Palestina. Al igual que el Che Guevara, Yahya Sinwar cayó combatiendo, con su uniforme y su fusil
Por Maureen Clare Murphy / The Intifada Electronic / 18 de octubre de 2024.
Foto: Yahya Sinwar, entonces jefe de Hamás en Gaza, saluda a sus partidarios durante una manifestación en Beit Lahiya, en el norte de Gaza, en mayo de 2021.
Imágenes de Ashraf Amra
El ejército israelí anunció el jueves que mató al líder de Hamas, Yahya Sinwar, en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza.
Según informes, Sinwar fue asesinado el miércoles por tropas terrestres que no se dieron cuenta de que estaban combatiendo al hombre más buscado de Israel, aparentemente sin tener información previa sobre su ubicación.
La policía israelí afirmó que “los registros dentales y las huellas dactilares han permitido la identificación definitiva de los restos de Sinwar”, informó Reuters .
Los medios israelíes publicaron imágenes gráficas y vídeos que supuestamente mostraban el cuerpo de Sinwar.
Sinwar sucedió a Ismail Haniyeh como líder de Hamas después de que este último fuera asesinado en julio en Teherán, donde fue invitado a la toma de posesión del presidente iraní Masoud Pezeshkian.
Aunque nunca ha confirmado ni negado su responsabilidad, se cree que Israel mató a Haniyeh, quien era el principal interlocutor palestino en las negociaciones para liberar a los cautivos retenidos por Hamás y otros grupos en Gaza y poner fin a la catastrófica ofensiva israelí en el territorio.
A fines del mes pasado, Israel asesinó al secretario general de Hezbolá, Hasan Nasrallah, en un ataque con bomba masivo en los suburbios del sur de Beirut y ha matado a varios otros líderes fundadores de la organización de resistencia libanesa.
Presión máxima sobre la resistencia
Israel, con el pleno apoyo de Estados Unidos, ha seguido una estrategia de máxima presión para destruir tanto a Hamás como a Hizbulá, matando al menos a 42.000 palestinos en Gaza y a más de 2.400 personas en el Líbano durante el año pasado.
Estados Unidos ha bloqueado los esfuerzos por un alto el fuego en Gaza invocando su veto varias veces en el Consejo de Seguridad de la ONU y en su lugar ofreció proyectos de resolución que piden una pausa temporal en los combates en Gaza que permitiría la liberación de cautivos israelíes y extranjeros detenidos en el territorio.
Después de vetar un proyecto de resolución que pedía un alto el fuego a principios de diciembre del año pasado, el embajador adjunto de Estados Unidos, Robert Wood, dijo que el fin de la ofensiva israelí “sólo plantaría las semillas para la próxima guerra, porque Hamás no desea ver una paz duradera, una solución de dos Estados”.
Lo que realmente quiso decir fue que Estados Unidos no apoya ninguna vía diplomática que permita que Hamás siga siendo la autoridad gobernante de facto en Gaza.
Estados Unidos también parece querer nada menos que una capitulación total de Hizbulá en el Líbano. El grupo de resistencia libanés reiteró esta semana que sólo un acuerdo para poner fin al genocidio en Gaza traería tranquilidad al llamado frente norte de Israel y permitiría a los colonos de los asentamientos evacuados regresar a sus hogares.
Washington está tan comprometido con la erradicación de los grupos de resistencia que está arriesgándose a una confrontación militar con Irán y está enviando tropas para operar un avanzado sistema de defensa antimisiles para complementar las inadecuadas defensas de Israel contra proyectiles de largo alcance.
Abbas Araqchi, ministro de Asuntos Exteriores de Irán, advirtió que Washington estaba poniendo en peligro la vida de sus tropas “al desplegarlas para operar sistemas de misiles estadounidenses en Israel”.
El presidente estadounidense, Joe Biden , celebró el asesinato de Sinwar y lo calificó de “un buen día para Israel, para Estados Unidos y para el mundo”.
En una declaración, Biden dijo que había “ordenado al personal de Operaciones Especiales y a nuestros profesionales de inteligencia que trabajaran codo a codo con sus homólogos israelíes para ayudar a localizar y rastrear a Sinwar y otros líderes de Hamás que se esconden en Gaza”.
Agregó que, con la ayuda de la inteligencia estadounidense, el ejército israelí “persiguió implacablemente a los líderes de Hamás, sacándolos de sus escondites y obligándolos a huir”.
Decenas de civiles han muerto en ataques que, según Israel, tenían como objetivo a altos cargos de Hamás.
En julio, alrededor de 90 palestinos murieron en un ataque aéreo israelí supuestamente dirigido contra Muhammad Deif, el oscuro jefe del ala armada del grupo, en al-Mawasi, una zona del suroeste de Gaza que Israel declaró unilateralmente como zona humanitaria.
¿Día siguiente?
Biden afirmó que con el asesinato de Sinwar, “ahora existe la oportunidad de un ‘día después’ en Gaza sin Hamás en el poder”.
Kamala Harris, vicepresidenta estadounidense y candidata presidencial del Partido Demócrata, se hizo eco de la declaración de Biden. Tanto el presidente como la vicepresidenta acusaron falsamente a Hamás de perpetrar violencia sexual masiva el 7 de octubre y borraron el contexto de colonización en el que se produjo la operación al decir que fue el peor ataque contra el pueblo judío desde el Holocausto.
Ninguno de ellos ha reconocido que Israel mató a cientos de sus propios ciudadanos el 7 de octubre de 2023.
Harris dijo que “este momento nos da la oportunidad de poner fin finalmente a la guerra en Gaza, y debe terminar de tal manera que Israel esté seguro, los rehenes sean liberados, el sufrimiento en Gaza termine y el pueblo palestino pueda hacer realidad su derecho a la dignidad, la seguridad, la libertad y la autodeterminación”.
Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, reconoció implícitamente que no se eliminaría a Hamás como organización. Culpando a Hamás por el sufrimiento del pueblo palestino durante el año pasado, Miller declaró que Washington esperaba que el sucesor de Sinwar “siguiera un camino diferente”.
Pero Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí, dejó claro que la guerra continuaría y dijo que el asesinato de Sinwar marcaba “el comienzo del día después de Hamas”.
“Hoy, como prometimos, saldamos cuentas con él. Hoy, el mal sufrió un duro golpe, pero nuestra misión aún no ha concluido”, dijo Netanyahu en un comunicado en video.
Dirigiéndose a las familias de los israelíes que siguen detenidos en Gaza, Netanyahu añadió que “este es un momento importante en la guerra. Continuaremos con toda nuestra fuerza hasta que todos sus seres queridos, nuestros seres queridos, estén en casa”.
Pero algunas familias de los cautivos retenidos en Gaza dijeron que temen que el asesinato de Sinwar ponga en mayor peligro la vida de sus seres queridos. Orna y Ronen Neutra, padres de un cautivo con ciudadanía israelí y estadounidense, pidieron a ambos gobiernos que “actúen con rapidez y hagan lo que sea necesario para llegar a un acuerdo con los captores”.
Benny Gantz, líder de la oposición israelí y ex miembro del gabinete de guerra de Netanyahu, felicitó a los soldados que mataron a Sinwar y dijo que el ejército “continuará operando en la Franja de Gaza durante los próximos años”.
Estatus legendario
Los propagandistas israelíes pueden haber pensado que publicar fotos y vídeos de los últimos momentos de Sinwar y de su cuerpo sin vida infundiría sentimientos de derrota y humillación entre los partidarios de la resistencia palestina.
Las imágenes, en cambio, han tenido el efecto contrario y no han hecho más que afianzar su ya legendaria condición. Muestran que Sinwar murió en combate como un simple combatiente (quizá en un enfrentamiento que no fue su primer enfrentamiento directo con las tropas israelíes) en lugar de aceptar el exilio o morir en retirada.
Suheib Alassa, corresponsal de Al Jazeera, dijo que “la inteligencia israelí y la aviación estadounidense y británica no lograron encontrar un hilo que los condujera a Sinwar, de quien ni siquiera los expertos más inteligentes en guerra e inteligencia esperaban que estuviera luchando directamente en la batalla”.
El hecho de que Sinwar estuviera en el frente significaba que los combatientes de Hamás estaban organizados y operaban según “planes precisos, independientemente del nombre o la ubicación del comandante”, según Alassa.
El analista militar Elijah J. Magnier dijo que la “decisión de Sinwar de permanecer al frente del conflicto destacó su voluntad de compartir los mismos riesgos y sacrificios que los civiles y combatientes de Gaza, reforzando la idea de que los líderes de Hamás no abandonarían a su pueblo en tiempos difíciles”.
Magnier agregó que la naturaleza de la muerte de Sinwar “comunica al pueblo de Gaza que sus comandantes están tan comprometidos como ellos y que ellos también están preparados para enfrentar el máximo sacrificio”.
Sinwar nació en el campo de refugiados de Khan Younis, en Gaza, en 1962; su familia era originaria de Majdal, rebautizada Ashkelon tras su conquista por las fuerzas sionistas en 1948.
Al igual que otros líderes de la resistencia que fueron asesinados antes que él, Sinwar dijo que el martirio era el mayor regalo que la ocupación podía darle:
Hace unos 20 años, el jeque Ahmed Yassin, uno de los fundadores de Hamás, dijo que no se dejó intimidar por las amenazas de asesinato israelíes, diciendo que “si viera venir el cohete, saltaría y lo abrazaría”, añadiendo que “si matan a Ahmed Yassin, otros 100 Ahmed Yassin crecerán”.
“No tenemos miedo de sus amenazas, y cuando nos matan es el día más feliz de nuestras vidas”, dijo Yassin, apenas unos meses antes de ser asesinado en un ataque con misiles en la ciudad de Gaza en 2004.
Sinwar fue asistente personal de Yassin y pasó casi un cuarto de siglo en una prisión israelí, tiempo durante el cual aprendió hebreo y se dedicó a estudiar la política y la sociedad israelíes, al tiempo que producía varios libros y traducciones relacionados con Israel y la estrategia política palestina.
En 2021, en su última entrevista (la única entrevista personal que dio a un medio en inglés), Sinwar dijo que, con su armamento de última generación, Israel “bombardea y mata intencionalmente a nuestros niños y mujeres”.
“No se puede comparar eso con aquellos que resisten y se defienden con armas que parecen primitivas en comparación”, dijo.
La resistencia defenderá a su pueblo con todos los medios que tenga, según Sinwar.
“¿Qué se supone que debemos hacer? ¿Deberíamos izar la bandera blanca?”, preguntó retóricamente.
“Eso no va a suceder”, dijo, y cumplió su promesa.
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