Velasco deja en llamas a Chiapas
25 de Noviembre del 2018
Ayer chocaron dos distintos mundos en Chiapas, el de telenovela en que vive el gobernador Manuel Velasco, y el mundo real que padecen más de cinco millones de chiapanecos, con pocas oportunidades, escasos servicios y violencia.
Mientras Manuel Velasco Coello, daba su sexto Informe de gobierno, destacando los avances que su gestión dejará en materia de turismo, seguridad y protección civil, y que casi casi convertirían a Chiapas en la Suiza del sureste mexicano, afuera en la explanada del congreso local, trabajadores y desplazados del estado se manifestaban en contra de su trabajo.
Médicos y enfermeras de la Sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salubridad, exigían el pago de bonos que se les adeuda desde hace dos años.
Mientras que indígenas desplazados de Chenalhó, Zinacantán y Ocosingo, intentaron establecer un plantón en el parque central de Tuxtla Gutiérrez, que fue impedido por la policía estatal.
Estos grupos indígenas demandan el retorno seguro a sus poblaciones, reparación de daños de casas afectadas, restitución de tierras para el cultivo y castigo a presuntos grupos paramilitares causantes del desplazamiento.
Estas dos manifestaciones provocaron una respuesta violenta de los cuerpos policiales estatales, quienes lanzaron gases lacrimógenos para dispersarlos, sin importar que entre los manifestantes hubiera niños, mujeres y estudiantes.
Las buenas noticias para Manuel Velasco es que el siguiente capítulo de su mundo de telenovela continuará en el Senado de la República, la mala noticia para el pueblo de Chiapas es que luego de seis años de gestión de Velasco, su situación empeoró.
Gustavo Ramírez
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