La perfección del din ante la postmodernidad

La perfección del din ante la postmodernidad La perfección del Islam ante la crisis de valores postmoderna 05/09/2012 - Autor: Iahia ibn Said Al Andalusi - Fuente: Webislam espiritualidad fiqh islam nuevo paradigma politica sunna 2 Reflexiones sobre Islam, democracia y libertadesEn esta época, en esta coyuntura histórica actual, se articula la edad “contemporánea”, -aún no sabemos con que nombre figurará luego en los libros de historia-, que se considera generalmente iniciada en 1750 o 1789 DC, según se tome como hito la primer revolución industrial o la revolución francesa, con un nuevo período histórico, tal vez luego se tome la llegada del hombre a la luna en 1969, o la revolución informática como el hecho que marcó la diferencia. Lo interesante es que, así como el hombre del período medieval estaba imbuido de valores que no son los de la modernidad, sino los de su época, este nuevo período al que usualmente se hace referencia -de nuevo- como “modernidad”, a cuyo inicio asistimos hoy, es hijo de la edad precedente, es la época del imperialismo moderno, que tuvo en Gran Bretaña y luego en EE UU, sus grandes imperios, la del uso de la propaganda y el metadiscurso como método de gobierno, es decir el recurso del poder a engañar a las masas sistemáticamente, y ya nos referíamos a esto en nuestros escritos sobre violencia simbólica y habitus, y dentro de todo un mundo convulsionado, el Islam se expande, al tiempo que el poder financiero lo ve como una peligrosa fuerza evidentemente capaz de plantarse ante el “Mundo moderno”, y dar al ser humano la dignidad de poder decir “tengo valores”. Tal es así que el Islam ya desde el siglo XVIII comenzó a estar bajo la lupa de los titiriteros del mercado; no es casual que la aparición de la teología deobandi en India sea contemporánea de la prédica de Mohammad ibn Abdul Wahab en Arabia, no es curioso que en ambos espacios se encontraran los británicos y sus intereses, no es casual que estas dos innovaciones, deobandismo y wahabismo, fueran creadas para destruir el Islam privándolo de contenido y convirtiéndolo en un ritualismo amoral, con tendencia al puritanismo de estilo anglosajón, algo así, como decía Giovanni Pappini, “rigorista en la forma e indulgente en la sustancia”; nada de casual hay en esto, ni en que muchos simplones puedan ser hoy en día seducidos por el engaño y la innovación deobandi – en la que incluimos el wahabismo-. Tampoco es casual que estos movimientos innovadores, provocasen el recrudecimiento de la pugna suni-shi´a y que dentro de la propia shi´a se endureciera la posición entre muchos, ahondando aún más la diferencia entre los dos grupos mayores de musulmanes. Pero el Islam no es evidentemente una forma sin contenidos, basta razonar sobre las aleyas del Corán y las palabras de la sunna, buscar las interpretaciones ortodoxas y conocer lo que dijeron los verdaderos sabios, para rechazar de plano la innovación deobandi-wahabi. Una investigación más meticulosa (no mucho), nos demostrará el origen británico de estas sectas. Sin embargo, el verdadero Islam, el Islam del Profeta saws, y de los primeros creyentes, está muy muy lejos de ser este indulgente ritualismo que plantea el Islam afectado de modernidad, es el Islam verdadero, una completa forma de vivir, pensar y sentir, que reconoce cada aspecto de la condición humana y dá, proveniente de Allah swt, la solución a cada problema humano. Esto es simple, analicemos el Milagro del Corán, hagamos un experimento, y pongamos de un lado la solución que dá el Islam a cualquier problema humano, y por seguro que nadie podrá inventar una solución mejor. Ya que las soluciones presentadas por Saidina Mohammad saws, son las reveladas por Allah swt, y no hay forma de mejorar lo que Allah swt ha establecido. En el asunto de los innovadores, que han sido seducidos en su ignorancia por las sectas “made in England”, deobandi y wahabi, son, obviamente, musulmanes, nunca se debe afirmar lo contrario, aunque ellos acusen de incrédulo al musulmán sunita ortodoxo, el takfir, el declarar apóstata a alguien es un acto de shirk, ya que solo Allah swt conoce lo que hay en los corazones y solo Él swt puede saber quien cree y quien no; por ende, pretender determinar quién es un creyente, es pretender erigirse en una especie de diosecillo, pretender usurpar un derecho de Allah swt; este no es el camino de Ahl as Suna sino de estos grupejos modernos, estas innovaciones que, gracias a Allah swt, no constituyen hoy, más que el uno por cien de los musulmanes.