Una historia de acercamiento al Islam

Una historia de acercamiento al Islam
"Casi han pasado dos años desde entonces, y con la ayuda de Al-lah sigo profundizando en mi Din, e intentado ser cada día mejor musulmán y mejor persona"
Opinión - 29/12/2009 10:43 - Autor: Alterego - Fuente: Galicia MusulmanaVota:- Resultado 20 votos | Más... Etiquetas: shahada, islam, allah

Casi han pasado dos años desde entonces, y con la ayuda de Al-lah sigo profundizando en mi Din, e intentado ser cada día mejor musulmán y mejor persona.En apenas algo más de dos años, se cumplirá medio siglo. Ví por primera vez la luz junto al Océano Atlántico, en el Puerto Grande de los Ártabros, lo que ahora es A Coruña. Como la mayoría de los nacidos en España en aquel tiempo, mi familia era , y es, católica, así que lógicamente, me bautizaron como católico. Durante los primeros años de mi vida seguí la formación doctrinal y espiritual de cualquier católico español, e incluso estuve muy vinculado a la vida de mis parroquias de residencia. En mi adolescencia me vi tentado por una organización ultra católica, pero no sucumbí a su tentación porque mi espíritu es libre y no aceptaba dogmas sin sentido.

A medida que fui creciendo y madurando, pasé por muchas etapas, desde la apatía, el agnosticismo, hasta la búsqueda de las respuestas. Para ello, intenté conocer profundamente la realidad histórica de la religión en la que fui bautizado, no sólo la oficial, sino todas las realidades, todas las teorías, y tras constatar la falsificación histórica y filosófica, comencé a investigar en otras fuentes.

Investigué, leí, pregunté, reflexioné sobre la existencia de Dios, y sobre las religiones y filosofías que en el mundo han dejado su huella, comparando, analizando, desmenuzando ...... y nada parecía darme las respuestas que buscaba, o las respuestas eran más complicadas que las preguntas.

Entonces, llegó a mis manos un Corán en español, y comencé el viaje a través de sus páginas. Al principio había muchos conceptos que chocaban con mi mentalidad occidental. A través de una persona árabe me introduje en la mentalidad musulmana, y empecé a ver los conceptos de otra forma.

Seguí leyendo e investigando todo lo que sobre el Islam caía en mis manos, y fui construyendo poco a poco mi acercamiento a la comunidad musulmana. Me fui empapando de la lógica que se encuentra en el Corán, de su sencillez, de su belleza. Me gustó la relación directa del musulmán con Al-lah, sin misterios, sin dogmas, sin intermediarios. Me emocionó la naturalidad del mensaje de Muhammad (sas), su personalidad, su ejemplo. Y conseguí ver lo que hay detrás de los estereotipos negativos del Islam, detrás de los errores de los hombres.

Y decidí que yo necesitaba ser musulmán.

Busqué como hacerlo, y hablé con una amiga marroquí para que me acompañara a la única mezquita de la que había oido hablar cerca de donde yo vivía, y después de una peripecia por los alrededores de su ubicación, buscándola, llegamos a ella. No me atrevía a ir sólo, no sabía si me recibirían bien, o si la gente que habría allí me entendería.

Me recibieron estupendamente, y después de hablar un rato con el Imam, pronuncié mi Shahada ante una docena de testigos, muy nervioso, tanto que, a pesar de saber de memoria el texto de la Shahada, tuve que repetir un par de veces, porque me trababa, pero finalmente conseguí pronunciarla correctamente alhamdulilah.

Ha sido difícil que mi entorno entendiera la decisión, y sus reacciones han ido desde la incredulidad (no me creo que hayas hecho eso), la broma (eso son tonterías tuyas), la duda sobre mi decisión (no durarás mucho), y el rechazo (déjate de tonterías, no quiero saber nada de tí si haces eso). Pero con el tiempo, lo han ido entendiendo, comprobando y en algunos casos aceptado.

Casi han pasado dos años desde entonces, y con la ayuda de Al-lah sigo profundizando en mi Din, e intentado ser cada día mejor musulmán y mejor persona.

Que Al-lah me ayude.