NO SE DEBE A GÉRMENES: DR. ANDREW MOULDEN
“TODAS LAS VACUNAS PRODUCEN DAÑOS”
JUAN CASTRO SOTO
a suman 16 las muertes por me-
ningitis en hospitales de Durango,
se informó el 27 de noviembre.
Se tienen diagnosticados 66 casos
con la enfermedad, 80 casos sospe-
chosos y se estima que los afectados
podrían llegar a 300 en aquel estado.
La meningitis es la inflamación de
las membranas (meninges) que recu-
bren el cerebro y la médula espinal.
En México, el grupo más afectado
son los niños menores de 5 años.
Los médicos explican los hechos
con la narrativa oficial: una infección
causada por hongo, nos dicen.
Mas la causa no son los gérmenes,
como hongos, bacterias o virus, sino
las vacunas recibidas, explicaba el
doctor canadiense Andrew Moulden,
antes de morir misteriosamente en
2013, al develar los fraudes de la me-
dicina que han matado a millones de
personas en todo el mundo ‒lo que
puede consultarse en su libro “Every
vaccine produces harm”, p. 41.
“El daño a la salud humana que se
produce por las vacunas y las toxinas
ambientales interfiere con el flujo san-
guíneo normal y desencadena reac-
ciones extremas del sistema inmunita-
rio. El resultado es la privación de oxí-
geno a nivel microvascular (capilar) ‒
los capilares son los más pequeños
conductos de sangre en el cuerpo.
“Se estima que el cuerpo humano
tiene 600,000 millas de capilares.
“Cuando se detiene el flujo de san-
gre y el oxígeno ya no está disponible
para las células en ciertas áreas sen-
sibles, se dañan las células y el fun-
cionamiento normal del cuerpo.
Cuando esto sucede en el cerebro
y el sistema digestivo, el autismo y otras en-
fermedades del neurodesarrollo pueden
prosperar. Esencialmente, las vacunas,
ciertas toxinas ambientales y la pobre nu-
trición pueden crear condiciones para pe-
queños ataques cerebrovasculares”.
Moulden explica que los tóxicos intro-
ducidos con las vacunas generan una
fuerte respuesta inmunológica en el
cuerpo que produce isquemia, esto es, el
agolpamiento de los glóbulos blancos y la
obstrucción de la circulación sanguínea.
Luego, este estancamiento coloidal de la san-
gre provoca coagulación, lo que da lugar a la trombo-
sis; esto produce anoxia o falta de oxígeno y el sín-
toma de la meningitis, lo mismo que convulsiones ‒y
fiebre, en un intento del cuerpo por dilatar los capilares
para facilitar el flujo sanguíneo.
Pero no se habla de trombosis, pues, cabe señalar,
ha sido una de las causas más comunes de muerte
debido a las vacunas de Covid, tanto que diversos paí-
ses debieron suspender la vacunación.
Sobre este tema, también puede consultarse, en español, la investiga-
ción en chile de Andrea Santander, “Marca Roja”, pp. 37, 42-47
Pero en México, como en la mayoría de los países, nunca se aceptará
que se está matando a la gente con el programa de vacunación. Ni se
aceptará que los muertos por meningitis en los hospitales de Durango son
a causa de las vacunas. Se culpa a las anestesias infectadas por hongos,
y se nos dice que no encuentran ‒ni encontrarán‒ cómo un hongo que se
da en las plantas pudo llegar ahí y luego al cerebro.
Para acabar pronto, el subsecretario de Salud, López-Gatell, afirma que
“llevará tiempo” saber las causas ‒¿que no quieren saber?
Las autoridades de salud se han comunicado con otras instituciones en
Estados Unidos y Reino Unido ‒las im-
pulsoras de la llamada “junk medicine”
(medicina chatarra)‒, las cuales les han
orientado para que se tomen las medi-
das adecuadas y, no obstante ‒o por
ello‒, las muertes continúan.
Tal parece que la meningitis es otra
manera de tapar las muertes causadas
por las vacunas.
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