Sobre Siria y la guerra al ISIS, Irán, gringolandia y Turquía se han contado todo tipo de historias: los foreign fighters de todo el mundo, los ejércitos ilegales, el uso de armas químicas, los ataques suicidas, los curdos, los sirios, los rusos.
Pero poco se ha hablado en detalle de algunos combatientes, muy mediáticos, que seguramente impactaron en estos ya 7 años de combate en la región.
Los batallones de mujeres que luchan contra el ISIS se transformaron en una reivindicación del mundo femenino al de los torpes machitos religiosos y fanáticos. En específico existe un batallón compuesto solo por mujeres, un cuerpo de elite llamado “The Women’s Protection Units”.
Esta Unidad es particularmente temida por los milicianos del Estado Islámico, porque es ahí donde militan las mejores francotriadoras de la guerra, y son mujeres. Para un miliciano de ISIS o de las otras milicias terroristas, caer en combate por mano de una mujer no significa el paraíso asegurado, sino lo contrario, un infierno de estupidez.
Asia Ramazan es la francotiradora más famosa entre los militares curdos y del EI. Ella, hermosa con sus 19 años, antes de morir en combate mató a 9 altos oficiales del ISIS y más de 20 combatientes. Se transformó en un símbolo de la lucha, no solo de la guerra.
Asia murió mientras intentaba detener un camión con tres suicidas del ISIS, pero mandó al infierno a más de 25 extremistas.