La decisión de la mayoría de los 193 países que conforman la Asamblea General de Naciones Unidas de reconocer al Estado Palestino como miembro observador no le gustó nada a Israel, cuyo primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo que no servirá de mucho “no importa cuántas manos se levanten en nuestra contra”.

ONU vota a favor de reconocer a Palestina como “Estado observador” pese a presiones sionistas y de EE.UU. "

 
 
 
A pesar de su firme oposición al intento palestino de convertirse en un “Estado no miembro” de Naciones Unidas, Israel atenuó las amenazas de represalias ante el amplio apoyo internacional a la iniciativa, especialmente de sus aliados europeos.

“La decisión en 
Naciones Unidas no cambiará nada sobre el terreno”, dijo Netanyahu durante una visita a un museo en Jerusalén. “No avanzará en la creación de un Estado palestino. Lo retrasará más”, dijo.

La votación se celebra en una fecha grabada en la 
memoria colectiva, cuando la Asamblea votó el 29 de noviembre de 1947 la Resolución 181, por la que se partió el territorio palestino bajo control británico en dos estados, uno árabe y otro judío. Los gobernantes árabes la rechazaron y, tras encarnizados combates, solo Israel fue reconocido como Estado seis meses más tarde.

Israel, que ocupa Cisjordania y Jerusalén Este desde 1967, señaló que un Estado palestino debe ser producto de negociaciones directas y de un acuerdo de paz que imponga medidas de 
seguridad y determine fronteras que no supongan un peligro para los israelíes.

Las negociaciones directas de paz se suspendieron en 2010 por una disputa sobre la construcción de asentamientos israelíes en Cisjordania. Netanyahu aspira a la reelección en los comicios generales el 22 de enero y ha sido acusado por sus detractores de dañar imagen internacional de Israel por sus políticas palestinas.

Israel amenaza ahora con una medida: retener 200 millones de 
dólares de las transferencias mensuales de los impuestos que Israel recauda en nombre de la Autoridad Palestina.