En 12 años, criminales matan a 542 militares

JONATHAN BAUTISTA

Del 2006 y lo que va del 2018, en la lucha contra el narco y la delincuencia, han muerto 542 efectivos militares haciendo labores preventivas y de acción en todo el país, sin embargo, ninguna organización civil ni de derechos humanos, le da seguimiento a las prestaciones que deben recibir sus familias, como sí existen para los delincuentes. 

Así lo explica en entrevista en ContraRéplica, Juan Ibarrola, especialista en temas de Fuerzas Armadas; “nadie llora por los militares caídos y aunque la Sedena se hace cargo de las familias con pensiones, servicio médico y becas para la educación académica de sus hijos, ninguna organización que defiende víctimas se preocupa por los soldados muertos y sus deudos”.

Señaló que todo soldado que va a combatir delincuentes no recibe un bono por hacerlo, a diferencia de un criminal que cuando asesina a un militar recibe dinero extra. 

Agregó que aún cuando el uso de las Fuerzas Armadas es el único recurso con que cuenta el Estado para combatir la inseguridad, “desgasta la moral de los soldados el hecho de que una Comisión Nacional de los Derechos Humanos, o alguna ONG los juzgue antes de que una autoridad lo haga, como el caso del soldado de Palmarito, en Puebla que está detenido”.

Ibarrola, puntualizó que diferentes ideologías, especialmente de izquierda, han querido hacer del Ejército el enemigo porque tienen una idea distorsionada de lo que son las Fuerzas Armadas y no aceptan que su presencia en las calles realizando labores de seguridad es de total ayuda y apoyo a la sociedad.

La esposa de uno de los cuatro soldados que murieron en el enfrentamiento de mayo de 2017 en Palmarito Tochapan, Puebla, con huachicoleros relata que tres días antes de ese incidente, sin saber que sería la última vez que hablaría con su esposo, él se despidió de ella, le dijo que la amaba y que cuidara a sus hijas, después la besó y la abrazó.

“Tres días después, recibí la llamada que me cambió la vida: me informaban que mi esposo había muerto”.

En ninguna de sus publicaciones pide castigo a los responsables de la muerte de su esposo, sólo hace referencia a cómo continuar con su vida a pesar de su pérdida y cómo encuentra consuelo en sus hijas. 

Este caso cobró relevancia por la difusión de videos que los huachicoleros enviaron a los medios, se observan los momentos en que el personal militar es agredido y se priva de la vida a uno por un disparo en la espalda. Al ver a su compañero en el piso, uno de los efectivos también dispara al delincuente. Los militares que fallecieron en ese enfrentamiento son: Miguel Álvaro Vázquez, José Manuel Larumbe Rayón, Rolando Martínez Hernández y Máximo May Hernández.

A 17 meses de los hechos, el militar que disparó está procesado y por otro lado, la CNDH emitió la Recomendación No. 12VG/2018 para la Sedena por violaciones graves, pero no hay ningún delincuente detenido ni procesado por ese caso.