas, mientras el mundo se distrae con cumbres, comunicados de condena y comunicados más vacíos que los hospitales palestinos, bombardeados sin piedad.
“Los cuerpos imposibles de extraer bajo los escombros pueden multiplicar estas cifras”, advierte el manifiesto. No se trata solo de bombas. La hambruna provocada como arma de guerra, la falta de atención médica, los campos de refugiadas convertidos en objetivos militares, forman parte de un paisaje en el que el derecho internacional duerme mientras la muerte trabaja a pleno rendimiento.
“No basta con sufrir en silencio”
La lectura del manifiesto fue directa, dolorosa y llena de preguntas: ¿hasta cuándo miraremos hacia otro lado? ¿Cuántos niños más deben morir para que la opinión pública europea reaccione? Desde las organizaciones convocantes —Begirune, Ongi Etorri Errefuxiatuak y Pertsonalde— no se hizo apelación tibia alguna. “No basta con sufrir en soledad las insoportables noticias. Tenemos que salir a las calles y manifestar alto y claro nuestra repulsa”.
El texto recordó que la historia no cambia sola: “la presión de la ciudadanía, cuando grita con firmeza y con una sola voz, consigue que las situaciones cambien”.
Genocidio con nombre y apellidos
Los mensajes fueron duros, sin matices diplomáticos ni equidistancias. “No podemos seguir tolerando el genocidio con nuestro silencio”, se clamó ante un público que asentía, pancarta en mano. Porque la neutralidad, en medio de una masacre, es también una forma de complicidad.
El acto finalizó con una exigencia doble: “¡Alto el fuego ya! ¡Ayuda humanitaria ya!”, elevando la voz frente a una situación que, por su crudeza, ha dejado de caber en los titulares, pero sigue asesinando en cada minuto de indiferencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario