"El Estado Islámico recluta en Europa a jóvenes que no conocen su religión ni han practicado el islam"
"Profundamente
entristecido por los ataques terroristas" de Bruselas, el imam lucha
contra el extremismo a través de la educación
Hijo de emigrantes paquistaníes en el Reino Unido, la vida de Monawar Hussain está presidida por el compromiso con su sociedad. Por eso creó en 2009 The Oxford Foundation, que trabaja para contrarrestar el extremismo islámico y tender puentes entre comunidades a través de la educación.
En 2004 fue nombrado el primer imam en la historia de la prestigiosa
institución educativa Eton y desde hace años trabaja como imam en los
hospitales de la Universidad de Oxford. En 2014, Hussain promovió una Carta Abierta a Abu Bakr al Baghdadi
(líder del Estado Islámico, IS, en sus siglas en inglés) que ha sido
firmada por 126 autoridades islámicas de todo el mundo y el martes, tras
los atentados de Bruselas,
se mostró "profundamente entristecido por los ataques terroristas y la
trágica pérdida de vidas". ELMUNDO.es lo ha entrevistado en el marco de
un congreso sobre diálogo interreligioso organizado por el Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra.- ¿Por qué tantos jóvenes en Europa y Oriente Próximo se sienten atraídos por el modelo y la retórica de Estado Islámico y otras organizaciones terroristas?
- Creo que sienten atracción porque hay ausencia de democracia en sus países, porque hay una falta de sentido de propiedad. No creo que esos países tengan ninguna esperanza. Son despóticos. Cualquiera que disienta es enviado a prisión, es torturado. Y lo que hace esto es alienar a los pueblos, se convierten en un polo de desintegración y esto es una audiencia cautiva para Al Qaeda, el IS y todos estos grupos extremistas terroristas.
- Eso en Oriente Próximo, pero ¿qué ocurre con los hijos o nietos de inmigrantes que hoy son jóvenes europeos y que viven en un entorno democrático?
- Pienso que están influidos por una interpretación del islam que es financiada por grandes cantidades de dinero. Esto es muy importante para entender bien el asunto. Hay una interpretación que no es la corriente mayoritaria, pero que está financiada por miles de millones de dólares y que es anti islámica y antihumana porque si alguien no sigue su opinión merece la ejecución, según su doctrina. Hace 200 años hubo un jeque llamado Mohamed Abdel Wahab quien básicamente dijo que todos sus compañeros musulmanes de lo que hoy es Arabia Saudí no eran musulmanes, ya que practicaban un islam equivocado, y que él tenía la clave del verdadero islam. Esta corriente es la wahabí o salafista. Es una forma de islam intolerante que no tiene respeto por la diferencia. En el corazón del islam hay un principio que es el Ihsan: el concepto de hacer aquello que es bello. El problema es que los musulmanes han sido desconectados de esta idea. Así que tenemos a esta gente que está tomando una ideología política y ha insertado una retorcida interpretación teológica en ella.
- ¿Se alimenta esta ideología de los conflictos en Oriente Próximo?
- El problema es cómo reclutan a la gente para su causa: enseñan imágenes muy gráficas del sufrimiento de los musulmanes a jóvenes simplistas e idealistas, que no saben mucho de su religión ni de lo que dice el Corán o las azoras, y les preguntan cómo vas a ayudar a tus hermanos. Ellos no tienen la resiliencia para rebatir ese mandato de lucha para matar a personas que no nos han hecho daño. El profeta ya nos advirtió -siglos atrás- de que esto pasaría, dijo: "Llegará un momento en que una persona será asesinada y no sabremos por qué y la persona que mate no sabrá por qué mata". Es exactamente lo que tenemos ahora.... París, Bruselas... Gente inocente que no tenía nada que ver con la guerra fue asesinada. ¿Qué clase de religión es ésa? Muchos de los asesinos de [los atentados del 13 de noviembre en] París eran europeos, vivían en París, en Bruselas... Eso es lo que quieren, quieren crear conmoción y dividirnos. La vasta mayoría de los musulmanes vive una vida normal: trabajan, pagan sus facturas, crían a sus familias... Ellos solo quieren crear duda y sospecha hacia las comunidades musulmanas.
- ¿Piensa que los últimos ataques terroristas en Europa dan alas a la islamofobia?
- Absolutamente. No tengo ninguna duda. Tenemos a grupos de extrema derecha e islamófobos utilizando la violencia de estos terroristas contra toda la comunidad musulmana. Olvidan que la mayoría de las víctimas de IS y de Al Qaeda son musulmanas. Esta ideología extremista no es el islam, está financiada por un Gobierno que ha conseguido difundirla en todo el mundo. No tiene nada que ver con el islam y la vamos a derrotar porque la violencia y el odio no apelan al corazón humano; es el amor y la compasión lo que lo hace. Por eso no pueden ganar nunca. Pero lo triste es el daño que hacen a la vida de tantas personas y familias.
- ¿Puede la sociedad recuperar a esos jóvenes atraídos por la ideología radical?
- Sí, a algunos de ellos los podemos recuperar a través de la educación, mostrándoles que lo que les han dicho sobre el islam es en realidad el punto de vista de una minoría extremista que no representa al islam, desmontar sus argumentos, abrir el Corán y decir: ¿dónde se lee eso que te han dicho? Es un problema de alfabetización religiosa. Lo que pasa es que estos musulmanes que no han practicado antes la fe, que han estado en el mundo de las drogas, el crimen, etc.; algunos de ellos descubren el islam salafista o wahabí y miran a los demás con odio. Van de un extremo a otro. No saben nada de su religión y esos predicadores les ofrecen un camino al paraíso pero en realidad, es un camino hacia el infierno. Esas personas lo llaman islam pero es algo totalmente ajeno a nuestra tradición.
- El problema es que, aunque el wahabismo y el salafismo son ideologías minoritarias tienen mucho poder y financiación detrás. ¿Cómo luchar contra ellas?
- Una manera sería abrir los santos lugares de La Meca y Medina [en Arabia Saudí] a las versiones del islam mayoritarias y desautorizar la ideología estatal. Allí, a los musulmanes que hacen la peregrinación, todo lo que se les dice es que están practicando el islam equivocado y que ahí está el islam puro. Pero si en los santos lugares se pudiera predicar libremente -casi todo el mundo puede ir allí pero no se puede predicar-, si hubiera libertad de expresión para predicar otras interpretaciones del islam, otras escuelas teológicas podrían ir libremente y sería la forma de acabar con el salafismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario