La crisis económica cambió el panorama político en Europa

La crisis económica cambió el panorama político en Europa
Francia:
Desde que llegó al poder en 2007, Nicolas Sarkozy sólo ha sabido de derrotas. Su partido, la Unión por un Movimiento Popular, perdió en las elecciones municipales en 2008, en las regionales en 2010 y en las cantonales y senatoriales en 2011.
El presente del Mandatario galo es desastroso. El 68% de los franceses piensa que no será reelegido en las elecciones de abril de 2012 y tan sólo un 30% dice confiar en él. Todo parece indicar que la oposición socialista arribará al poder.
Italia:
El controvertido Primer Ministro italiano, Silvio Berlusconi, tampoco lo ha pasado bien. Si bien en su caso el bajo apoyo popular se debe, por un lado a la serie de escándalos sexuales y judiciales protagonizados por él en los últimos años, también tiene relación con las medidas tomadas para enfrentar la crisis.
En mayo el partido del Premier italiano sufrió sendas derrotas en las elecciones municipales de Nápoles y Milán. La popularidad de Berlusconi actualmente es de un 26%, una cifra demasiado baja y que nunca antes había obtenido ningún Primer Ministro.
España:
La crisis económica se ha sentido con todo en España. Siete de cada diez personas cree que la economía no mejorará y actualmente son 4.226.744 los españoles que no tienen trabajo.
Por eso, no es de extrañar que el 70% vea la situación política mala o muy mala y que todos los sondeos presagien que el gobernante Partido Socialista Obrero perderá las elecciones generales convocadas anticipadamente por el Presidente José Luis Rodríguez Zapatero, a manos del Partido Popular.
Grecia:
Es la nación más afectada por la crisis. Por eso sus ciudadanos constantemente realizan protestas y disturbios. De hecho, ayer se produjo una nueva huelga general contra las medidas de austeridad anunciadas por las autoridades.
El gobierno de Georgios Papandreu, líder del Movimiento Socialista Panhelénico (Pasok), se encuentra en muy mal pie. Las fuerzas de oposición le exigen repetidamente que adelante las elecciones legislativas previstas para 2013, pese a que él cree que podrá superar la crisis.
Alemania:
El presente de la canciller Angela Merkel tampoco es bueno. Su popularidad y la de su partido han ido cayendo constantemente producto del manejo de la crisis. El apoyo de la coalición gobernante, formada por la Unión Cristiano Demócrata (CDU) y la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), actualmente ronda el 30% y en cada sondeo nuevo tiende a descender un poco más.
A nivel electoral, la coalición de Merkel sufrió duros reveses este año en distintas regiones, como Mecklemburgo-Pomerania, Baden-Wuerttemberg y Hamburgo, que evidencian el gran desencanto ciudadano hacia sus políticas.
Portugal:
Portugal ha sido uno de los países más golpeados a nivel político por la crisis económica. En mayo, el hasta entonces Primer Ministro José Sócrates presentó su dimisión luego de que el Parlamento no aprobara sus medidas de ajuste económico. En junio asumió el cargo vacante el líder del Partido Social Demócrata, Pedro Passos Coelho, luego que su partido lograra el 47% de los votos en las elecciones anticipadas y se asociara con el derechista CDS que obtuvo un 10,45%.
Inglaterra:
Pese a que los sondeos indican que David Cameron se mantendrá en el poder, su figura resultó bastante cuestionada producto de los violentos disturbios registrados en agosto.
El país no se ha visto exento de las complicaciones económicas que se han adueñado de la región, al punto de que el Banco Central afirmó que está dispuesto a inyectar más dinero a la economía para sacarla a flote.