El Estado Islámico lanza sus redes de captación sobre las mujeres
Los Mossos d'Esquadra siguen de cerca a todos los retornados detectados por los servicios de inteligencia europeos
Durante el 2016 se han detectado 40 referencias a 'Al-Andalus' en mensajes de propaganda yihadista
SÁBADO, 25 DE MARZO DEL 2017 - 15:57 CET
La Comisaría General de Información de los Mossos d’Esquadra ha detectado en Catalunya que las redes de captación del Estado Islámico se interesan cada vez más por las mujeres, según ha sabido EL PERIÓDICO. Este diario publicó hace pocos días los fragmentos de una conversación entre un captador y una catalana en la que este le decía literalmente: "Te metes en una reunión y empiezas a matar a saco". El pasado miércoles fueron arrestados en Roda de Ter (Osona) dos marroquís que habían reclutado a otras dos mujeres jóvenes con el mismo propósito. Dos ejemplos que ilustran la tendencia observada por la vigilancia antiyihadista de la policía catalana.
La capacidad que tiene el Estado Islámico de mutar su estrategia para atentar "no tiene ningún comparación" en el mundo, avisan fuentes de Información. Al Qaeda buscaba objetivos que requerían meses de planificación, como el perpetrado contra las Torres Gemelas de Nueva York. El Estado Islámico quiere atacar en Europa de cualquier manera para generar "eco en los medios de comunicación". Para eso están las redes de captación, para convencer a ciudadanos europeos -la mayoría con raíces islámicas- de que deben matar indiscriminadamente, de la forma más práctica, como ya han hecho en Niza, en Berlín o este último miércoles en Londres, en los que el 'arma' han sido camiones, o un todoterreno, para atropellar a una multitud de civiles. Con ese fin, ahora quieren reclutar a las mujeres.
"OLVIDAOS DEL VELO"
"Nos pone más nerviosos un musulmán con barba que repentinamente se afeita que 50 mujeres con velo", explica un agente del Área Central de Información. Lo segundo no dice nada. Lo primero indica que algo está cambiando en su conducta. "Olvidaos del velo", aconseja. Lo primero que hará una mujer que se haya radicalizado será "quitárselo". La ‘takiyya’, traducible como 'estrategia de disimulación', permite a los yihadistas que se disponen a atentar hacer cosas prohibidas como consumir alcohol o, en el caso de las mujeres, quitarse el velo. Este concepto no se incluye en el Corán y se considera una "herejía" dentro del mundo islámico, subrayaba hace algunos meses José María Gil Garre, experto del International Security Observatory (ISO), en una conferencia recogida por Europa Press. Aun así, los yihadistas aplican la 'takiyya'.
LA TRAMPA SENTIMENTAL
En Catalunya se ha observado que los captadores buscan mujeres que tengan un pasado musulmán y se esfuerzan en reactivarlo, para explotar el concepto de lo que ellos llaman "retornados a la fe", detallan fuentes policiales.
David Garriga, analista en terrorismo yihadista, describía en una conferencia reciente organizada en Barcelona por EuroCop que una táctica recurrente de reclutamiento es convencer a los jóvenes desarraigados de que son "especiales". "No te he preguntado tu nombre, te he preguntado quién eres, y eres el elegido", recitaba parafraseando una técnica observada en conversaciones de captores. Joan Antón Mellón, catedrático de la Universitat de Barcelona (UB), explica que la "épica" del discurso del Estado Islámico logra enredarlos porque les ofrece la oportunidad "de trascender" y de "liderar una protesta".
Para las mujeres utilizan a menudo otra vía: el cortejo sentimental. Se fijan en "solteras y jóvenes" que no tengan "antecedentes" para que no aparezcan en el radar de la policía. Las "seducen" pero no quieren convertirlas en su pareja, tan solo en un instrumento para matar.
ANÁLISIS DEL RIESGO
Un atentado en Catalunya, y en el resto de Europa, es probable aunque no consta ninguna amenaza concreta. El Gabinete de Coordinación Antiterrorista se reúne semanalmente desde la matanza perpetrada contra la revista francesa 'Charlie Hebdo' para analizar la situación. Valoran la información de los servicios de inteligencia europeos, de las investigaciones de sus agentes sobre el terreno y, también, de las alarmas que saltan en internet.
Durante el 2016 se encontraron 40 referencias a "Al-Andalus" en mensajes difundidos por el aparato propagandístico del Estado Islámico. También detectaron la aparición de un icono como la Sagrada Família en un "fotomontaje" que proponía objetivos a yihadistas dispuestos a atentar. Los Mossos buscan en la dark web, en redes sociales como Facebook, Youtube o Twitter (estas compañías han acordado en el 2017 rastrear y eliminar contenidos con apología yihadista) y en publicaciones afines como ‘Inspire’, ‘Dabiq’ o ‘Rumiyah’. Esta última publicó un reportaje con instrucciones para llevar a cabo atropellamientos como el de Niza o Londres.
De todos los aspectos que se revisan para medir el riesgo de un ataque, pocos preocupan tanto como la presencia de 'retornados'.
MIEDO A LOS RETORNADOS
Los Foreign Terrorists Fighters (FTF) son ciudadanos que -aun siendo ajenos a las guerras de Siria o Irak- han viajado hasta allí para enrolarse con el Estado Islámico. Muchos han muerto allí. Pero otros han regresado a sus países de origen. Se tiene constancia de unos 2.000 'retornados', la mayoría a Bélgica y a Francia. Según el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), en España hay unos 200. Un buen puñado de estos están en Catalunya. Todos ellos están "bajo seguimiento policial", aunque "no detenidos" por "diversas razones", según ha podido saber este diario.
Los 'retornados' preocupan porque podrían haber regresado con instrucciones de "dormir" una temporada y después "atentar" en Catalunya. Inquietan también porque pueden ser un "polo de atracción" que facilite el reclutamiento de nuevos yihadistas, jóvenes que se dejen impresionar por la "aureola del guerrero".
El retroceso del Estado Islámico en la frontera con Turquía, en Siria o en Irak no significa que su amenaza tenga los días contados. Porque no solo no reduce el riesgo de ataques, en muchos sentidos, lo agrava. En setiembre del 2014 sus líderes dieron la orden de elegir 'Soft targets' (objetivos más asequibles) y atentar contra occidente de la forma que resulte posible. Una instrucción que, como están comprobando los Mossos, también envían a las mujeres.
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