Nueva filología islámica

construyendo un Nuevo Al Andalus

19/07/2012 - Autor: Iahia ibn Said Al Andalusi - Fuente: Webislam

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Reflexiones sobre Islam, democracia y libertades

La filología no trata de las convenciones del lenguaje tales como la ortografía, la gramática, etc. Aunque en algún punto se nutre de estas. Nos atendremos a la definición de F. Nietzche “la filología es el estudio del lenguaje como medio de expresión del espíritu”¹; no interesa pues al filólogo cultivar ningún idioma en particular, más bien interesa observar el fenómeno lingüístico desde el ángulo de la fenomenología, es decir, observar como la palabra articulada, en el idioma que sea, manifiesta una idea un concepto abstracto hasta ser objetivado por medio del lenguaje.

Sin embargo, evidentemente, para comodidad en estas labores y para reducir, si es esto posible, el grado de subjetividad en la objetivación lingüística del concepto.
La subjetividad opera, lógicamente en el emisor como en el receptor, se dice lo que se entiende y se entiende lo que se puede o quiere.

No es curioso que las personas que aprenden un lenguaje complejo, por caso el español, confundan el verdadero significado de palabras y expresiones con su definición en los diccionarios, al menos hasta adquirir un total conocimiento del idioma, que en tanto es amplio, no es infinito y por ende puede ser aprehendido en su totalidad, y en este caso haremos abstracción de las diferentes acepciones del mismo término en diferentes ámbitos geográficos.

Como vemos, indudablemente el campo de estudio de la filología es enorme, complejo y pantanoso.En el caso del Islam, encontramos dos asuntos de radical importancia, el primero es la creencia populachera de que es un deber del musulmán dominar el árabe clásico, en segundo lugar, la casi prohibición de estudiar y hacer filosofía, y por ende filología, que es filosofía del lenguaje, que impulsan las sectas modernistas.

Por supuesto, el primer escollo, carece de relevancia, en todo caso, la propia filología puede demostrar que cada concepto se objetiviza en un idioma pero es independiente de él.
El segundo asunto, bien podemos pasarlo por alto y dejar que muchas universidades islámicas hoy desatiendan el trabajo del topo filólogo, que en todo caso, aún contando con el apoyo de una institución universitaria, no deja nunca de ser un tipo muy raro de persona.

1-F. Nietzche “El origen de la tragedia en el espíritu de la música”