Libro en PDF 10 MITOS identidad mexicana (PROFECIA POSCOVID)

Libro en PDF 10 MITOS identidad mexicana (PROFECIA POSCOVID)

  Interesados comunicarse a correo: erubielcamacho43@yahoo.com.mx  si quieren versión impresa o electrónica donativo voluntario .

martes, 4 de junio de 2013

Crítica al sufismo

Crítica al sufismo


El Islam sin eso que llamamos sufismo sería como una fruta sin pulpa


04/06/2013 - Autor: Yahia Said Al Andalusi El Maliki - Fuente: Webislam



  • 0me gusta o estoy de acuerdo
  • Compartir en meneame
  • Compartir en facebook
  • Descargar PDF
  • Imprimir
  • Envia a un amigo
  • Estadisticas de la publicación



sufíes persas

El vocablo “sufismo” es hoy objeto de diversas interpretaciones, malinterpretaciones y críticas.

En época del Profeta –saws- no era necesaria ninguna palabra para referirse en general a lo que hoy denominamos “sufismo” o “tassawf”, sin embargo, en cuanto comenzaron a conformarse en su definición actual las ciencias del Islam, y aparecieron las interpretaciones divergentes, se hizo necesario denominar el aspecto profundo de la devoción con algún nombre, para Ahl suna wal yama´ah este nombre es “sufismo”.

El Sheikh Huizwili, dijo que de aquel sufismo del que se puede hablar, no es sufismo.

Esto parece quedar corroborado por la proliferación de grupos que denominándose “sufíes” han introducido prácticas y conceptos que no pertenecen a la revelación, o que perteneciendo a ésta, son, para estos grupos, objeto de una interpretación unilateral, que no necesariamente ha de ser correcta.

En realidad, nadie que pretenda saber qué es el sufismo sin acercarse al tema desprovisto de prejuicios y con un sincero deseo de penetrar en este conocimiento, puede saber qué es el sufismo. A su vez, en épocas recientes, el rechazo de algunos grupos modernos a los grupos de pseudosufíes, se generalizó en un rechazo al concepto de “sufismo” en su totalidad, sin embargo, no es posible la existencia del Islam sin algo, a lo que aquí, aun con las aristas polémicas que ha tomado el término, denominaremos sin dudar sufismo.

El sufismo es otorgar a cada cosa su realidad. Es evidente que el Islam no es un conjunto de ritos por la realización de los cuales se nos premia o castiga, sino que es un din, una forma integral de vivir, el salat y el ayuno, y cada rito, nos recuerdan constantemente que no hay fuerza ni poder sino en Allah swt, la práctica del sufismo, no es otra cosa que la búsqueda de un estado espiritual tal que el practicante recuerde permanentemente a Allah swt y se ajuste en cada asunto de su vida a lo que indico hacer o dejar de hacer el Mensajero de Dios –saws-.

El pseudo-sufismo, desgraciadamente muy extendido hoy, es sólo otra de las múltiples facetas de la hipocresía. Es evidente, que en líneas generales, no es necesario nada más que lo que enseñó el Profeta –saws- para recordar a Allah swt en cada momento, por esto, aún quienes rechazan el término “sufismo”, practican una forma de sufismo si se tratan de verdaderos musulmanes, al practicar aquello que el Profeta –saws- enseñó para recordar a Allah swt, de esto no puede quedar duda, le pese a quien le pese.

Las dos preguntas usuales de los jóvenes, al abrazar el Islam son referidas a la ausencia del término “sufismo” en época del Profeta saws y a las prácticas de los grupos pseudosufíes, en cuanto al vocablo, en época del Profeta –saws- cuando era Él directamente quien enseñaba el Islam en todos sus aspectos, sufismo incluido por supuesto, no había necesidad alguna de utilizar un término particular para referirse al aspecto interno, de recuerdo permanente de Allah y acción en consecuencia, por esto no encontramos el término “sufismo” sino hasta la época de los tabiún, cuando el Imam Malik ibn Anas dijo: “quien estudie sufismo sin estudiar fiqh, será un hereje, pero quien estudie fiqh sin estudiar sufismo será un corrupto”; en cuanto al segundo asunto, las prácticas de los pseudosufíes, encontramos prácticas análogas en muchos grupos de musulmanes que no se reconocen como sufíes, se trata simplemente de exageración, y no cabe agregar mucho más sobre esto, es claro, cualquiera, incluso un sabio piadoso puede caer en la exageración censurable.

Se narra que en cierta ocasión Hassan Ash Shadzilí, fundador de la tarika shadhilí, una de las cofradías sufíes más ortodoxas de Ahl suna, salía de una caverna donde había pasado días retirado, orando y ayunando, una mujer común que pasaba lo vio y dijo “pobre hombre, con toda su sabiduría y espera obtener algo más agregando a lo que Allah ha prescrito” entonces Ash Shadhilí comprendió, y en adelante enseñó, el ceñimiento estricto a las prácticas del Profeta –saws- sin añadiduras ni omisiones.

El sufismo no es entonces, otra cosa que un nombre para designar toda la sustancia del Islam, toda comprensión íntima del significado de la sumisión absoluta a Allah swt y por cierto que para esto no debería ser necesario otro vocablo además de “Islam”, pero ya vemos que hoy “Islam” resulta insuficiente para designarlo genéricamente todo; de manera similar, ya hemos debido hablar de “sufismo” y “pseudosufismo”. El pseudosufismo hoy ha eclipsado las prácticas mucho menos vistosas de aquellos que se ajustan a las prácticas tales como la oración, la meditación, el ayuno, la reflexión sobre el contenido de la revelación y el recuerdo permanente de Allah swt, que son las genuinas prácticas sufíes.

El sentido interno de la revelación (batin) es inseparable del externo (tanzil) por lo cual es igualmente errado hacer uno excluyente del otro.

La exageración en la consideración del sentido batin como algo oculto, misterioso y a veces inaccesible, ha llevado a una desvirtuación del sufismo y a una lógica reacción “anti-sufi” de parte de ciertas personas, incluso de algunos ulama, que consideraron que el poner acento en los contenidos batin de las ayat, aleja al Islam de su correcta comprensión.1

Por último, es necesario dejar muy en claro que nadie puede acceder a un conocimiento profundo del Islam, digamos conocer el sufismo, sino es por un sincero interés desprovisto de las imaginerías que se han creado en torno al pseudosufismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario