BASES ASTRONÓMICAS DE LOS MAYAS

BASES ASTRONÓMICAS DE LOS MAYAS


Los mayas desarrollaron su calendario basándose en sus observaciones astronómicas, que eran exclusivamente visuales. Escrutaban el horizonte desde posiciones fijas, sobre todo al amanecer y al atardecer, para observar la aparición y la desaparición de los astros.

Construyeron varios tipos de edificios específicamente diseñados para la observación astronómica. La muestra más impresionante de la que se tiene constancia es el edificio circular llamado “Caracol”, que se encuentra en la ciudad de Chichén Itzá, Yucatán, México. La planta superior, con sus ventanas, era un observatorio de la órbita de los astros (fotografía 205): del Sol (k’in), de la Luna (uh), de las estrellas (ek’ob) y del planeta Venus, la gran estrella (chak ek’).

El Caracol es uno de los pocos edificios circulares de los que hasta la fecha existe constancia en los territorios mayas. Debe su nombre a la escalera de caracol de su interior, que conduce a la planta superior. Esta sala elevada contaba con ventanas adecuadas para la observación astronómica.



El Caracol. Chichén Itzá, Yucatán, México; finales del periodo clásico, 850-1000 d.C.; piedra caliza; altura 11,5 m, diámetro 11 m
En consecuencia, el Caracol era el observatorio de Chichén Itzá; desde él podían observarse las posiciones del Sol y de la Luna en el espacio. Los textos jeroglíficos del edificio datan de la segunda mitad del siglo IX. Este edificio circular, concebido como observatorio astronómico, se alzaba sobre una plataforma rectangular y elevada. Al excavar las escaleras de la plataforma aparecieron inscripciones relacionadas con acontecimientos de la segunda mitad del siglo IX, época en que probablemente

terminó la última fase de la construcción del edificio.



Sólo se conservan tres ventanas se este edificio circular, que permitían observar desde el interior distintos fenómenos astronómicos. Los bordes de las ventanas servían de líneas de mira.


El complejo de edificios del clásico temprano conocido en la bibliografía especializada con el nombre de “grupo E” era probablemente una estructura sencilla concebida para observar la órbita anual del Sol. Mirando por el ángulo izquierdo del edificio norte se veía el punto del horizonte por el que aparecía el astro en el solsticio de verano, mientras que desde el borde derecho del edificio del sur

Representación esquemática de las líneas de mira del grupo E de Uaxactún


construido sobre la plataforma se podía fijar su salida en el solsticio de invierno.


Por el contrario en los equinoccios de primavera y de otoño el Sol aparecía en la dirección del edificio central. Se han descubierto construcciones similares en muchas otras ciudades mayas.

Los astros y sus signos gráficos

Los mayas tenían un signo gráfico para cada astro. El Sol se representaba como una flor de cuatro hojas y la Luna, como una superficie ovalada con líneas cruzadas para sus manchas. El signo de la estrella se parecía a la letra “W”. El símbolo de Venus constaba de dos signos de estrella unidos entre sí.