En los últimos años, los talibanes han resurgido y mantienen la presión sobre el gobierno afgano (AP)
En los últimos años, los talibanes han resurgido y mantienen la presión sobre el gobierno afgano (AP)
En un hecho inusual para el país devastado por la guerra civil, el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS en inglés) unió fuerzas con los talibanes en Afganistán para atacar el sábado un pueblo defendido por una milicia apoyada por Kabul en el norte del país.
Los extremistas mataron a 50 hombres, mujeres y niños en el distrito Sayad, provincia de Sar-e Pul, tras derrotar a la Policía Local Afgana (PLA), un grupo paramilitar sostenido por el gobierno central, en una batalla que duró 48 horas.
Es raro que las dos organizaciones extremistas, que compiten por imponerse en el territorio y han, incluso, combatido entre ellas reiteradas veces se unan para coordinar ataques de este tipo.
"Fue una operación en conjunto entre Daesh [acrónimo en árabe para el ISIS] y los talibanes. Reclutaron fuerzas de otras provincias y atacaron la aldea de Mirzawalang", dijo este lunes a la AFP Zabihullah Amani, portavoz del gobierno provincial.