Carta 8 sobre la Vía Espiritual: Al-Rasa’il Shayj Al-‘Arabi al-Darqawi
“Ocupaos de lo que mata vuestra alma -nafs- y vivifica vuestro corazón”
23/06/2016 - Autor: Mulay al-Darqawi
Ocupaos de lo que mata vuestra alma -nafs- y vivifica vuestro corazón. La raíz del bien se encuentra en la liberación del corazón del amor de este mundo, así como la raíz del mal se encuentra en llenar el corazón con el amor de este mundo. Escribí a uno de los hermanos: "La causa de la desviación del bien está en el amor de este mundo. Aquel que se vuelve hacia el mundo con su corazón y con sus miembros, ese se aparta de Dios con su corazón y con sus miembros. Y aquel que se aparta de Dios con su corazón y con sus miembros, ese está culpablemente extraviado y es un pecador. Si la fe no hubiese sido firme en su corazón, le habríamos valorado como incrédulo". Ocupaos de lo que mata vuestra alma y vivifica vuestro corazón, como te decimos, puesto que no hay para nosotros ninguna vía para alcanzar la presencia de nuestro Señor excepto la muerte de nuestras almas -nafs-, no importa lo que hagamos. El Shayj Abû Madyan decía: "Quien no muere, no ve a Dios".
Uno de los hermanos se quejó de alguien que se comportaba injustamente y con hostilidad contra él. Nosotros le dijimos: "Si quieres dar muerte al que te oprime, mata entonces a tu propia alma. Si la matas, matarás a todos los opresores de un solo golpe".
Luego dijimos a otro hermano: "La decepción consiste en que la imagen de tu alma aparezca ante ti, y tú no vacíes su morada y no hagas desaparecer sus huellas. Eso quiere decir hacerla soportar lo que es pesado para ella hasta que muera, puesto que la vida del corazón depende de la muerte del alma, como lo ha dicho uno de los Shayjs: "La vida del corazón está en la muerte del alma". Otro ha dicho: "El amor es una joven desposada, y el alma es su dote. Los corazones sólo tienen vida tras la muerte del alma". Hay muchas palabras a este respecto.
Luego dijimos a otro hermano: "La decepción consiste en que la imagen de tu alma aparezca ante ti, y tú no vacíes su morada y no hagas desaparecer sus huellas. Eso quiere decir hacerla soportar lo que es pesado para ella hasta que muera, puesto que la vida del corazón depende de la muerte del alma, como lo ha dicho uno de los Shayjs: "La vida del corazón está en la muerte del alma". Otro ha dicho: "El amor es una joven desposada, y el alma es su dote. Los corazones sólo tienen vida tras la muerte del alma". Hay muchas palabras a este respecto.
Cuando uno de ellos nos dijo que había golpeado a un judío por vanidad, injusticia y despotismo, nosotros le dijimos: "No golpees ni a judío ni a cristiano ni a nadie. Si tienes que golpear a alguien, golpea entonces a tu alma, y permanece golpeándola hasta que muera. No dejes ni rastro de ella". Esto es lo que yo amo al respecto de nuestros hermanos. Porque todos los vicios se encuentran en el Faqir que tiene su alma viva. En cuanto al faqir cuya alma está muerta, está a salvo de los vicios y contempla los mundos ocultos. Es el señor de todas las gentes a pesar de ellos. Dios, exaltado sea, se ha dado a él.
Os aconsejamos insistentemente que os mantengáis permanentemente en estado de limpieza, en un estado de indigencia, y de contentamiento. En verdad, nadie está en un estado de indigencia a menos que haya matado a su alma y reconocido a su Señor. El que no lo ha hecho no es indigente. La concentración en Dios permite a uno unirse a Él, mientras que la concentración en otro que Dios, lleva a uno a otro que Dios. ¡Nos refugiamos en Dios de que haya con Él otro que Él! "Dios era y nada era con Él. Él es ahora tal como era".
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