EEUU prepara ciberataque de ‘nariz ensangrentada’ contra Pyongyang
Conforme a fuentes de Inteligencia de EE.UU., Washington está elaborando planes para realizar ataques cibernéticos contra Corea del Norte en un esfuerzo por presionar a Pyongyang, mientras este último dice estar listo para ‘el diálogo y la guerra’ y los Juegos Olímpicos de Invierno llegan a su fin.
Los posibles planes de Estados Unidos para una serie de ataques de “nariz ensangrentada” contra objetivos en Corea del Norte podrían centrarse en la guerra digital en lugar de en la guerra convencional, según han sugerido las fuentes, citadas este martes por el diario británico The Telegraph.
De acuerdo con el rotativo, un ataque cibernético podría paralizar las comunicaciones en línea de Pyongyang y la capacidad de controlar su Ejército, causando grandes estragos, pero evitando la pérdida de vidas.
Asimismo, precisa que este tipo de ataques puede mitigar las preocupaciones sobre un ataque convencional contra sitios de misiles o instalaciones nucleares por parte de EE.UU., que podría desencadenar un contraataque masivo por parte del líder norcoreano, Kim Jong-un.
Además de recopilar información sobre desarrollos militares, científicos y políticos en Corea del Norte, los expertos en guerras cibernéticas de EE.UU. probablemente tendrán la tarea de acceder a la estructura de comando y control de Pyongyang para impedir las comunicaciones de este con sus Fuerzas Armadas y lanzar contraataques, añade The Telegraph.
La noticia sobre los planes de llevar a cabo un ataque cibernético se hace pública mientras Corea del Norte recientemente ha recordado a la comunidad internacional que está preparada tanto para el diálogo como para la guerra, y los Juegos Olímpicos (JJ.OO.) de Invierno en Pyeongchang (Corea del Sur) están llegando a su fin.
El domingo, Corea del Norte advirtió a EE.UU. de que enfrentará “consecuencias inimaginablemente trágicas” si lleva a la práctica su estrategia militar, conocida como “nariz ensangrentada”, contra Pyongyang, la cual fue propuesta por la Administración del presidente estadounidense, Donald Trump.
Un informe, publicado el 9 de enero en el diario estadounidense The Wall Street Journal, anunció que la Administración Trump estudiaba la posibilidad de lanzar un ataque limitado contra Corea del Norte a fin de “hacerle sangrar la nariz” a Pyongyang en respuesta a cualquier prueba nuclear o balística de este país asiático.
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