Atacan monasterio cristiano en Israel

Atacan monasterio cristiano en Israel Como parte de una política de venganza llamada "precio a pagar" varias mezquitas y templos cristianos han sido atacados; autoridades exigen el esclarecimiento de estos actos. Se han registrado una gran cantidad de ataques a templos cristianos y musulmanes en la zona fronteriza entre territorio israelí y palestino. Un monasterio de Latrún, ubicado a poca distancia de Jerusalén, sufrió un severo ataque en el que la puerta principal del inmueble quedó calcinada; los perpetradores pintaron en los muros mensajes de violencia como “Jesucristo es un mono”. Asimismo, los individuos que ejecutaron el ataque escribieron en las paredes de la abadía cristiana, el nombre de Migrón, la colonia judía ilegal más grande y antigua de Cisjordania, evacuada el domingo por orden de la Corte Suprema israelí. Entre los escritos en la pared figuraban las palabras “precio a pagar”, nombre con el que los colonos radicales designan a una política que consiste en: “Vengarse de decisiones gubernamentales que consideran hostiles a sus intereses, vandalizando pueblos palestinos y lugares de culto musulmán o cristiano”. Ante dichos mensajes, la hipótesis de que el ataque fuera realizado por algún grupo de colonos no es tan descabellada. Como ya se mencionó, el pasado domingo, autoridades israelíes evacuaron a medio centenar de familias colonas de la Cisjordania palestina, en cumplimento de una orden judicial. Latrún, ubicado junto a la línea verde que separa los territorios palestinos de los israelíes y habitado por monjes trapenses franceses, es sólo el último de una cadena de ataques contra iglesias y mezquitas situadas en los territorios palestinos. Tal como lo señala la prensa israelí, dichos actos suelen quedar impunes. Autoridades palestinas, israelíes y religiosas condenaron los hechos, incluso el Yesha Council, organización que representa a los colonos, se quejó de que la incapacidad de los servicios secretos para capturar a los culpables de este tipo de atropellos. “Este último ataque aporta una nueva confirmación de la cultura del odio y el racismo que practican los colonos que gozan de plena inmunidad; lo que les da la seguridad necesaria para atacar mezquitas, iglesias, árboles, coches, casas, así como a nuestra propia gente sin que haya consecuencias para ellos”, consideró el jefe negociador palestino, Saeb Erekat. Erekat culpó además al gobierno israelí por alentar a los colonos a asentarse en territorio palestino, contando hasta 57 ataques perpetrados por colonos en el último mes. De acuerdo con la agencia France Presse, obispos católicos de Tierra Santa pidieron al Gobierno israelí que “actúe para poner fin a esta violencia absurda y garantizar la enseñanza del respeto en las escuelas”. La oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu, informó mediante un comunicado que éste es “un acto terrible y sus responsables deben ser castigados con dureza”. En su edición digital, el diario israelí Yedioth Ahronoth recordó hoy que el suceso de Latrún es precedido por varios ataques sucedidos en los últimos tres meses: Neve Shalom, Kafr Yaba y Yalazún, son los nombres de localidades en los que se han producido sucesos similares y que no han derivado “ni en detenciones ni en acusaciones judiciales”.