..Sicilia responde a críticas de subcomandante Marcos
Por Agencia el Universal | El Universal – Hace 5 horas....tweet0Correo electrónicoImprimir......MÉXICO, D.F., agosto 29 (EL UNIVERSAL).- El poeta Javier Sicilia justificó al subcomandante Marcos el por qué el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad que encabeza dedica sus esfuerzos a la interlocución con una clase política a la que el líder de la guerrilla zapatista llama “una pandilla de facinerosos”.
Marcos y Luis Villoro han mantenido un intercambio epistolar de manera pública en varias ocasiones. El pasado jueves el subcomandante decía no entender por qué el movimiento depositaba sus energías en este diálogo con el gobierno y cuestionaba sus métodos.
“Se pueden cuestionar las formas y los métodos, pero no las causas (…) Nosotros pensábamos que tal vez era posible que se levantara un movimiento que detuviera esta guerra absurda. No parece que así sea (o no todavía)”, señaló el subcomandante.
Sicilia dio a conocer su respuesta a Marcos al decir que la paz se construye incluso con los adversarios: “La paz, querido Subcomandante, es, como decía Gandhi, “el camino”, un camino que sólo se hace con todas y todos”.
Le recordó que hace 17 anos, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional al lado de la sociedad civil, enseñó no sólo al visibilizar y dignificar el pasado negado y humillado de nuestra tradición indígena, sino también cuando, a partir de la escucha y del dialogo, abrieron el debate de lo que, en medio de la crisis de las instituciones, podría ser una nueva esperanza de reconstrucción de la nación: las autonomías.
“México, querido Subcomandante, es un cuerpo desgarrado, un suelo fracturado, que hay que recomponer como un cuerpo y una tierra sanas en las que -como todo cuerpo y toda verdadera tierra- cada una de sus partes, cuando se armonizan y se cultivan en el bien, son tan necesarias como importantes”, dijo.
Agradece las líneas que le dedica al Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad en su tercera carta a Don Luis Villoro.
“Caminar, dialogar, abrazar y besar –esas cuatro maneras que encontramos en nuestra historia hecha del mundo indígena y del mundo occidental— son las formas que asumimos no solo para acompañar a otros y a otras, sino para encontrar el camino perdido y hacer la paz.
Caminar, es ir al encuentro de los otros; dialogar es desnudar, estremecerse, iluminar la verdad –que al principio escuece, pero después consuela-; abrasarse y besarse es no sólo hacer la paz, sino también romper las diferencias que nos dividen y enfrentan”, dijo Sicilia en su respuesta.
“Como usted dijo bien al referirse al Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad –una frase que también empleo hace años en relación con el zapatismo-: Podrán cuestionar los métodos, pero no las causas. Es por ellas, por esas causas, que detener la guerra es tarea de todos y de todas”, agregó.
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