El historiador, naturalista, filósofo y científico novohispano José Antonio Alzate y Ramírez, considerado el iniciador de la divulgación científica en México, por producir y escribir los primeros periódicos sobre ciencias, artes y cultura, con los que pretendía instruir al público general y ayudar a posicionar a la Nueva España en el escenario intelectual del siglo XVIII, nació el 21 de noviembre de 1737, en Ozumba, Estado de México.
Creció en una familia acomodada española-criolla, emparentada con la erudita Sor Juana Inés de la Cruz, por lo cual pudo estudiar en el Colegio de San Ildefonso (1747) y en la Real y Pontificia Universidad de México, donde se recibió como Bachiller en Artes (1753) y en Teología (1756). Se ordenó en la Compañía de Jesús en 1758, y hacia 1767 fue presbítero al servicio del arzobispo Francisco de Lorenzana.
A lo largo de su vida, por encima de sus labores eclesiásticas, realizó investigaciones científicas en varios campos. En geografía y física, exámenes sobre los ríos y lagos, climas, volcanes y terremotos en territorio novohispano, mapas de Nueva España y de América Septentrional, y estudios del movimiento de Venus, Mercurio, Júpiter y la Luna. En biología y medicina, hizo observaciones de flora y fauna silvestre nativa, de enfermedades y epidemias originarias e introducidas, e investigaciones de remedios, medicamentos y procedimientos.
Con respecto a la etnología y la historia, efectuó ensayos sobre la importancia del cacao, la grana y el cáñamo en los pueblos originarios, investigaciones sobre técnicas agrícolas, botánicas, médicas y comerciales prehispánicas, y expediciones a las ruinas de Xochicalco. Sobre economía y tecnología, análisis de la producción agrícola y minera en la Nueva España, e informes sobre nuevas tecnologías aplicables. También fue coleccionista de archivos y bibliotecas prehispánicas y coloniales, y de productos naturales y restos arqueológicos.
A su vez, se ocupó de la divulgación de estos y otros hallazgos científicos y técnicos en publicaciones creadas y sostenidas por él, como el “Diario literario de México” (1768), del que se publicaron ocho números; “Asuntos varios sobre ciencias y artes” (1772-1773), con 13 números; “Observaciones sobre la física, historia natural y artes útiles” (1787-1788), con 14 publicaciones, y “Gazeta de literatura de México” (1788-1795), todas suspendidas por órdenes del gobierno virreinal. También fue colaborador de la “Gaceta de México” (1784-1797).
Fue miembro de la Academia de Ciencias de París (1771), la Real Sociedad Vascongada de Amigos del País y del Real Jardín Botánico de Madrid (1773). Falleció el 2 de febrero de 1799.
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